Los escasos y fr¨¢giles aliados de Estados Unidos en Siria
Tras cuatro a?os de guerra, Washington no ha logrado apuntalar una oposici¨®n moderada
Tras m¨¢s de cuatro a?os de guerra civil, Estados Unidos cuenta con escasos y fr¨¢giles aliados en Siria. El Gobierno de Barack Obama acumula m¨¢s fracasos que ¨¦xitos en su intento de apuntalar una oposici¨®n moderada al r¨¦gimen de Bachar el Asad y al Estado Isl¨¢mico (EI).
Dos episodios recientes evidencian el c¨²mulo de problemas en el polvor¨ªn sirio. El Pent¨¢gono anunci¨® este viernes una reformulaci¨®n de su programa de entrenamiento de rebeldes moderados contra el EI al reclutar a muchos menos insurgentes de los previstos. Y el Gobierno estadounidense acus¨® esta semana a Rusia de bombardear intencionadamente las posiciones en Siria de rebeldes apoyados por la CIA y que luchan contra las fuerzas del r¨¦gimen.
La cautela define la estrategia de Obama en Siria. El presidente, acusado de pasividad ante un conflicto que se ha cobrado al menos 250.000 vidas, ha recelado de involucrarse. Cuando lo ha hecho, ha sido presionado por los acontecimientos.
La Administraci¨®n act¨²a en Siria a trav¨¦s de tres v¨ªas, que a continuaci¨®n se detallan por su orden cronol¨®gico:
1. Departamento de Estado
El aparato diplom¨¢tico estadounidense provee desde 2012 asistencia no letal (lo que excluye armamento) a rebeldes moderados. Esa asistencia asciende a unos 400 millones de d¨®lares. El ¨²ltimo paquete, de 70 millones, se anunci¨® el pasado marzo. El objetivo, seg¨²n el Departamento de Estado, es ¡°ayudar a empoderar a la oposici¨®n moderada para crear las condiciones para una eventual transici¨®n pol¨ªtica al colmar las necesidades diarias del pueblo sirio y proveer servicios esenciales¡±.
EE UU ha entregado a unidades moderadas armadas -previamente supervisadas para evitar v¨ªnculos extremistas- alimentos, material m¨¦dico, veh¨ªculos, maquinaria pesada, equipamiento de comunicaci¨®n e inform¨¢tica y generadores el¨¦ctricos. La ayuda es un ¡°apoyo¡± a los esfuerzos de los rebeldes de ¡°defender sus comunidades¡±, seg¨²n explica en una entrevista telef¨®nica un funcionario del Departamento de Estado.
El funcionario declina detallar cu¨¢ntos insurgentes han recibido esa asistencia ni c¨®mo se gestiona. ¡°Apoyamos a muchos grupos a lo largo de Siria, muchos de nuestros esfuerzos han ido al norte de Siria¡±, dice. Entre los recipientes, a?ade, hay grupos kurdos, que son uno de los aliados m¨¢s fieles de EE UU sobre el terreno.
El programa de ayuda no letal estuvo suspendido durante dos meses despu¨¦s de que a finales de 2013 milicianos islamistas asaltaran un almac¨¦n con el material estadounidense. En paralelo, el Departamento de Estado cuenta con otros proyectos de ayuda social y mantiene contactos pol¨ªticos ¡°regulares¡± con la debilitada coalici¨®n opositora siria, que considera el representante ¡°leg¨ªtimo¡± del pueblo sirio.
2. CIA
La Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas inglesas) inici¨® hace dos a?os un programa para entrenar y armar a insurgentes moderados que luchan contra las fuerzas del r¨¦gimen sirio. Como todas las actividades de la CIA, el programa es secreto. Los escasos detalles que han trascendido han sido a trav¨¦s de filtraciones period¨ªsticas. Un portavoz de la CIA declin¨® hacer declaraciones.
La CIA ha entrenado a unos 5.000 rebeldes. La semana pasada sufrieron uno de sus mayores reveses al ser atacados por la aviaci¨®n rusa. Mosc¨², aliado de Damasco, bombardea desde hace una semana posiciones de un amplio espectro de fuerzas opositoras al r¨¦gimen. Los ataques rusos a los rebeldes respaldados por la CIA se sucedieron durante varios d¨ªas, lo que ha llevado al Gobierno estadounidense a concluir que fueron intencionados, seg¨²n dijeron funcionarios al diario The Wall Street Journal.
La entrega de armas ligeras a los rebeldes se inici¨® en septiembre de 2013. Al marzo siguiente, la CIA proporcion¨® a algunos comandantes leales sofisticados misiles TOW para usar contra los tanques del Ej¨¦rcito sirio. Seg¨²n el Journal, la posesi¨®n de esos misiles explica el inter¨¦s ruso por atacar a los rebeldes.
Uno de los grandes miedos del Gobierno Obama es que su ayuda acabe en las manos de extremistas. Los rebeldes, seg¨²n el rotativo, se quejaron de que las entregas de armamento de la CIA eran insuficientes. Pero la agencia extrem¨® su cautela despu¨¦s de que el a?o pasado el Frente Al Nusra, la filial de Al Qaeda en Siria, atacara a los rebeldes y se hiciera con sus armas.
