Europa activa un plan para evitar naufragios: ¡°Ya no hay excusas¡±
La UE reforzar¨¢ los recursos de la misi¨®n de vigilancia mar¨ªtima Trit¨®n
La fuerza de las im¨¢genes de inmigrantes rescatados en las costas italianas, y sobre todo la convicci¨®n de que s¨®lo representan la punta del iceberg de un problema mayor, moviliz¨® este lunes a la Uni¨®n Europea. La tragedia del barco hundido el pasado s¨¢bado con casi 1.000 personas a bordo, seg¨²n algunos testimonios, congreg¨® en Luxemburgo a los ministros europeos de Exteriores e Interior y activ¨® la convocatoria este jueves de una cumbre extraordinaria de jefes de Estados y de Gobierno en Bruselas. Como primera se?al ante los naufragios, los ministros aprobaron un plan de 10 puntos que incluye un refuerzo de las operaciones de vigilancia y salvamento en el Mediterr¨¢neo. El acuerdo result¨® menos ambicioso de lo que propon¨ªa la Comisi¨®n Europea, partidaria de duplicar el presupuesto de esos programas.
Pese a que la mayor parte de lo acordado ya figuraba en la agenda de los ministros comunitarios, ha hecho falta la presi¨®n de los naufragios para activarlos. ¡°Ya no hay m¨¢s excusas. Lo ocurrido no es s¨®lo una tragedia en las costas, sino que podr¨ªa convertirse en una tragedia para Europa, que tiene ahora que demostrar su capacidad de actuaci¨®n y su unidad. Espero que las medidas de hoy representen un primer paso que finalmente pueda ser adoptado¡±, inst¨® la alta representante para la Pol¨ªtica Exterior Europea, Federica Mogherini.
Los requerimientos de la jefa de la diplomacia comunitaria no son ret¨®ricos. Los Estados miembros han mostrado hasta ahora importantes reticencias para avanzar en un enfoque com¨²n hacia la inmigraci¨®n y este lunes mismo, con los recientes fallecimientos en el Mediterr¨¢neo, rebajaron el alcance de lo sugerido por la Comisi¨®n. El Ejecutivo comunitario propon¨ªa duplicar el presupuesto (tres millones de euros mensuales) y los medios t¨¦cnicos (12 equipos) de la operaci¨®n Trit¨®n, lanzada a finales del a?o pasado para vigilar las costas italianas, y tambi¨¦n de Poseid¨®n, en las costas griegas. Finalmente, el prop¨®sito qued¨® en un gen¨¦rico incremento de medios y un aumento del radio de acci¨®n de esas misiones, aunque el detalle final deber¨¢ ser refrendado el pr¨®ximo jueves por los jefes de Estado y de Gobierno.
La medida respond¨ªa al clamor de Italia, Espa?a, Malta y otros pa¨ªses afectados por el problema y se adopta a pesar de que muchos Estados creen que desplegar activos mar¨ªtimos y a¨¦reos en las fronteras alienta la inmigraci¨®n irregular. ¡°El efecto llamada existe, pero mientras haya riesgo de tragedias, tienen que desplegarse los medios adecuados¡±, razon¨® el ministro espa?ol del Interior, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz.
Otro compromiso difuminado respecto a los deseos de la Comisi¨®n fue el n¨²mero de refugiados que los pa¨ªses europeos est¨¢n dispuestos a asumir voluntariamente. La UE apenas acogi¨® en 2014 a 7.500 demandantes de asilo, en colaboraci¨®n con Naciones Unidas, una cantidad irrisoria en comparaci¨®n con los 57.000 absorbidos por Estados Unidos. El Ejecutivo comunitario ped¨ªa un modesto cupo de 5.000, pero las cantidades han sido eliminadas del documento final. No obstante, los jefes de Estado y de Gobierno podr¨ªan mejorar esta iniciativa.
Los pa¨ªses se comprometen igualmente a luchar de manera m¨¢s eficaz contra las redes de tr¨¢fico de inmigrantes y a destruir los barcos que se les requisen. La agencia europea para los demandantes de asilo asistir¨¢, adem¨¢s, con personal a Italia y Grecia, dos de los pa¨ªses m¨¢s afectados por las llegadas de extranjeros. Tambi¨¦n se desplegar¨¢n funcionarios europeos en las regiones de crisis para realizar labores de inteligencia sobre asuntos migratorios.
Los pa¨ªses aceptan acoger a m¨¢s refugiados, sin precisar cifras
M¨¢s controvertidas resultan dos de las medidas pactadas: la toma de huellas digitales a los demandantes de asilo y una mejora de los programas para la repatriaci¨®n r¨¢pida de los llamados inmigrantes irregulares, es decir, aquellos que no re¨²nen los requisitos para solicitar asilo. En la pr¨¢ctica la mayor parte de quienes acometen esta peligrosa ruta hacia Europa pueden alegar riesgo vital si permanecen en sus territorios.
A cambio, aceleran las devoluciones de los inmigrantes econ¨®micos
Fuera de este paquete de urgencia, aunque muy conectado con la crisis de naufragios, los ministros de Exteriores abordaron la descomposici¨®n libia. Casi todos los pa¨ªses miembros apoyan una misi¨®n militar en Libia una vez est¨¦ constituido el Gobierno de unidad que intenta promover la ONU, con la mediaci¨®n de Bernardino Le¨®n. El servicio diplom¨¢tico europeo ha elaborado diversas propuestas que incluyen un control de la seguridad interna del pa¨ªs, una mera supervisi¨®n del alto el fuego, un refuerzo de las fronteras o una misi¨®n naval que vigile las costas libias e impida la salida de buques sospechosos de traficar con personas. Pero las decisiones no est¨¢n tomadas. ¡°No se ha discutido con ese detalle; ahora la prioridad es avanzar en el Gobierno inclusivo¡±, explic¨® el titular espa?ol de Exteriores, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa-Margallo.
M¨¢s all¨¢ de acciones a corto plazo, algunos expertos reclaman a la UE una voluntad m¨¢s decidida de influir en los pa¨ªses que constituyen un foco de pobreza e inestabilidad, el verdadero desencadenante de estas tragedias: ¡°La UE invierte mucho dinero en esos pa¨ªses, pero no llega a desarrollar proyectos que mejoren las infraestructuras o las econom¨ªas de los pa¨ªses en dificultades; esa inversi¨®n deber¨ªa haber permitido un papel pol¨ªtico m¨¢s evidente y una mayor presencia en la regi¨®n; es una debilidad pol¨ªtica europea¡±, argumenta Barah Mika?l, investigador de la casa de an¨¢lisis Fride.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.