Brasil inicia una era de austeridad con un dr¨¢stico ajuste

El Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), va a hacer un ajuste de 70.000 millones de reales (unos 23.300 millones de euros) en las cuentas de 2015. La medida va encaminada ¡ªadem¨¢s de a ajustar unas cuentas que se tambalean¡ª a tranquilizar a los mercados. Los cifras de la econom¨ªa brasile?a, ciertamente, no ayudan a eso: las previsiones del Gobierno para este a?o prev¨¦n un retroceso del 1,2% del PIB (el a?o acab¨® con una econom¨ªa paralizada: 0,01% del PIB). La inflaci¨®n tambi¨¦n crece demasiado: la previsi¨®n de los mercados es que en 2015 acabe en torno al 8,5%, casi el doble que el objetivo oficial del 4,5%.

Estos recortes presupuestarios constituyen el mayor ajuste desde que el Partido de los Trabajadores lleg¨® al poder, hace m¨¢s de 12 a?os. Adem¨¢s, el Gobierno, que ya ha subido la gasolina y la factura de la electricidad, envi¨® al Congreso m¨¢s iniciativas recaudadoras. Una de ellas consiste en subir las tasas sobre los beneficios de los bancos, que se elevan del 15% al 20%. Tambi¨¦n pretend¨ªa retirar una retribuci¨®n salarial extra para todos los trabajadores que llevan m¨¢s de tres meses trabajando ¡ªy concederla solo a los trabajadores con m¨¢s de seis meses¡ª pero la oposici¨®n del Parlamento, cuya alianza gubernamental es muy inestable, le ha aconsejado retirarla.

Todos los ministerios se ver¨¢n afectados por los recortes, incluidos los de Educaci¨®n y Sanidad. La medida, eso s¨ª, no afectar¨¢ de lleno a uno de los programas bandera del PT, el Bolsa Familia, una subvenci¨®n para familias con pocos recursos con hijos en edad escolar.

Para tranquilizar a buena parte de sus votantes y de sus aliados, Rousseff ha asegurado que las medidas presupuestarias no van a paralizar el Gobierno. Pero lo ha conseguido solo a medias. De hecho, un comunicado firmado por las centrales sindicales, grupos de intelectuales y, entre otros, dos senadores del PT, denuncia que los recortes no traer¨¢n otra cosa que m¨¢s paro y m¨¢s recesi¨®n.

Con todo, estas medidas son la consecuencia l¨®gica de la elecci¨®n, para el puesto clave de ministro de Econom¨ªa, de Joaquim Levy, conocido por favorecer los recortes y por ser un especialista en la contenci¨®n del gasto. El ministro ha asegurado que su intenci¨®n es volver al nivel de gasto de 2013, ya que 2014, a?o de elecciones, ¡°fue una ¨¦poca de excesos¡±, lo que repercuti¨® en el d¨¦ficit p¨²blico. Levy ha sido criticado por sectores del PT desde que tom¨® posesi¨®n, en enero de 2015.

Elogios de Christine Lagarde

El anuncio de estas medidas coincide con la visita a Brasil de la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde. Lagarde ha elogiado la contenida pol¨ªtica fiscal y los ajustes de Rousseff desde que enero tom¨® posesi¨®n de su segundo mandato al frente del pa¨ªs. Seg¨²n Lagarde, los resultados de esta pol¨ªtica ya se est¨¢n notando en Brasil.

En la introducci¨®n del 17? Seminario Anual de Metas para la Inflaci¨®n, celebrado en R¨ªo de Janeiro, Lagarde afirm¨® que la austeridad macroecon¨®mica brasile?a va ¡°claramente en la direcci¨®n correcta¡±. La dirigente francesa se hizo eco de las cr¨ªticas vertidas contra la reciente subida de tipos de inter¨¦s en Brasil (13,25 anual) en un escenario de patente desaceleraci¨®n econ¨®mica por parte del Gobierno de Rousseff para enfriar el consumo (y de paso bajar la inflaci¨®n). ¡°Nuestros an¨¢lisis indican que una nueva dosis de est¨ªmulo podr¨ªa amenazar seriamente la credibilidad conquistada en el pasado. Tal credibilidad es particularmente importante para restaurar y sostener las perspectivas de un crecimiento fuerte, equilibrado e inclusivo¡±, destac¨® Lagarde.

En presencia del presidente del Banco Central de Brasil (organizador del evento), Alexandre Tombini, Lagarde defendi¨® la necesidad de tener en cuenta la ¡°diversidad¡± de pa¨ªses a la hora de dise?ar pol¨ªticas globales y estim¨® que Am¨¦rica Latina todav¨ªa afronta dificultades derivadas de la ca¨ªda en los precios de las materias primas, la reducci¨®n de la demanda mundial (¡°particularmente de China¡±) y la ¡°desaceleraci¨®n de la demanda dom¨¦stica¡±.