Mendoza, la argentina at¨ªpica, la ¨²nica provincia con cambio pol¨ªtico
La rica provincia del oeste, afectada por la crisis del campo y la inseguridad, ha sido la ¨²nica en la que el peronismo perdi¨® el poder
Las noticias pol¨ªticas de Mendoza har¨ªan a cualquier observador dudar ?Esto es Argentina? En un pa¨ªs en el que las divisiones son feroces, esta provincia, la ¨²nica que ha cambiado de manos en la catarata de elecciones de este a?o, vive un relevo ejemplar. El ganador, el radical Alfredo Cornejo, invit¨® a su casa al d¨ªa siguiente al gobernador derrotado, el peronista Paco P¨¦rez. Y ambos han pactado, antes incluso de que Cornejo asuma, aprobar juntos el endeudamiento que la provincia necesita para hacer frente a una situaci¨®n financiera muy complicada. Algunos dicen que la influencia chilena ¨CMendoza est¨¢ al lado de la frontera y a seis horas en coche de Santiago, donde acuden los argentinos con frecuencia a comprar de todo porque es mucho m¨¢s barato- tiene mucho que ver con este comportamiento ¨²nico en Argentina. ¡°Yo estudi¨¦ en Chile, admiro mucho su pol¨ªtica de Estado, esa cultura de respeto. Y esa era la idea, dar una se?al¡±, explica Cornejo en su despacho de alcalde de Godoy Cruz, un municipio de los alrededores de la capital, antes de asumir como gobernador. En Mendoza ha habido alternancia varias veces entre peronistas y radicales en estos 32 a?os de democracia sin mayores problemas.
Y sin embargo, hay pocos lugares m¨¢s argentinos que Mendoza, que tuvo como gobernador nada menos que al general San Mart¨ªn, el libertador, que salt¨® desde aqu¨ª a Chile para seguir con su lucha contra la dominaci¨®n espa?ola. Ahora la provincia, la ¨²nica en la que perdi¨® el peronismo, que controla todo el norte y este argentino, est¨¢ descolocada. Esta zona, muy rica, siempre fue una isla econ¨®mica en medio de provincias mucho m¨¢s pobres. Ahora vive con dureza la crisis de las industrias exportadoras argentinas, en especial la del vino, sobre todo por un peso sobrevalorado que el Gobierno se resiste a devaluar en pleno a?o electoral por el alto coste social que tendr¨ªa.
Pero Mendoza vive adem¨¢s algo in¨¦dito en esta ciudad siempre tranquila, elegante, capital del vino y del turismo: una ola de inseguridad producto del narcotr¨¢fico que ha provocado picos de violencia inauditos: 160 asesinatos en 2014. ¡°El problema es que metimos presos a los jefes de las bandas y empez¨® una sangrienta disputa por el territorio, pero ya est¨¢ bajando la cifra un poco en 2015. La gran mayor¨ªa de los asesinatos son ajustes de cuentas¡±, asegura Leonardo Comperatore, ministro de seguridad de la provincia, mientras comparte un mate en su despacho. Un paseo en coche por los barrios m¨¢s duros de Mendoza, 26 de enero o Santa Teresita, llenos de chabolas y suciedad, da una imagen del contraste latinoamericano entre la rica capital y las devastadas barriadas donde llega la emigraci¨®n del campo y los extranjeros.
Mendoza se ha convertido en la tercera provincia m¨¢s violenta, despu¨¦s de Santa Fe y Buenos Aires. El problema del narcotr¨¢fico, muy presente en la campa?a electoral de las presidenciales, est¨¢ afectando a los barrios pobres de todas las grandes ciudades argentinas, algo que nunca hab¨ªa sucedido. ¡°Cuando Colombia dej¨® de producir empez¨® Per¨², Bolivia, Paraguay. Brasil y Argentina estamos en la ruta de salida de esa droga, es dif¨ªcil frenarlo¡±, se?ala Comperatore, que a¨²n as¨ª no cree que su gobierno haya perdido las elecciones por la inseguridad. ¡°El asunto no estuvo muy presente en la campa?a, adem¨¢s ha bajado este a?o. Hemos perdido por el desgaste natural de ocho a?os, porque el campo est¨¢ mal por el tipo de cambio y porque Mendoza tiene problemas financieros, llevamos dos a?os sin aprobar Presupuestos¡±.
