Diputado busca doble
Un parlamentario mexicano lanza un concurso para buscar un sosias que le represente en los actos p¨²blicos
Al diputado Renato Tronco G¨®mez le gusta ganar votos por la cara. Literalmente. El parlamentario de Veracruz, de 45 a?os, en su af¨¢n por sumar adeptos y no defraudar a sus seguidores, ha sorprendido a M¨¦xico al convocar un concurso nacional para buscar un doble. Otro Renato Tronco G¨®mez, de bigote negro y sombrero ranchero, que le alivie la carga de trabajo diaria y haga de sosias en los inacabables actos, eventos, presentaciones que fatigan su jornada. ¡°Si la gente acepta que env¨ªes a un tercero, qu¨¦ mejor que este sea tu doble¡±, sostiene.
- ?Pero no est¨¢ enga?ando usted a la gente?
- No, porque se les dir¨¢ que es un doble.
- ?Y qu¨¦ puede decirles un doble a los ciudadanos?
- Tendr¨¢ que superar una capacitaci¨®n y llevar los temas estudiados. Adem¨¢s, siempre est¨¢ mi equipo para decirle qu¨¦ puede decir o no.
Aparte de sorprendente, el diputado estatal Tronco es, cuando menos, escurridizo. Aunque se declara independiente, en pocos a?os ha dado la vuelta a pr¨¢cticamente todo el ruedo pol¨ªtico. Fue alcalde por el PAN, luego pas¨® al Partido Revolucionario Veracruzano (filial del PRI), y en 2013 obtuvo su esca?o por el Partido Verde Ecologista de M¨¦xico. En este acelerado viaje, no ha faltado la pol¨¦mica. Como diputado, adem¨¢s de una intens¨ªsima actividad social, ha batido el r¨¦cord de absentismo parlamentario en Veracruz.
¡°No me da tiempo de acudir a todas partes, no doy abasto. Por eso busco un doble. Se trata de que me ayuden a entregar, por ejemplo, mobiliario escolar, que vayan a fiestas, cabalgatas, eventos culturales y c¨ªvicos. A m¨ª me alcanza para tres actos al d¨ªa, pero hay m¨¢s¡±. Con este objetivo, Tronco ha impreso carteles y puesto en circulaci¨®n a trav¨¦s de las redes sociales la convocatoria Se busca a mi doble. El primer premio son 40.000 pesos (2.650 d¨®lares) y, como insiste el diputado, un contrato de trabajo. En el jurado participar¨¢ ¨¦l mismo y su esposa. Una vez elegido, el sosias ser¨¢ ¡°capacitado¡± y su trabajo quedar¨¢ sometido a algunas reglas, como la prohibici¨®n de participar en tareas legislativas. ¡°Tampoco podr¨¢ acostarse con mi mujer¡±, carcajea Tronco a solas.
El concurso, p¨®lvora en la red, ha sido recibido en M¨¦xico con bochorno y no pocas cr¨ªticas. Hartos de las astracanadas de la exuberante fauna pol¨ªtica local, numerosos medios han vapuleado al diputado. En la memoria pesan casos como el del alcalde de San Blas, que gan¨® las elecciones tras confesar p¨²blicamente que durante su mandato hab¨ªa robado ¡°pero poquito¡±.
¡°Esto del doble es un despliegue de cinismo. Debe estar compitiendo por ser el m¨¢s rid¨ªculo. Pero este tipo de pol¨ªticos no lleg¨® de Marte para conquistar M¨¦xico, sino que son nuestros vecinos. De la respuesta que les d¨¦ la ciudadan¨ªa, depender¨¢ nuestro futuro pol¨ªtico¡±, afirma el director del?Instituto Mexicano para la Competitividad, Juan Pardinas.
Pero las cr¨ªticas no le hacen mella a Tronco. Aspira a gobernador y en su camino est¨¢ dispuesto a atravesar el espejo. No le importa un inquietante escenario de troncos multiplicados, de verbo grueso y modales rancheros. Cuando se le pregunta qu¨¦ har¨¢ si en el concurso le sale m¨¢s de un doble, incluso tres o cuatro, no lo duda un instante: ¡°Qued¨¢rmelos¡±.
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