Ir¨¢n reduce los subsidios a la gasolina para hacer frente al d¨¦ficit
El Gobierno de Rohani acaba con las cuotas mensuales de carburante subvencionado, pero a¨²n vende los combustibles por debajo del precio de coste
Ir¨¢n ha empezado a recortar los subsidios que minan el presupuesto nacional. Desde el pasado martes, el Ministerio de Petr¨®leo ha dejado de cargar los 60 litros mensuales de gasolina subvencionada en las tarjetas de autom¨®viles y motos privados. Los iran¨ªes tienen hasta final del verano para utilizar las cantidades que hayan acumulado en ellas. Tambi¨¦n ha subido el precio del gas para uso dom¨¦stico. El objetivo es poner coto al enorme d¨¦ficit.
El Gobierno de Hasan Rohani hab¨ªa anunciado que el precio de los carburantes no aumentar¨ªa hasta pr¨®ximo a?o persa, que se inicia en marzo. Sin embargo, el pasado domingo decidi¨® eliminar el suministro de gasolina subvencionada a 7.000 riales por litro (0,20 euros). A partir de ahora, el precio ¨²nico ser¨¢ de 10.000 riales el litro, el mismo que los automovilistas pagaban cuando su consumo exced¨ªa los 60 litros subsidiados.
Aun as¨ª, el nuevo importe todav¨ªa es menor que el precio en origen en la regi¨®n del golfo P¨¦rsico, en torno a 0,45 euros, lo que significa que el Estado sigue cubriendo parte del coste. Esta pol¨ªtica ha alentado el contrabando de combustible a los pa¨ªses vecinos.
"Los subsidios para gasolina han dado lugar a corrupci¨®n y abusos por parte de algunos individuos", constataba el director de la Compa?¨ªa Nacional de Distribuci¨®n de los Productos Petroleros, Naser Sayad¨ª, al defender la subida de los carburantes.
Adem¨¢s, el Gobierno ha aumentado un 15 por ciento el precio del gas para uso dom¨¦stico, pero lo mantiene sin variaciones para los sectores industrial y agr¨ªcola. Ir¨¢n consume 180 millones de metros c¨²bicos de gas al a?o, de los cuales 50 millones se destinan a los hogares.
El incremento de los precios de la energ¨ªa oblig¨® al portavoz del Gobierno, Mohammad Bagher Noubakht, a acudir a la televisi¨®n para justificar la medida. Noubakht argument¨® que el presupuesto estatal ha bajado de 120.000 millones de d¨®lares en el periodo del ex presidente Mahmud Ahmadineyad a 24.000 millones en la actualidad, y calific¨® de ¡°err¨®nea¡± la pol¨ªtica de subsidios directos.
¡°Estamos sumamente en apuros¡±, admiti¨® el alto funcionario. La gente debe saber ¡°a qu¨¦ limitaciones nos enfrentamos¡±, a?adi¨®, ¡°las sanciones tambi¨¦n nos afectan y no tenemos acceso a muchos de nuestros fondos; adem¨¢s, no hay que olvidar la ca¨ªda del precio del crudo¡±.
Cada iran¨ª recibe mensualmente un pago de 445.000 riales (unos 12 euros), independientemente de su situaci¨®n econ¨®mica. Cuando Rohani lleg¨® a la presidencia, se distribu¨ªan 420 billones de riales. Casi dos a?os despu¨¦s, su Gobierno ha reducido esa cifra a 320 billones de riales, retirando ayudas a los m¨¢s adinerados. Eso le ha permitido destinar 48 billones de riales a mejorar el sistema sanitario.
Sin embargo, determinar a qui¨¦nes suspender esos beneficios resulta complicado y puede restar apoyos al presidente. Seg¨²n datos oficiales, 200.000 iran¨ªes se han dado de baja del sistema, o han sido borrados porque viven fuera. Pero resulta insuficiente. A¨²n faltan fondos para cubrir un tercio del coste total de esos pagos directos con los que Ahmadineyad quiso compensar la progresiva reducci¨®n de los subsidios. Mientras, fuentes parlamentarias, cifran en 500 billones de riales el d¨¦ficit total en el ¨²ltimo a?o.
De ah¨ª que s¨®lo haya podido materializarse la mitad del presupuesto destinado a obras civiles, seg¨²n el diputado Musareza Servati, miembro de la comisi¨®n de Planificaci¨®n y Presupuesto del Parlamento. O que haya 2.900 proyectos inacabados, la mayor¨ªa herencia del mandato de Ahmadineyad. En esta situaci¨®n de penuria presupuestaria, el polit¨®logo Sadegh Zibakalam se ha quejado de la elevada asignaci¨®n a los llamados ¡°centros culturales¡±, 60 billones de riales, de los que s¨®lo el 13 por ciento se destina al Ministerio de Cultura.
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