Eduardo Frei: ¡°Venezuela es un caso tr¨¢gico en nuestra regi¨®n¡±
El expresidente critica el ¡°irrespeto a los derechos humanos¡± en la rep¨²blica bolivariana
Eduardo Frei (Santiago de Chile, 1942) fue uno de los primeros pol¨ªticos latinoamericanos que se pronunci¨® contra la condena a 13 a?os de c¨¢rcel del opositor venezolano Leopoldo L¨®pez. El expresidente chileno (1994-2000) defiende la democracia con la severidad de quien padeci¨® la dictadura militar de Augusto Pinochet, cuyo r¨¦gimen presuntamente asesin¨® a su padre, Eduardo Frei Montalva, el antecesor democratacristiano de Salvador Allende. A su paso por Madrid, el ahora embajador plenipotenciario para Asia-Pac¨ªfico del Gobierno de Michelle Bachelet recibe a EL PA?S para conversar sobre la coyuntura pol¨ªtica y econ¨®mica de Am¨¦rica Latina.
Pregunta. ?C¨®mo califica el silencio regional con respecto al caso de Leopoldo L¨®pez?
Respuesta. Hay que ser muy activos. El caso de Venezuela es un caso tr¨¢gico de nuestra regi¨®n. Un pa¨ªs de grandes riquezas que se transformado en un pa¨ªs, primero, de alta corrupci¨®n, segundo, que est¨¢ destruido econ¨®micamente ¡ªeste a?o va a decrecer entre -8% y -10%, el bol¨ªvar se vende a 700 pesos chilenos¡ª. Ahora, cuando uno critica su pa¨ªs, los venezolanos se molestan. Pero ellos s¨ª tienen derecho de criticarnos todo a nosotros. Y resulta que all¨ª no hay libertades, respeto a los derechos humanos, independencia de los poderes de Estado, se maneja la prensa...
P. ?Cu¨¢l es el panorama de los pr¨®ximos comicios en Venezuela?
Pregunt¨¦mosle a cualquier latinoamericano si preferir¨ªa vivir en Venezuela o en Chile
R. Vienen las elecciones y resulta que todos los dirigentes de la oposici¨®n no pueden presentarse. El Gobierno califica qui¨¦n puede ser candidato y qui¨¦n no. Tampoco hay observadores para los pr¨®ximos comicios. En la votaci¨®n anterior, pasaron muchos d¨ªas hasta tener los resultados finales. Y ¨²ltimamente han cambiado distritos electorales. Es una situaci¨®n insostenible que tenemos que rechazar con vehemencia.
Durante estos a?os se han creado muchas milicias armadas. ?A qui¨¦n responden esas milicias? ?Qu¨¦ van a hacer en caso de una situaci¨®n de crisis? Lo m¨¢s absurdo de esto es que ellos nos dan clase a nosotros. Ellos, que iban a construir la sociedad bolivariana, un pa¨ªs que iba a ser grandioso, que iba a acabar la pobreza, donde todos iban a ser iguales. Pregunt¨¦mosle a cualquier latinoamericano si preferir¨ªa vivir en Venezuela o en Chile. La sociedad que ellos han construido no es la mejor. No es buen ejemplo para Am¨¦rica Latina.
No estoy dispuesto a ceder nada de territorio a Bolivia
P. ?Cu¨¢l es su postura en el diferendo fronterizo con Bolivia?
R. No estoy dispuesto a ceder nada de territorio. Porque Bolivia ¡ªa diferencia de lo que dice¡ª nunca ha estado dispuesta al di¨¢logo, sino que lleg¨® y nos demand¨® en La Haya. Ese no es un gesto amistoso. Bolivia tiene todas las facilidades que no tiene ning¨²n pa¨ªs en los puertos de Chile. Y se las vamos a seguir dando, porque nosotros s¨ª cumplimos nuestra palabra. En el tratado de 1904, se entreg¨® perpetuo acceso libre al mar para Bolivia. Construimos caminos, ferrocarriles, bodegas¡ Usan bodegas para mantener por meses los productos, no pagan ning¨²n costo aduanero y hay puertos en Chile que tienen 80% de carga boliviana. Bolivia tiene todo el acceso al Pac¨ªfico, lo que no tiene es soberan¨ªa.
