Votos con m¨²sica: Clinton la valiente, Trump el rockero y Bush el aut¨®ctono
Las canciones de campa?a sirven a los candidatos en EE UU para reforzar la imagen que quieren presentar de s¨ª mismos
Hay canciones que inexplicablemente aciertan de pleno con nuestro estado de ¨¢nimo, con un cambio en la vida, una mirada del mundo. Y las hay que clavan la estudiada imagen de un candidato en campa?a. Hillary Clinton debe ser valiente, decir lo que piensa, mostrarse como es, no callarse. Al menos eso es lo que se dice la candidata a s¨ª misma, de acuerdo con su selecci¨®n musical para presentar la que por ahora es la candidatura m¨¢s potente a la Presidencia de Estados Unidos en 2016. Lo hizo con la canci¨®n Brave (2007), de Sara Bareilles, que sonaba cuando Clinton sub¨ªa al escenario en Nueva York el pasado s¨¢bado para su primer gran discurso de campa?a. Justo antes de que EE UU escuchara las propuestas de Clinton, la letra de la canci¨®n, una melod¨ªa pop de aire festivo, anunciaba:
Me pregunto qu¨¦ pasar¨ªa?
Si dices lo que quieres decir
Y dejas brotar las palabras
En serio, quiero verte ser valiente
Uno de los problemas de Hillary Clinton es que siempre se la ha acusado de ser poco clara, de no decir lo que piensa. Lleva con ese sambenito a las espaldas toda su carrera pol¨ªtica desde que acab¨® la presidencia de su marido. Es progresista, pero a la vez establishment. El mensaje de la canci¨®n de Baerilles parece hecho a prop¨®sito para vencer esa desconfianza. Otro pasaje:
Todo el mundo ha estado ah¨ª, a todo el mundo le ha menospreciado el enemigo
Han sucumbido al miedo, se han quitado de en medio
han bajado la cabeza ante los poderosos
No huyas, deja de morderte la lengua
Quiz¨¢ hay un camino para salir de la jaula en la que vives
Quiz¨¢ un d¨ªa de estos puedas dejar entrar la luz
Mu¨¦strame lo grande que es tu valor
D¨ª lo que quieras decir
Deja brotar las palabras
En serio, quiero verte ser valiente
Hillary Clinton ya no se calla m¨¢s. Viene a decir lo que piensa, a ser valiente. Va a ser ¡°el campe¨®n que Am¨¦rica necesita¡±, como dijo al presentar su campa?a. S¨ª, es verdad, ha hecho cosas de las que no est¨¢ orgullosa, ha tenido que lidiar con la parte m¨¢s fea del sistema, pero ahora va a hacer lo que piensa de verdad. Ese viene a ser el mensaje, que est¨¢ bastante en sinton¨ªa con la asimilaci¨®n del discurso m¨¢s a la izquierda del Partido Dem¨®crata, un movimiento con el que puede desactivar al ala del partido que la ve¨ªa como un producto de establishment sin la frescura reformadora de grandes favoritos de la izquierda como Bernie Sanders o Elizabeth Warren, que finalmente no se ha presentado.
El discurso de Clinton acab¨® con una canci¨®n diferente. Otra melod¨ªa pop, esta vez de Kris Allen. La canci¨®n Fighters (2012) sonaba mientras la candidata se abrazaba a su familia y era jaleada por sus simpatizantes despu¨¦s de su primer gran discurso. Subliminalmente, lo que el p¨²blico escuchaba era esta letra:
Dices que esta vida te est¨¢ hundiendo y necesitas algo por lo que vivir
Yo s¨¦ de lo que hablas
Est¨¢s gritando a pleno pulm¨®n y apuesto a que ni siquiera te escuchan
Yo s¨¦ de lo que hablas
As¨ª que levanta el pu?o y no olvides
Que nacimos para ser luchadores
Somos fuertes, somos supervivientes
Te pueden golpear y hacerte caer
Pero volveremos, porque despu¨¦s de todo
Nacimos para ser luchadores
Esta campa?a est¨¢ en una fase muy preliminar, pero parece dif¨ªcil que alguien supere el momento musical que logr¨® Bill Clinton en 1993 cuando consigui¨® reunir en un escenario a Fleetwood Mac, que llevaban una d¨¦cada separados, y a Michael Jackson, para cantar Don't stop. El mensaje, "no dejes de pensar en el futuro", era imparable:
Menos claro est¨¢ qu¨¦ quer¨ªa decir el multimillonario Donald Trump cuando el pasado martes anunci¨® su candidatura al ritmo de Rockin' in the free world (1989), de Neil Young. La canci¨®n tiene un tono himno-rock que invita a a gritar el estribillo pu?o en alto. Cumpli¨® esa funci¨®n tras la ca¨ªda del muro y fue una especie de himno oficioso de aquellos meses. Quiz¨¢ Trump quiera decir que en su hipot¨¦tica administraci¨®n el mundo libre va a seguir tocando rock sin parar. Pero tendr¨¢ que encargar una versi¨®n propia, porque el estribillo de Neil Young es una iron¨ªa cargada sobre im¨¢genes siniestras de la vida en EE UU:
Veo una mujer en la noche, con un beb¨¦ en su mano
Bajo una vieja farola, junto a un cubo de basura
Abandona a su hijo y se va a meterse algo
Odia su vida y lo que ha hecho con ella
Hay un ni?o m¨¢s que nunca ir¨¢ al colegio
Nunca se enamorar¨¢, nunca ser¨¢ guay
Sigue tocando el rock en el mundo libre
Neil Young, canadiense, no solo es partidario de los dem¨®cratas sino que ha hecho saber que Trump no tiene permiso para utilizar la canci¨®n en su campa?a.
Buen momento para recordar que algo parecido le pas¨® a Ronald Reagan en su campa?a para la reelecci¨®n en 1986, cuando se apropi¨® de uno de los mayores himnos del rock, Born in the USA, de Bruce Springsteen, publicado el a?o anterior y que llenaba estadios por todo el mundo. La canci¨®n cuenta la desoladora historia de un hombre que vuelve de Vietnam y se encuentra con el desprecio de su pa¨ªs.
El ¨²ltimo por el momento en anunciar su candidatura, Jeb Bush, opt¨® por el country durante su discurso del lunes en Miami. Las im¨¢genes del candidato abrazado a su familia fueron acompa?adas por la canci¨®n Homegrown, de Zac Brown, que viene a significar algo as¨ª como aut¨®ctono o de mi pueblo. Bush parece querer decir que es un tipo sencillo, de su casa, apegado al terru?o, a los amigos de toda la vida y a las peque?as costumbres, que no necesita salir de su pueblo. El mensaje contrasta un poco con alguien que se presenta a presidente de Estados Unidos:
Tengo buenos amigos que viven en mi calle
Tengo una mujer guapa que me rodea con sus brazos
Aqu¨ª, en un pueblo peque?o donde me siento en casa
Tengo todo lo que necesito y nada que no necesite
Soy de mi tierra
No fue la ¨²nica referencia musical en el discurso de Bush, que dej¨® claro que piensa insistir mucho en su cercan¨ªa con la comunidad latina al ser precedido en el escenario por las Chirino Sisters, el grupo de las hijas de Willy Chirino, exiliado cubano.
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