Cuba sin marcha atr¨¢s
Los expertos prev¨¦n un cambio econ¨®mico acelerado y otro sociopol¨ªtico m¨¢s pausado
"El camino puede ser largo y empedrado", dijo Dagoberto Rodr¨ªguez, el embajador cubano en M¨¦xico, en la inauguraci¨®n de un seminario sobre Cuba. El com¨²n de las consideraciones de los expertos en la primera jornada de conferencias organizada por el Colegio de M¨¦xico?coincidi¨® en lo complicado del camino y tambi¨¦n en que no tiene marcha atr¨¢s.
El profesor de Harvard Jorge Dom¨ªnguez opin¨® que ni siquiera una victoria del Partido Republicano en las elecciones de 2016 a la presidencia de EE UU descarrilar¨ªa o trabar¨ªa demasiado el proceso. Cree que en ese caso el presidente cubano Ra¨²l Castro amarrar¨ªa m¨¢s las bridas del cambio social y pol¨ªtico pero no dejar¨ªa de acelerar la transformaci¨®n de la econom¨ªa.
Soraya Castro, del Instituto Superior de Relaciones Internacionales de La Habana, record¨® que los sondeos recientes de las nueve principales encuestadoras de EE UU ratifican que la mayor¨ªa de los estadounidenses est¨¢ a favor de levantar el embargo a Cuba. Y que entre los grandes capitales de EE UU se est¨¢n formando grupos de inter¨¦s (de sectores como el agr¨ªcola, el farmac¨¦utico, el portuario y el de viajes, puso como ejemplos) que presionar¨¢n para que cristalice la reconciliaci¨®n con la isla. Peter Hakim, presidente em¨¦rito de Di¨¢logo Interamericano, dijo que el proceso le parece irreversible: "Cuba no es una amenaza para la seguridad nacional de EE UU. Ser¨ªa rid¨ªculo volver al punto en el que est¨¢bamos".
"El camino puede ser largo y empedrado", dijo Dagoberto Rodr¨ªguez, el embajador cubano
El embajador cubano afirm¨® que "la normalidad" llegar¨¢ cuando EE UU cumpla con tres condiciones que La Habana considera "innegociables": levantar el embargo, devolver Guant¨¢namo y no promover la oposici¨®n interna al r¨¦gimen. Rodr¨ªguez a?adi¨® que independientemente de lo que haga EE UU su gobierno aspira a poner a Cuba en cotas de crecimiento superiores al 5% del PIB gracias a los cambios econ¨®micos que ha puesto en marcha.
Omar Everleny P¨¦rez Villanueva, economista de la Universidad de La Habana y asesor de la comisi¨®n de reforma econ¨®mica del gobierno cubano, expuso que "para resolver los problemas acumulados durante tanto tiempo" Cuba necesita una inyecci¨®n de inversi¨®n extranjera: seg¨²n sus datos, para crecer al 6% tendr¨ªan que llegar entre 2.000 y 2.500 millones de d¨®lares al a?o. P¨¦rez Villanueva previ¨® un crecimiento sustancial en 2015; subray¨® que desde el anunci¨® del deshielo entre EE UU y Cuba del 17 de diciembre la llegada de turistas no ha dejado de aumentar, y puso un ejemplo del proceso de apertura econ¨®mica: entre 2015 y 2016 el sector de la gastronom¨ªa pasar¨¢ de gesti¨®n estatal a cooperativa, lo que implica que unos 3.000 establecimientos como restaurante y cafeter¨ªas ser¨¢n dirigidos por particulares sin dejar de ser bienes p¨²blicos.
El cambio estructural en Cuba no ha ocurrido de un d¨ªa para otro por la reconexi¨®n diplom¨¢tica de la isla con EE UU. Cecilia Bobes, de la Facultad Latinoamericana de Ciencia Sociales, explic¨® que el giro arranc¨® en los noventa por la ca¨ªda del bloque sovi¨¦tico, que motiv¨® "medidas de excepci¨®n para superar la crisis", y se consolid¨® como una reconfiguraci¨®n socioecon¨®mica de hecho desde 2006, a?o en que Fidel Castro enferm¨® y cedi¨® el poder a su hermano Ra¨²l. El desarrollo gradual en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas de una franja de la econom¨ªa "desconectada de la l¨®gica estatal" y la correspondiente aparici¨®n de un "microempresariado" ha llevado seg¨²n Bobes a "una nueva ¨¦tica de racionalidad econ¨®mica que codifica el ¨¦xito como consumo".?
El auge de lo privado, la llegada de remesas (a unas familias s¨ª y a otras no) y la merma de la calidad de los servicios de salud y educaci¨®n han ido alimentando la desigualdad, seg¨²n Bobes. P¨¦rez Villanueva ofrece datos que indican el ascenso de un sector de la poblaci¨®n: en 2008 pasaron 80.000 cubanos por los hoteles de la isla y en 2014 fueron 878.000. En vista de eso opina que el Estado podr¨ªa tener que sustituir su sistema universal de servicios por uno "focalizado": "No puede ser que reciba seis libras de arroz el due?o de un paladar [una casa de comidas] que va de vacaciones a Europa y no darle siete libras a un viejito porque no alcanza para m¨¢s".
El historiador cubano Rafael Rojas, radicado en M¨¦xico e investigador del Centro de Investigaci¨®n y Docencia Econ¨®micas, estim¨® que no se trata de un cambio parcial "sino integral"; de una "reforma" o una "transici¨®n" en el sentido pleno de estas palabras. "Si bien el sistema pol¨ªtico no ha sido reformado, el funcionamiento de sus instituciones se est¨¢ teniendo que modificar como consecuencia de los cambios". El estadounidense Geoff Thale, de la ONG de derechos humanos WOLA, juzg¨® que el cambio est¨¢ cuajando pero sin un norte doctrinal demasiado espec¨ªfico: "No hay una visi¨®n fija entre los l¨ªderes cubanos. No creo que hayan elegido un modelo chino o vietnamita. Es un work in progress [un trabajo sobre la marcha]".
"Cuba no es una amenaza para la seguridad nacional de EE UU. Ser¨ªa rid¨ªculo volver al punto en el que est¨¢bamos", afirm¨® Peter Hakim
Thale apunt¨® que tres eventos de los pr¨®ximos tres a?os ser¨¢n claves para la redefinici¨®n del rumbo cubano: el congreso del Partido Comunista de 2016, la concreci¨®n de una nueva ley electoral en 2018, y ese mismo a?o la retirada de Ra¨²l Castro de la presidencia. Se especula que su sustituto ser¨¢ el vicepresidente Miguel D¨ªaz-Canel, nacido en 1960, lo que representar¨ªa "el traspaso del liderazgo hist¨®rico a los que nacieron despu¨¦s de la Revoluci¨®n de 1959".
Despu¨¦s de seis d¨¦cadas de antagonismo entre Cuba y Estados Unidos el futuro se presenta esperanzador aunque con cautela. Peter Kornbluh, coautor de Back Channel to Cuba [El canal oculto hacia Cuba], ilustr¨® la delicada relaci¨®n entre estos dos pa¨ªses con una an¨¦cdota. En 1963, el abogado James Donovan, enviado a La Habana por Kennedy para dialogar con Fidel Castro, le dio al jefe revolucionario su idea de c¨®mo deber¨ªan tratarse. "?Sabe c¨®mo hacen el amor los puercoespines?". Castro le dijo que no. "Con mucho cuidado", le respondi¨® Donovan.
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