"2014 fue de los peores a?os para la prensa en Am¨¦rica Latina¡±
El relator para la Libertad de Expresi¨®n de la CIDH, Edison Lanza, conversa con EL PA?S con motivo del D¨ªa Mundial de la Libertad de Prensa
Para Edison Lanza, relator especial para la Libertad de Expresi¨®n de la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el organismo que vigila los derechos humanos en las Am¨¦ricas, este es un continente que, en materia de libertad de expresi¨®n ¡°funciona a dos velocidades¡±. Por un lado, est¨¢ el grupo de pa¨ªses ¡ªla mayor¨ªa, en opini¨®n de Lanza¡ª donde el respeto a este derecho se cumple ampliamente. Pero hay otros, lamenta, en los que este garante de la democracia es atacado, ya sea desde las instituciones o por la violencia de grupos criminales que han provocado que 2014 sea uno de los peores para la prensa de la ¨²ltima d¨¦cada.
Pregunta. ?Qu¨¦ es lo que m¨¢s le preocupa sobre la libertad de expresi¨®n en las Am¨¦ricas?
Respuesta. El aumento de la violencia contra periodistas y comunicadores. 2014 fue un a?o grav¨ªsimo, tal vez uno de los peores de la ¨²ltima d¨¦cada, con 25 asesinatos de periodistas y comunicadores y m¨¢s de 400 agresiones de distintos tipos y amenazas. M¨¦xico est¨¢ a la cabeza con al menos ocho asesinatos, y luego Guatemala, Honduras, Brasil y Paraguay con entre tres y cuatro asesinatos cada uno. El otro fen¨®meno en aumento es el uso de figuras penales para sancionar y perseguir tanto opiniones cr¨ªticas como informaci¨®n de inter¨¦s p¨²blico, con lo que se van reduciendo los espacios de control social, de cr¨ªtica p¨²blica y discusi¨®n. El ¨²ltimo caso es la denuncia penal que present¨® [el presidente de la Asamblea Nacional] Diosdado Cabello contra periodistas y directivos de varios medios en Venezuela por reproducir un art¨ªculo que lo alud¨ªa publicado originalmente en el diario ABC. Hay casos tambi¨¦n en Guatemala, Honduras y en Brasil, tambi¨¦n est¨¢ Ecuador.
P. La Relator¨ªa surgi¨® por la convicci¨®n en muchos pa¨ªses que sal¨ªan de procesos dictatoriales de que la libertad de expresi¨®n es un garante de otros derechos fundamentales. ?Se les est¨¢ olvidando este compromiso?
R. Deber¨ªa renovarse. No son todos, pero hay una parte importante de los pa¨ªses que, o no quieren hablar de este tema o directamente empiezan a avanzar con regulaciones que van cercando la libertad de expresi¨®n y la van arrinconando. Y se va naturalizando esta situaci¨®n y, muchas veces, en los ¨¢mbitos multilaterales, para que el tema no sea un elemento de discordia, se va evitando. Hay una necesidad de que el hemisferio tenga una mirada com¨²n sobre temas de democracia y derechos humanos y en particular de libertad expresi¨®n, de volver a valorarla como un elemento constitutivo esencial.
P. La Relator¨ªa se ha manifestado a menudo preocupada por fen¨®menos de censura en la regi¨®n. ?Sigue est¨¢ndolo?
R. Hay un nuevo fen¨®meno de censura indirecta en Am¨¦rica Latina: son empresarios que adquieren medios de comunicaci¨®n en todo el continente. Su pr¨¢ctica es cambiar la l¨ªnea editorial de los medios que compran y ponerla al servicio de los Gobiernos, y por tanto eso es un ejercicio de una suerte de censura donde hay una connivencia entre el sector privado y el p¨²blico. Del mismo modo, en Venezuela la sociedad civil trajo pruebas a la CIDH de que los principales diarios han sido adquiridos por grupos empresariales privados de los que no se sabe qui¨¦nes son y qui¨¦nes est¨¢n detr¨¢s. Y que al poco de comprarlos, lo que han hecho es cambiar la l¨ªnea editorial y empezar a ejercer la censura internamente al interior de los medios. Son formas que no se puede decir que sean atribuibles a la libertad de mercado; son formas de ejercer la censura de una manera creativa, o de ejercer presi¨®n sobre los periodistas de una manera creativa.
P. ?En qu¨¦ se diferencia este fen¨®meno de la concentraci¨®n cl¨¢sica de medios?
R. Cinco o diez a?os atr¨¢s, esto no era un fen¨®meno extendido. Las casas period¨ªsticas eran tradicionales, ten¨ªan sus l¨ªneas editoriales con las que se puede estar o no de acuerdo. S¨ª, tenemos todav¨ªa un problema de concentraci¨®n de medios en manos de algunos grupos espec¨ªficos en muchos de nuestros pa¨ªses, pero sab¨ªamos qui¨¦nes eran y qui¨¦nes son. Pero hoy el fen¨®meno es una falta de transparencia y opacidad en la propiedad de medios de comunicaci¨®n que adem¨¢s va acompa?ado de un cambio de l¨ªnea editorial y, muchas veces, de represi¨®n hacia el interior de los medios. Por tanto, creo que ya no es un hecho aislado, se est¨¢ convirtiendo en un fen¨®meno.
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