?Es posible terminar con la impunidad en M¨¦xico?

M¨¦xico vive un momento crucial de su historia contempor¨¢nea. El problema de la impunidad generalizada de la clase pol¨ªtica¡ªsea en casos de corrupci¨®n, de asesinato o desaparici¨®n forzada de personas, o por omisi¨®n de acciones esenciales en materia de justicia y de pol¨ªticas p¨²blicas¡ªha llegado a un punto l¨ªmite. El cambio de ¨¦poca que se perfila es en realidad la culminaci¨®n de un largo proceso de acumulaci¨®n de indignaciones.?

Hace unos d¨ªas, la Comisi¨®n Internacional de Expertos Independientes nombrada por la CIDH con el aval del gobierno federal para hacer una investigaci¨®n propia sobre el caso de la desaparici¨®n forzada de 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, rindi¨® un informe contundente, que demuestra que ni la Procuradur¨ªa de Justicia de Guerrero ni la General de la Rep¨²blica hicieron una investigaci¨®n cient¨ªfica y fiable. Por el contrario, su trabajo fue sospechosamente parcial y ofreci¨® conclusiones insostenibles.

Las m¨²ltiples y grav¨ªsimas omisiones en la investigaci¨®n involucran a la Polic¨ªa Federal y al propio ej¨¦rcito. El caso de Ayotzinapa es solamente la punta del iceberg de la crisis humanitaria que representa la desaparici¨®n de m¨¢s de 23,000 personas y la muerte de m¨¢s de 100,000 en los ¨²ltimos 10 a?os.

El colapso patente del sistema de justicia demuestra que la crisis no puede ser resuelta por el gobierno actual, pues sus instituciones son disfuncionales. La reforma penal no avanza y abunda la simulaci¨®n. Se requiere una entidad independiente. Se ha pospuesto la creaci¨®n de una Fiscal¨ªa Nacional aut¨®noma, ya prevista constitucionalmente en la llamada ¡°reforma pol¨ªtica¡± de 2014.

Es urgente que la nueva instituci¨®n nazca cuanto antes con un titular intachable, con real autonom¨ªa, con un presupuesto suficiente y asesor¨ªa internacional. Si bien el gobierno mexicano no aceptar¨¢ una verdadera supervisi¨®n internacional, al modo del exitoso modelo guatemalteco, al menos apoyo t¨¦cnico, log¨ªstico y evaluaci¨®n independiente deber¨ªan ser solicitados.

Otros tipos de impunidad existen y se conocen cada vez mejor, empezando por el conocido caso del conflicto de inter¨¦s del Presidente y del Secretario de Hacienda por la compra subsidiada de unas casas que les vendi¨® una empresa constructura favorecida con m¨²ltiples contratos del gobierno. Su exoneraci¨®n por parte del Secretario de la Funci¨®n P¨²blica, nombrado por el propio Presidente, caus¨® estupor, aunque no sorpresa, por su pobreza legal y moral.

Mientras tanto, emergen d¨ªa tras d¨ªa m¨¢s pruebas que vinculan, no s¨®lo a la empresa Higa, la de las casas, sino tambi¨¦n a la espa?ola OHL en esc¨¢ndalos relacionados con la construcci¨®n y administraci¨®n de carreteras en el Estado de M¨¦xico, gobernado hasta hace cuatro a?os por el ahora presidente Pe?a Nieto.?

Hace unos d¨ªas el abogado de una empresa que tiene un litigio con OHL por un contrato de vigilancia del aforo vehicular en una carretera, fue detenido sin orden judicial, acus¨¢ndolo de haber ¡°filtrado¡± a los medios audios comprometedores que involucran al Secretario de Comunicaciones y Transportes en una trama de ocultamiento de las corruptelas cometidas por la empresa trasnacional. Una investigaci¨®n independiente por una Comisi¨®n Especial del Congreso ser¨ªa la acci¨®n l¨®gica a tomar en un pa¨ªs democr¨¢tico en este caso, pero la constituci¨®n no prev¨¦ este mecanismo.

Esc¨¢ndalos de corrupci¨®n en los gobiernos estatales y en los poderes judiciales locales y federal emergen casi a diario, involucrando a pol¨ªticos de todos los partidos. Es preciso poner en el centro de la transformaci¨®n del Estado mexicano la lucha contra la corrupci¨®n, empezando por anular a nivel constitucional el fuero de los pol¨ªticos y altos cargos, crear la fiscal¨ªa independiente, acelerar la creaci¨®n del Sistema Nacional Anticorrupci¨®n y autorizar legalmente al congreso a cumplir su funci¨®n de vigilancia e investigaci¨®n.

Si no hay iniciativa desde la clase pol¨ªtica, la presi¨®n desde abajo puede dar lugar pronto a resultados insospechados

Alberto J. Olvera es Profesor-Investigador del Instituto de Investigaciones Hist¨®rico-Sociales de la Universidad Veracruzana