Seis meses para acordar el final del conflicto en Colombia

El desarme de la guerrilla y su reincorporaci¨®n a la vida civil, as¨ª como un cese bilateral al fuego, que en Colombia llaman el Fin del Conflicto, con may¨²sculas, son los temas pendientes que tendr¨¢n que abordar los negociadores del Gobierno y de las FARC en los pr¨®ximos seis meses, tiempo l¨ªmite para la firma de la paz. Tambi¨¦n falta por definir el mecanismo que se utilizar¨¢ para que los colombianos digan si o no a los acuerdos y los instrumentos jur¨ªdicos que permitan ponerlos en pr¨¢ctica.

Estos temas se han venido trabajando paralelamente en la mesa de negociaciones, precisamente para no prolongar los di¨¢logos. Con relaci¨®n al desarme, el mi¨¦rcoles se ha anunciado que empezar¨¢ a m¨¢s tardar a los 60 d¨ªas despu¨¦s de que se firme el acuerdo. Sobre c¨®mo se har¨¢, es lo que falta por pactar. Hay un grupo de generales activos y jefes guerrilleros que trabaja para ese fin desde febrero, en La Habana. Aunque lo que sucede al interior no trasciende, las FARC hablan de dejaci¨®n de armas y no de entrega, lo que confunde a los colombianos. El Gobierno ha dicho en reiteradas ocasiones que para que las FARC puedan hacer pol¨ªtica, tendr¨¢n que hacerlo sin armas. ¡°Por eso, el proceso de dejaci¨®n de armas debe culminar a la mayor brevedad¡±, dijo Santos este mi¨¦rcoles desde La Habana.

Sobre el desarme, tambi¨¦n ha trascendido que la idea que m¨¢s acogida tiene es que los guerrilleros se concentren en diferentes zonas del pa¨ªs, las cuales contar¨ªan con verificaci¨®n internacional. Las FARC, seg¨²n Enrique Santos, periodista y hermano del presidente Juan Manuel Santos, han pedido 50 de estas zonas que corresponder¨ªan al n¨²mero de frentes (grupos), pero el Gobierno solo estar¨ªa dispuesto a darles seis, que estar¨ªan alejadas de fronteras y pueblos.

Entre los temores de la guerrilla, una vez dejen las armas, est¨¢n los riesgos para su seguridad. No deja de rondarla el la muerte de m¨¢s de 1.500 militantes de la Uni¨®n Patri¨®tica, un partido que surgi¨® tras las fallidas negociaciones de paz en 1984. ¡°Est¨¢n deseosos de dar el paso a la pol¨ªtica legal sin armas. Comprometidos sinceramente pero llenos de dudas... sobre la forma concreta de abordar esa transformaci¨®n. Muchos temores sobre su propia seguridad f¨ªsica e inseguros sobre c¨®mo comunicar a la base guerrillera ese paso a la legalidad", dijo el hermano de Santos a una cadena radial. El mandatario asegur¨® desde Cuba que el Gobierno dar¨¢ todas las garant¨ªas.

Sobre la implementaci¨®n de los acuerdos tambi¨¦n se ha avanzado. Hace dos semanas el Gobierno present¨® ante el Congreso un proyecto de reforma constitucional con el que busca que se le den facultades extraordinarias por 90 d¨ªas a Santos, prorrogables por 90 m¨¢s, para expedir leyes despu¨¦s de que se firme la paz, con las cuales aterrizar¨ªan los acuerdos con la guerrilla. El proyecto tambi¨¦n contempla la posibilidad de que se constituya una comisi¨®n especial legislativa que estar¨ªa compuesta por parlamentarios de las comisiones constitucionales de C¨¢mara y Senado, que expedir¨ªan las leyes y reformas necesarias para agilizar la paz.

?El Uribismo, el mayor opositor, ha dicho que no apoya este proyecto, que tendr¨¢ que pasar por ocho debates en el Congreso, pero cuenta con el apoyo de la coalici¨®n del Gobierno, que es mayor¨ªa. Horas antes de que se conocieran los acuerdos sobre justicia, el senador ?lvaro Uribe anticip¨® que se ¡°opondr¨¢ al indulto de los guerrilleros¡± y calific¨® el anuncio como una forma de ¡°permisividad¡± y un ¡°indulto¡± al narcotr¨¢fico que ha sido, seg¨²n ¨¦l, la ¡°base del terrorismo¡±.