La oposici¨®n argentina lucha para evitar perder en primera vuelta

La realidad pol¨ªtica argentina es muy compleja. La mayor¨ªa de los analistas cree que va a ganar en primera vuelta el oficialista Daniel Scioli, elegido como heredero del kirchnerismo, aunque tiene claras diferencias con el estilo de los Kirchner. Y sin embargo, Scioli tiene enfrente al 60% de los argentinos, que no quieren que gane. Pero la incapacidad de la oposici¨®n para unirse hace que el peronismo oficial, con una concentraci¨®n del voto del 40% en bloque hacia Scioli, pueda lograr todo el poder. En estas ¨²ltimas horas antes de las elecciones del domingo, Mauricio Macri, el candidato de la oposici¨®n con m¨¢s posibilidades, se desga?ita para intentar convencer a los electores de otros partidos de oposici¨®n de que ¨¦l representa el ¡°voto ¨²til¡± porque es el ¨²nico que puede pasar a la segunda vuelta e impedir que el kirchnerismo, o al menos esa nueva mutaci¨®n del peronismo que ser¨¢ el sciolismo, gane las elecciones.

Macri ha logrado una posici¨®n muy superior a la esperada hace unos a?os. De miembro de la jet set pas¨® a presidente de Boca y despu¨¦s a alcalde de Buenos Aires. Nadie pensaba que podr¨ªa ser un aspirante real a la presidencia por la imagen de millonario neoliberal que le hab¨ªa colocado el kirchnerismo. Y sin embargo ha logrado ser el l¨ªder de la oposici¨®n. Pero Macri tiene l¨ªmites para un determinado tipo de votantes, sobre todo la izquierda y los peronistas, que lo ven demasiado a la derecha, rico y alejado de los pobres. Toda su campa?a ha consistido en suavizar esa imagen e incluso ha llegado a inaugurar una estatua de Per¨®n, la ¨²nica que hay en Buenos Aires. Y ahora est¨¢ apretando para convencer a los que no quieren que gane Scioli, sobre todo al 20% que mantiene su apoyo a Sergio Massa, peronista disidente, de que apoyar a otros es darle la victoria al oficialismo.

En las elecciones del domingo hay un solo candidato oficialista y cinco de la oposici¨®n. Tres tienen expectativas de voto peque?as: la progresista Margarita Stolbizer, el izquierdista Nicol¨¢s del Ca?o y el peronista Adolfo Rodr¨ªguez Saa, que lleg¨® a ser presidente de Argentina durante siete d¨ªas en las convulsas navidades de 2001. El problema real para Macri es Massa. Pero cada voto cuenta. La diferencia entre ir a una segunda vuelta o no puede depender de unos millares de papeletas. Macri necesita cada voto para tratar de que Scioli no le saque los 10 puntos que, seg¨²n la ley, necesita para ganar directamente, sin segunda vuelta.

La ofensiva va con todo. El macrismo est¨¢ echando toda la carne en el asador para convencer a los indecisos e incluso ha presentado en las ¨²ltimas horas una impactante denuncia sobre un supuesto espionaje masivo a pol¨ªticos de la oposici¨®n, jueces y periodistas por parte de los servicios secretos argentinos. La denuncia, presentada por dos diputadas macristas, afecta a los principales periodistas del pa¨ªs y parece pensada para animar el voto contra el kirchnerismo. Mientras, Massa trata de aferrar sus apoyos se?alando que ¨¦l es el verdadero voto ¨²til porque solo ¨¦l podr¨ªa ganarle en una segunda vuelta a Scioli, ya que puede competir por el voto peronista.

Mientras, la mayor¨ªa de los personajes m¨¢s populares van decantando sus opciones pol¨ªticas y mientras la conocida actriz Susana Jim¨¦nez ha mostrado su apoyo a Macri, Diego Maradona, desde su mansi¨®n en Dubai, lanz¨® en Facebook un mensaje para apoyar a Scioli, Cristina e incluso La C¨¢mpora, el n¨²cleo duro kirchnerista. Mientras Maradona apoyaba al Gobierno desde Dubai, Macri organizaba anoche un gran acto en Lan¨²s, donde naci¨® el futbolista, un municipio del coraz¨®n del conurbano de Buenos Aires, precisamente con la intenci¨®n de arrebatarle votos a Massa en el terreno que mejor domina, los alderedores de la capital.