¡°El terrorismo se alimenta de la pobreza¡±, dice el Papa desde Kenia

M¨¢s preocupado por los mosquitos que por la seguridad, como dijo con humor a la prensa durante el vuelo, el papa Francisco aterriz¨® sobre las cinco de la tarde en el aeropuerto?Jomo Kenyatta de Nairobi, en la primera etapa de su viaje por Kenia, Uganda y Rep¨²blica Centroafricana (RCA), una de las giras sin duda de mayor alto riesgo que ha hecho el pont¨ªfice desde su nombramiento. Jorge Mario Bergoglio, recibido por miles de personas en las calles que llevan desde el aeropuerto a Nairobi, como mostraron los medios kenianos, sali¨® de Roma con tres objetivos: di¨¢logo entre religiones, reconciliaci¨®n y justicia social. Tres metas ambiciosas llenas de sentido en una franja del continente negro donde el catolicismo siquiera es mayoritario y donde, como ocurre en RCA, ¨²ltima escala del viaje, la violencia se ha exacerbado entre cristianos y musulmanes.

"La experiencia demuestra que la violencia, los conflictos y el terrorismo que se alimentan del miedo, la desconfianza y la desesperaci¨®n nacen de la pobreza y la frustraci¨®n", afirm¨® el Pont¨ªfice durante una recepci¨®n del presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, en su residencia. Al dirigirse a los l¨ªderes pol¨ªticos, empresariales y religiosos que lo recibieron en Nairobi, Bergoglio dijo: "Yo les exhorto, en particular, a preocuparse verdaderamente por las necesidades de los pobres, las aspiraciones de los j¨®venes y una justa distribuci¨®n de los recursos naturales y humanos".

La visita del Papa ha sido declarada de alto riesgo no s¨®lo por el conflicto a¨²n abierto entre comunidades ¨¦tnico-religiosas centroafricanas sino tambi¨¦n ante la amenaza continua de grupos yihadistas como Al Shabab (La Juventud), con base en Somalia pero capaz de atentar en Kenia, como demostr¨® el pasado mes de abril, con la muerte de casi 150 personas en la Universidad de Garissa ¡ªceb¨¢ndose especialmente con los alumnos de confesi¨®n cristiana.

Durante su visita a Kenia, el Papa tiene previsto presidir una reuni¨®n con representantes de otras religiones, un encuentro con estudiantes y maestros en la Universidad de Nairobi y sendas visitas al barrio de Kangemi y a la sede de Naciones Unidas. El viernes se trasladar¨¢ a Uganda, donde ¡ªentre otros actos¡ª acudir¨¢ a un santuario anglicano y se encontrar¨¢ con j¨®venes.

Sin duda, la parte m¨¢s interesante del viaje se desarrollar¨¢ el domingo precisamente en RCA. Bergoglio visitar¨¢ un gran campo de refugiados de la guerra civil y presidir¨¢ despu¨¦s la ceremonia de apertura de la Puerta Santa de la Catedral de Bangui. Se tratar¨¢ del preludio de la inauguraci¨®n, el d¨ªa 8 de diciembre en Roma, del jubileo de la misericordia.

El Papa se va a encontrar en su gira africana con una Iglesia sin duda m¨¢s conservadora que la que rige su d¨ªa a d¨ªa en Europa, muy lejos a¨²n de atender los debates calientes en el Vaticano, bien sea la homosexualidad, bien, el divorcio de los creyentes. Si la declaraci¨®n de homosexualidad de un prelado del Vaticano revoluci¨®n recientemente a la curia, sirva de ejemplo, en Uganda y Kenia, los colectivos gais trabajan para evitar las penas de c¨¢rcel.

La Iglesia cat¨®lica se enfrenta en ?frica adem¨¢s al gran ascenso de confesiones como la evang¨¦lica, m¨¢s conservadora, m¨¢s din¨¢mica para la forma en la que los africanos practican la religi¨®n. En ninguno de los pa¨ªses que visita el pont¨ªfice, el catolicismo es la confesi¨®n m¨¢s profesada. En Kenia un 23% de los ciudadanos son cat¨®licos, por un 47% de protestantes (y un 11% de musulmanes). En Uganda, cuna de una de las milicias cristianas m¨¢s salvajes, el Ej¨¦rcito de Resistencia del Se?or, cat¨®licos y protestantes se reparten a partes iguales 42%, por un 12% de musulmanes. En RCA, la mitad de los centroafricanos son cristianos, con igual proporci¨®n entre cat¨®licos y protestantes, por un 15% de musulmanes.

Bergoglio se convierte en el cuarto pont¨ªfice que visita ?frica. Lo hicieron tambi¨¦n Pablo VI, que viaj¨® a Uganda en 1969, Juan Pablo II, que visit¨® 42 pa¨ªses, y Benedicto XVI. Unos minutos despu¨¦s de salir de Roma, y en el encuentro informal que habitualmente mantiene con los periodistas que le acompa?an, Bergoglio neg¨® que estuviese preocupado por la seguridad, una vez que hasta los servicios secretos franceses alertaran del alto riesgo de atentados. Seg¨²n relat¨® el enviado del diario La Stampa, el Papa asegur¨®: ¡°Lo ¨²nico que me preocupa son los mosquitos¡±, mientras hac¨ªa el gesto de ponerse sobre los brazos el repelente contra los insectos que le hab¨ªa regalado una informadora.