Ecuador: turbulencia en el horizonte

Pocos d¨ªas atr¨¢s en su cuenta de Twitter, el Presidente Correa reconoci¨® la dificultad econ¨®mica que vive el pa¨ªs y lament¨® no contar con el tipo de cambio como herramienta de pol¨ªtica monetaria. Si bien en el pasado Correa se hab¨ªa negado a abandonar la dolarizaci¨®n, ello no fue debido a su convicci¨®n personal sino a los alt¨ªsimos niveles de aceptaci¨®n popular del sistema actual.

A Correa la dolarizaci¨®n le significa una traba en su proyecto populista, pero una salida del sistema podr¨ªa intensificar el clima de tensi¨®n que se vive actualmente. Es que Ecuador se encuentra en una crisis. En lo econ¨®mico, el exponencial crecimiento del gasto p¨²blico, los altos niveles de corrupci¨®n visibles principalmente en los fara¨®nicos pero inconclusos proyectos de infraestructura, el insostenible d¨¦ficit y el grave error de no haber creado un fondo antic¨ªclico durante los a?os de bonanza, han dejado al pa¨ªs indefenso ante el nuevo escenario con precios del petr¨®leo a la baja.

La pregunta no es si ajustar o no ajustar, la pregunta es c¨®mo realizar el ajuste

Informes internacionales as¨ª lo indican. Un reporte reciente de Bank of America /Merrill Lynch presenta un panorama de extrema fragilidad para el pa¨ªs en t¨¦rminos macroecon¨®micos, y sugiere que Ecuador podr¨ªa ser la pr¨®xima ¡°Grargentina¡± (Grecia-Argentina). Del reporte se desprende tres datos insoslayables.

Primero, el excesivo e incontrolado gasto p¨²blico. Sin ajustes significativos, el d¨¦ficit fiscal para este a?o y el pr¨®ximo ser¨ªa superior a los $10 mil millones, llevando el nivel de deuda por encima del 40% del PIB. Segundo, esta situaci¨®n fiscal se vio a¨²n empeorada tras la ca¨ªda de los precios del crudo, en un pa¨ªs en el que las exportaciones de petr¨®leo representan el 52% de las exportaciones totales y el 28% de la recaudaci¨®n fiscal. La ca¨ªda en su precio signific¨® una ca¨ªda del 21% en la recaudaci¨®n proveniente del petr¨®leo, una ca¨ªda del 26% en las exportaciones, y un aumento significativo del d¨¦ficit comercial. Y tercero, ante la imposibilidad de controlar el tipo de cambio, la ¨²nica forma de volver al equilibrio dadas las nuevas condiciones es a trav¨¦s de un recorte fiscal de entre el 8.5-10.5% del PIB, y una depreciaci¨®n del tipo de cambio real que pudiese llegar al 43%.

En el frente pol¨ªtico, Correa ha llevado al pa¨ªs a una crisis

En este contexto, la pregunta no es si ajustar o no ajustar, la pregunta es c¨®mo realizar el ajuste. Tras el intento por ahora fallido de instalar una moneda electr¨®nica, y con un mercado internacional probablemente menos dispuesto a continuar financiando el derroche, a Correa le quedan dos opciones. Por el lado nominal, la soluci¨®n ser¨ªa abandonar la dolarizaci¨®n y devaluar el tipo de cambio. Esta decisi¨®n podr¨ªa traer consigo un desenlace similar al ocurrido en Argentina a fin de 2001, es decir, ca¨ªda de dep¨®sitos en el sector bancario, corralito y ¡°pesificaci¨®n¡± de los dep¨®sitos del p¨²blico. En otras palabras, los activos convertidos a la nueva moneda perder¨ªan significativamente su valor.

Alternativamente, el ajuste podr¨ªa venir por el lado real, recortando el gasto y buscando una reducci¨®n de los salarios en t¨¦rminos reales. De acuerdo con el informe de Bank of America, los salarios deber¨ªan ajustarse a la baja en un 27%. En la pr¨¢ctica, esto solo ser¨ªa posible a trav¨¦s de un aumento del desempleo y una ca¨ªda de la producci¨®n. Un ajuste de este tipo podr¨ªa ser manejado pol¨ªticamente si el pa¨ªs tuviese un marco institucional saludable, con instituciones capaces de manejar una crisis de tal magnitud y, sobre todo, con la existencia de un fondo antic¨ªclico que permita suavizar el aterrizaje. Pero lejos de haber construido estas instituciones y de haber generado estabilidad pol¨ªtica, durante su largo mandato Correa ha hecho exactamente lo contrario.

La ¨²nica raz¨®n de esta situaci¨®n es su propia irresponsabilidad e incapacidad de entender que todo ciclo econ¨®mico positivo en alg¨²n momento se revierte

En el frente pol¨ªtico, Correa ha llevado al pa¨ªs a una crisis, reflejado en la fuerte ca¨ªda de su popularidad y en las masivas protestas sociales que han tenido lugar durante los ¨²ltimos meses. Estas protestas han estado motivadas por el intento del mandatario de enmendar la constituci¨®n e intentar la reelecci¨®n indefinida, por sus comportamientos autoritarios contra la prensa y la disidencia en general, por los cada vez m¨¢s visibles esc¨¢ndalos de corrupci¨®n, y por su control total sobre un sistema judicial que jam¨¢s investiga al poder.

La situaci¨®n no es culpa de la ca¨ªda de los precios y el cambio en el contexto internacional. Si bien Correa ya est¨¢ buscando un enemigo externo a quien culpar por los problemas que vive el pa¨ªs, la ¨²nica raz¨®n de esta situaci¨®n es su propia irresponsabilidad e incapacidad de entender que todo ciclo econ¨®mico positivo en alg¨²n momento se revierte. En lo econ¨®mico, Correa gast¨® mucho m¨¢s all¨¢ de sus posibilidades, dejando al pa¨ªs desprotegido. Su irresponsabilidad fiscal no fue consistente con la dolarizaci¨®n. En lo pol¨ªtico, no solo no supo construir instituciones capaces de resistir una crisis, sino que llev¨® al pa¨ªs a altos niveles de confrontaci¨®n.

* Ezequiel V¨¢zquez-Ger es Director del Centro de Investigaci¨®n Period¨ªstica en las Am¨¦ricas. Twitter: @Ezequielvazquez