Cornejo, por el contrario, cree que s¨ª le ayud¨® a ganar lo que ¨¦l ve como un descontrol policial. ¡°Ac¨¢ no hay crimen muy organizado, lo que hay es un estado desorganizado¡±. En la tranquila Mendoza, zona tur¨ªstica por excelencia con los espectaculares Andes alrededor y el Aconcagua, el pico m¨¢s alto de Am¨¦rica con 6.980 metros, a poco m¨¢s de 200 kil¨®metros, algunos cr¨ªmenes a¨²n causan estupor. Especialmente el de un neozeland¨¦s al que asesinaron en 2014 en el parque m¨¢s concurrido del centro de Mendoza, el de San Mart¨ªn. Lo mataron para robarle. Los autores est¨¢n en la c¨¢rcel pero el esc¨¢ndalo dej¨® huellas.
El cambio pol¨ªtico en Mendoza marc¨® un camino que no ha sido posible seguir en todo el pa¨ªs: la uni¨®n de toda la oposici¨®n para derrotar al peronismo. Y lo lograron. Precisamente estos d¨ªas, lo m¨¢s discutido en las tertulias pol¨ªticas es que la incapacidad de Mauricio Macri y Sergio Massa para ponerse de acuerdo en una candidatura ¨²nica va a facilitar al peronista Daniel Scioli la posibilidad de ganar en primera vuelta el domingo 25.
Pero tambi¨¦n, seg¨²n Cornejo, Mendoza marca otra novedad: ¨¦l ha ganado dando malas noticias. ¡°En esta campa?a de las presidenciales nadie cuenta de verdad c¨®mo est¨¢ Argentina. Todos los candidatos dan esperanzas a ciegas. Yo en Mendoza he ganado cont¨¢ndole a la gente que voy a ordenar el Estado, que hay problemas, que no podemos tener este d¨¦ficit, que no vamos a salir de esta si no relanzamos el sector privado de Mendoza, que es muy competitivo. Vamos a intentar hacer un capitalismo serio y no este h¨ªbrido que tenemos ahora¡±, explica.
Cornejo, como la mayor¨ªa de los mendocinos consultados, insiste en que la provincia puede recuperarse si tras el cambio de Gobierno en Argentina se modifica el tipo de cambio y se cambian las pol¨ªticas que han dificultado las exportaciones. Cuando Argentina crec¨ªa al 8%, en los a?os buenos del primer kirchnerismo, Mendoza lo hac¨ªa al 12%, recuerda. Pero tambi¨¦n critica esa idea de que Argentina sale de todo como si nada. ¡°Existe la idea de que Argentina se cae y se recupera siempre r¨¢pido pero la realidad es que nos caemos y nunca nos recuperamos del todo¡±.
A pesar de todos los problemas, los mendocinos est¨¢n convencidos de que saldr¨¢n adelante. ¡°Mendoza tiene una gran ciudad vivible, el vino y el petr¨®leo, se puede salir con un cr¨¦dito que vamos a pedir con el acuerdo de todos¡±, se anima Bermejo. Est¨¢n acostumbrados a pelear. ¡°Hay que ganarle cada d¨ªa al desierto¡±, explican en los vi?edos de alrededor. Efectivamente, cada pueblo en Mendoza es una especie de oasis en medio del desierto. Aqu¨ª todo lo que hay lo ha hecho el hombre.
Ya los ind¨ªgenas originarios, antes de llegar los espa?oles, hicieron un sistema de canalizaci¨®n especial. Las acequias son caracter¨ªsticas. Recorren toda la capital y la convierten en una de las m¨¢s bellas de Argentina, un aut¨¦ntico vergel arbolado con casas coloniales rodeado de monta?as nevadas, las m¨¢s altas de Am¨¦rica, que la ha situado como un centro tur¨ªstico importante, siempre lleno de extranjeros dispuestos a atravesar la cordillera de los Andes o a disfrutar de rutas gastron¨®micas por las bodegas de la zona. Mendoza, hist¨®ricamente rica, siempre tuvo imagen de para¨ªso argentino. Los mendocinos conf¨ªan en recuperarlo pronto.
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