Latinos al poder

A partir del inolvidable Franklin D. Roosevelt, que gan¨® cuatro elecciones, una norma constitucional limit¨® a dos mandatos el m¨¢ximo tiempo para ocupar la Casa Blanca. Si no fuera por eso, Barack Obama ¡ªque en los dos ¨²ltimos a?os de su segundo mandato ha ofrecido su mejor cara, la m¨¢s brillante¡ª, podr¨ªa volver a ser presidente. ?Por qu¨¦? Porque hoy es el ¨²nico pol¨ªtico en Estados Unidos que podr¨ªa concentrar el voto latino, el afroamericano y el que est¨¢ inconforme con el imperialismo chino.

Ha empezado la campa?a del 2016 y se distinguen dos tendencias claras. La primera, ese conjunto de aspirantes republicanos que buscar¨¢n conquistar el Despacho Oval. La segunda, la hegemon¨ªa que, por ahora, tiene Hillary Clinton en el proceso dem¨®crata para sustituir a su antiguo enemigo, despu¨¦s, aliado, y posteriormente, jefe. Mientras, hay 50.000 nuevos votantes latinos cada mes y unos 55,4 millones de estadounidenses de ese origen que ya representan m¨¢s del 17% de la poblaci¨®n total del pa¨ªs.

Hay 50.000 nuevos votantes latinos cada mes y la poblaci¨®n de ese origen representa el 17% de la poblaci¨®n

Los votantes latinos no s¨®lo han sido la clave de las elecciones de 2008 y de 2012, sino que ahora exigen pol¨ªticas que vayan m¨¢s all¨¢ del ¡°hola, amigos¡± o ¡°hasta la vista, amigos¡±, las escasas frases en espa?ol que les han dirigido algunos pol¨ªticos estadounidenses. Obama no tuvo fuerza para consolidar la reforma migratoria, pero s¨ª el valor de presentarla y de acusar a los partidos, especialmente al republicano, de falta de sensibilidad e inteligencia pol¨ªtica por no aprobarla.

Hoy, los latinos ¡ªcon m¨¢s del 70% de sus votantes nacidos en Estados Unidos¡ª ya no tienen nada que ver con aquellos tiempos en los que Ronald Reagan, en funci¨®n de las elecciones, decidi¨® legalizar a casi tres millones de inmigrantes. Entonces, ellos y sus hijos se avergonzaban de hablar espa?ol. Ahora hablarlo les da ventaja, capacidad y armas para defenderse. Adem¨¢s, hay que tener en cuenta que el voto latino se agrupa en torno a Univisi¨®n, la cadena hispana que est¨¢ haciendo la mayor campa?a de denuncia contra la pol¨ªtica mexicana y su presidente.

Obama no tuvo fuerza para consolidar la reforma migratoria, pero s¨ª el valor de presentarla

Los latinos, con un esquema de vida diferente del de los afroamericanos, piden a los contendientes y a los partidos ofertas y pol¨ªticas que no est¨¦n basadas en la seguridad social, en cupones para comida o en la caridad del Estado. Ahora, la comunidad latina aspira a gobernar. Busca el ¨¦xito y no la caridad. Se ha vuelto competitiva y cada vez dir¨¢ mucho m¨¢s. Da la impresi¨®n de que ni el Partido Dem¨®crata ni el Partido Republicano est¨¢n en condiciones de construir una oferta pol¨ªtica que vaya m¨¢s all¨¢ del hecho de que se debe contar con los latinos s¨®lo para ganar.

La capacidad que tiene Obama para hablar con ellos, a pesar de haber sido el presidente que m¨¢s latinos ha deportado en la historia del pa¨ªs, puede ser un factor decisivo a la hora de inclinar el voto de esa comunidad. Y en la otra vertiente, un hecho incontestable: el crecimiento demogr¨¢fico de las minor¨ªas en Estados Unidos muestra que los asi¨¢ticos y los chinos ¡ªque no son lo mismo¡ª se convertir¨¢n en los pr¨®ximos a?os en una de las minor¨ªas m¨¢s importantes, lo que marcar¨¢ un cambio sustantivo.

Los latinos y los afroamericanos nunca fueron dependientes de su pasado

Los latinos y los afroamericanos nunca fueron dependientes de su pasado. Tienen valores sentimentales vinculados con sus or¨ªgenes, pero no tienen estructura pol¨ªtica para repetir una cultura basada en sus ancestros. Sin embargo, la comunidad asi¨¢tica siempre respetar¨¢ a sus mayores, sin importar si vinieron de Taiw¨¢n o de Shangh¨¢i. Por tanto, quien logre dominarlos dominar¨¢ su voto.