La Justicia de Brasil investigar¨¢ las cuentas electorales de Dilma Rousseff

La tregua en la crisis pol¨ªtica ha durado poco para la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff. Pocos d¨ªas despu¨¦s de inaugurar un nuevo gabinete para acomodar a aliados a cambio de apoyo estable del Congreso, la mandataria ha sufrido una derrota importante frente a la oposici¨®n. En un paso sin precedentes, el Tribunal Superior Electoral (TSE), una rama espec¨ªfica de la Justicia de Brasil que investiga delitos electorales, decidi¨® abrir una investigaci¨®n a petici¨®n de la oposici¨®n sobre presuntas irregularidades en las cuentas de la campa?a presidencial de 2014. En la pr¨¢ctica, en ¨²ltima instancia, el TSE puede desde apenas multar la campa?a hasta quitar a los dos del poder, con la cancelaci¨®n del cargo de la presidenta y de su vicepresidente, Michel Temer (PMDB), aunque los especialistas, por ahora, consideran poco probable este ¨²ltimo desenlace.

En cualquier caso, la decisi¨®n debilita a¨²n m¨¢s al Gobierno, que corre contra el tiempo para tratar de bloquear otra bomba de relojer¨ªa: el an¨¢lisis de las cuentas del Gobierno de 2014 por parte del Tribunal de Cuentas de la Uni¨®n (TCU), previsto para este mi¨¦rcoles. El juicio, donde pueden ser rechazadas las cuentas por supuestas maniobras fiscales para maquillar las cuentas p¨²blicas, es, junto con la acci¨®n electoral del TSE, la apuesta de la oposici¨®n para acortar el mandato de Rousseff. Los diputados de la oposici¨®n solo esperan la decisi¨®n negativa del tribunal ¡ªque, si se produce, ser¨¢ tambi¨¦n inaudita en la historia de este ¨®rgano de supervisi¨®n de bajo voltaje pol¨ªtico¡ª para basar una petici¨®n m¨¢s de destituci¨®n contra ella en la C¨¢mara de los Diputados.

El debate sobre los criterios t¨¦cnicos frente a los pol¨ªticos ha basado toda la defensa jur¨ªdica del Gobierno Rousseff. Sus abogados argumentan que las maniobras fiscales conocidas como pedaladas siempre se han practicado, pero nunca se han castigado, mientras que su tropa de choque da entrevistas y hace discursos que enfrentan el informe del ministro en el TCU. La oposici¨®n, por su parte, dice que las reacciones del Gobierno son ¡°artima?as condenadas al fracaso¡±.

Mientras tanto, el Ejecutivo reacciona. El equipo de Rousseff present¨® una protesta contra uno de los miembros del TCU, Augusto Nardes, ya que alega que el pol¨ªtico, que comenz¨® su carrera en la dictadura militar brasile?a, ya ha hecho declaraciones condenando a la presidenta y no es imparcial.

La noche del jueves pasado, la gesti¨®n Rousseff apel¨® ante el Supremo Tribunal Federal (STF), la ¨²ltima instancia judicial brasile?a, para derribar la sentencia, en caso de que al ponente no se le impida votar en el TCU. En su defensa, el ministro Nardes dijo que no anticip¨® su decisi¨®n y que las entrevistas concedidas por ¨¦l se basaron en decisiones anteriores del propio tribunal. Adem¨¢s, denunci¨® que la gesti¨®n del Partido de los Trabajadores estaba tratando de intimidarlo. El mes pasado, la seguridad del ministro fue reforzada tras recibir mensajes amenazantes por correo electr¨®nico. Una de ellas, seg¨²n el propio Nardes relat¨® al diario O Globo, dec¨ªa: "Vamos a acabar contigo". Para rematar, este mi¨¦rcoles el diario Folha de S. Paulo publicaba que Nardes est¨¢ siendo investigado por haber recibido pagos de una empresa investigada por fraudes fiscales.

La tentativa del Gobierno es retrasar lo m¨¢ximo posible el an¨¢lisis de esas cuentas para que Rousseff pueda recuperar su base de apoyo en el Congreso. La semana pasada la presidenta hizo una reforma ministerial para darles m¨¢s espacio a los aliados, especialmente al PMDB, para asegurar la base en las votaciones en el Parlamento. Sin embargo, este martes el Gobierno no consigui¨® garantizar el qu¨®rum necesario para votar los vetos presidenciales y alejar de una vez por todas los llamados proyectos bomba, que incluyen el aumento de los funcionarios y otras medidas en el momento en que Rousseff lucha para tapar un agujero fiscal de 30.000 millones de reales (m¨¢s de 6.800 millones de euros) en el presupuesto del a?o que viene.