El programa de la CIA se gestiona en coordinaci¨®n con otros similares de pa¨ªses como Arabia Saud¨ª, Catar y Turqu¨ªa, los m¨¢s activos en impulsar una insurgencia armada -que combina grupos moderados y extremistas- contra El Asad. Los rebeldes apoyados por la CIA est¨¢n presentes en el sur y el norte de Siria. Contribuyeron en mayo a las conquistas de posiciones del r¨¦gimen al noroeste del pa¨ªs.
3. Pent¨¢gono
La estrategia del Pent¨¢gono en Siria es dual. Desde hace un a?o, ataca desde el aire posiciones del EI mientras f¨ªa cualquier avance terrestre al avance de rebeldes moderados porque carece de militares estadounidenses desplegados. Pero esta segunda pata ha fracasado. El Departamento de Defensa ha desplegado a unos 80 rebeldes en Siria, muy lejos del objetivo de entrenar a unos 5.000 al a?o. Otros murieron o desertaron.
El programa del Pent¨¢gono, iniciado en mayo con entrenamientos en Jordania y Turqu¨ªa, era el m¨¢s ambicioso del Gobierno Obama para impulsar una oposici¨®n moderada armada. Contaba con un presupuesto de 500 millones de d¨®lares y aspiraba a crear un Ej¨¦rcito de unos 15.000 rebeldes en tres a?os. En un dif¨ªcil juego de equilibrios, la Casa Blanca estableci¨® que su prioridad deb¨ªa ser combatir al EI, no a las fuerzas de El Asad (cuya salida sigue pidiendo, pero con el que comparte un enemigo com¨²n en los yihadistas).
Sin embargo, el riguroso filtro para descartar a extremistas hizo que se reclutaran a muchos menos insurgentes. Y una vez desplegados sobre el terreno, fueron atacados por grupos extremistas, que les robaron material, y el Pent¨¢gono reconoci¨® que no ten¨ªa control sobre ellos.
Tras semanas de debate interno, el Gobierno anunci¨® este viernes que pone en pausa ese programa para centrarlo en el entrenamiento y la entrega de armas a comandantes moderados que cuentan con sus propias unidades de combatientes. EE UU seleccionar¨¢ a los comandantes pero ya no a los combatientes, a los que tampoco entrenar¨¢ como hac¨ªa hasta ahora.
El modelo es la estrategia usada a principios de a?o en Kobane, fronteriza con Turqu¨ªa, donde EE UU se ali¨® con milicias kurdas que luchaban sobre el terreno. El Pent¨¢gono protegi¨® desde el aire esas milicias y les lanz¨® armas.
"Lo que est¨¢ haciendo Estados Unidos es demasiado poco y demasiado tarde"
El israel¨ª Itamar Rabinovich (Jerusal¨¦n, 1942) conoce bien la realidad siria. Entre 1992 y 1996 fue el negociador israel¨ª con Siria. En ese mismo periodo era el embajador de Israel en Estados Unidos. Ahora es profesor em¨¦rito en las universidades de Tel Aviv y Nueva York, y est¨¢ vinculado al laboratorio de ideas Brookings Institution en Washington.
En una entrevista telef¨®nica, Rabinovich critica la estrategia, desde el estallido de la guerra civil siria, de Estados Unidos con la oposici¨®n moderada al r¨¦gimen. "Es un c¨ªrculo vicioso: la oposici¨®n es d¨¦bil y est¨¢ dividida, y el apoyo de EE UU es muy limitado", dice. "Y una cosa lleva a la otra: sin apoyo efectivo de EE UU es dif¨ªcil [para la oposici¨®n] ser fuerte, y sin estar unida y ser efectiva es dif¨ªcil justificar el apoyo de EE UU".
El experto considera que el entrenamiento de rebeldes moderados es un "sustituto pobre" al rechazo del presidente Barack Obama de lanzar una intervenci¨®n militar en Siria que incluya tropas de combate estadounidenses. Rabinovich sostiene que el "momento" de ayudar a los insurgentes moderados contra el r¨¦gimen era en 2012. "Lo que est¨¢ haciendo Estados Unidos es demasiado poco y demasiado tarde", dice en la entrevista, realizada antes del anuncio este viernes del Pent¨¢gono de suspensi¨®n de su programa de entrenamiento de rebeldes que luchan contra el Estado Isl¨¢mico.
Rabinovich considera que EE UU percibe como un ¡°rev¨¦s¡± el inicio de la campa?a rusa de bombardeos contra grupos opositores al r¨¦gimen de Damasco, pero esgrime que el pueblo estadounidense no tiene demasiado inter¨¦s en la situaci¨®n en Siria por lo que no espera grandes cambios de estrategia del Gobierno Obama.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Pent¨¢gono
- CIA
- Barack Obama
- Guerra Siria
- Primavera ¨¢rabe
- Guerra civil
- Departamento Defensa EEUU
- Servicios inteligencia
- Revoluciones
- Estados Unidos
- Seguridad nacional
- Espionaje
- Conflictos pol¨ªticos
- Norteam¨¦rica
- Fuerzas seguridad
- Guerra
- Am¨¦rica
- Defensa
- Conflictos
- Pol¨ªtica
- Justicia
- Protestas sociales
- Malestar social
- Problemas sociales
- Sociedad
- Edici¨®n Am¨¦rica