P. ?Los documentos desclasificados que entreg¨® EE UU a Chile dicen algo sobre la muerte de su padre?
R. Todo lo que hemos visto no da mucha informaci¨®n. Lo que se sabe ha sido gracias al ministro Alejandro Madrid, que lleva el caso Frei y ha revisado una parte poco conocida de la dictadura: la producci¨®n de qu¨ªmicos, botul¨ªnicos y gases en los laboratorios y las cl¨ªnicas clandestinas que hab¨ªa para eliminar a opositores. Hay informaci¨®n de que algunos de estos productos sal¨ªan de Estados Unidos a distintos pa¨ªses y despu¨¦s terminaban en Chile.
En el caso Frei ¡ªy as¨ª lo ha determinado Madrid¡ª, lo que necesitamos es la colaboraci¨®n del Ej¨¦rcito y de la Universidad Cat¨®lica, donde hab¨ªa muestras de su cuerpo. Hace ya cinco a?os que la Corte Suprema ratific¨® todo lo que hab¨ªa dicho Madrid. Incluso, le cambi¨® la car¨¢tula al proceso y puso: ¡°Asesinato por envenenamiento¡±.
P. ?Qu¨¦ puede aprender Colombia de la transici¨®n chilena cuando termine su proceso de paz?
Qu¨¦ van a hacer en Colombia con las v¨ªctimas y con las personas que violaron los derechos humanos
R. Estuve en Colombia hace un tiempo, en un foro, y una alta autoridad del Estado me critic¨® duramente por la transici¨®n chilena. Para ese entonces, ni siquiera se hablaba de negociaciones con la guerrilla. Le dije: ¡°El d¨ªa que ustedes vayan a terminar un proceso de paz, cu¨¢l va a ser el problema: qu¨¦ hacer con las v¨ªctimas y con las personas que violaron los derechos humanos¡±. Ese es el gran problema. En el caso de Colombia, se est¨¢ hablando de que las personas que entreguen informaci¨®n y colaboren con la justicia tendr¨¢n disminuci¨®n de penas, etc. Va a ser muy complicado.
P. ?Por qu¨¦ hay tanta reticencia de la ciudadan¨ªa frente al Acuerdo de Asociaci¨®n del Pac¨ªfico?
R. Todav¨ªa hay desconocimiento. Si uno ve lo que ha pasado en los ¨²ltimos meses, ha habido poco debate, por lo menos en Chile. El pa¨ªs tiene acuerdos comerciales con todos los que firman el TPP [por sus siglas en ingl¨¦s] y la condici¨®n b¨¢sica fue que nosotros no pod¨ªamos ceder terreno en cuanto a lo que hab¨ªamos logrado con cada uno de los pa¨ªses. Esto se cumple en uno de los temas m¨¢s discutidos, el de las patentes farmac¨¦uticas. Con Estados Unidos, ten¨ªamos fijado un per¨ªodo de duraci¨®n de cinco a?os para las patentes. Ellos ped¨ªan 13, pero al final respetaron el acuerdo de cinco a?os que hab¨ªamos firmado.
En la crisis, nos ha beneficiado lo que ha perjudicado a los otros pa¨ªses, porque Chile no tiene ni gas ni petr¨®leo
P. ?C¨®mo tiene que afrontar la regi¨®n la crisis econ¨®mica?
R. En mi tiempo, el cobre costaba 80 centavos de d¨®lar la libra [en 2010 lleg¨® a valer m¨¢s de cuatro d¨®lares]. Crecer a 6% u 8% era una proeza. El punto es c¨®mo los pa¨ªses han aprovechado esa bonanza. En el caso de Chile, nos sirvi¨® para pagar la deuda externa. Ahora somos un pa¨ªs acreedor y no estamos endeudados. Tambi¨¦n nos ha beneficiado lo que ha perjudicado a los otros pa¨ªses, porque Chile no tiene ni gas ni petr¨®leo. Nos ha ayudado que el precio bajara a la mitad. En determinado momento, llegamos a importar 15 mil millones de d¨®lares en combustible. Hemos avanzado mucho, pero hay que seguir invirtiendo en I+D, sobre todo el sector privado.
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