El p¨¢rrafo de Obama: el presidente ante su ¨²ltimo discurso de la Uni¨®n
Historiadores y polit¨®logos esbozan el legado hist¨®rico del presidente de Estados Unidos
Todo presidente de Estados Unidos se dedica a dos trabajos simult¨¢neos: gobernar el d¨ªa a d¨ªa y preparar su lugar en la historia. Es lo que se llama el legado. Cuanto m¨¢s se acerca el final del mandato de un presidente, m¨¢s se habla ¡ªsus partidarios, sus detractores, los periodistas¡ª del legado. ?Qu¨¦ quedar¨¢ de ¨¦l? ?Qu¨¦ huella habr¨¢ dejado? ?C¨®mo habr¨¢ transformado el pa¨ªs?
Barack Obama, presidente desde enero de 2009, pronunciar¨¢ el martes 12 de enero su ¨²ltimo discurso sobre el estado de la Uni¨®n, un ritual central de la pol¨ªtica estadounidense. Dentro de un a?o, el dem¨®crata Obama estar¨¢ preparando las maletas para abandonar la Casa Blanca despu¨¦s de dos mandatos de cuatro a?os, lo m¨¢ximo permitido por la Constituci¨®n.
Obama tambi¨¦n se preocupa por el legado. En una entrevista con la revista The New Yorker, publicada en enero de 2014, dijo: ¡°Estamos en este planeta durante un tiempo bastante breve, as¨ª que no podemos rehacer enteramente el mundo durante el breve periodo que tenemos¡±.
Despu¨¦s cit¨® el ejemplo de Abraham Lincoln: aunque aboli¨® la esclavitud, tuvieron que pasar cien a?os m¨¢s para que los afroamericanos lograran la igualdad formal ante la ley. ¡°No creo que esto disminuya los logros de Lincoln, pero reconoce que, a fin de cuentas, formamos parte de una historia larga. Nosotros solo intentamos conseguir que nuestro p¨¢rrafo sea correcto¡±.
EL PA?S ha preguntado a historiadores, polit¨®logos y analistas c¨®mo ser¨¢ el p¨¢rrafo de Obama en los libros de historia.
JUSTIN VAUGHN, profesor de ciencias pol¨ªticas en la Universidad Estatal de Boise y experto en la presidencia
"En unas d¨¦cadas, cuando las adhesiones partidistas se hayan difuminado y los estudiosos m¨¢s j¨®venes, y sin la carga de la memoria de este momento particular, controlen c¨®mo se determina el legado, veremos que a Obama se le recuerda como un pionero, pero tambi¨¦n alguien que no ha estado a la altura de lo que se esperaba y no ha cumplido con las expectativas. Hoy, quienes apoyan al presidente se apresuran a subrayar la polarizaci¨®n partidista y un Congreso recalcitrante como los motivos que explican esto, pero en unas d¨¦cadas creo que la explicaci¨®n ser¨¢ menos persuasiva. Los futuros estudiosos se maravillaran de c¨®mo Obama fue tan controvertido al mismo tiempo que realmente no hacia muchas cosas? controvertidas, algo que deja en mal lugar la ret¨®rica sobreexcitada de la derecha y su actitud bastante timorata respecto al liderazgo pol¨ªtico y a la acci¨®n".
DAVID BLIGHT, profesor de historia en Yale y autor de Or¨¢culo americano: la guerra civil en la era de los derechos civiles
"Puesto que los americanos est¨¢n ahora, y en un futuro previsible, extremadamente divididos pol¨ªticamente, la presidencia del presidente Obama tendr¨¢ durante tiempo, como m¨ªnimo, legados duales. La derecha seguir¨¢ record¨¢ndole y us¨¢ndole como su modelo favorito de un Estado grande y progresista [liberal, en ingl¨¦s], y un objeto de su resentimiento racial. Otros, especialmente los liberales de diferente tipo, lo recordar¨¢n como un m¨¢ximo exponente del Primer Americano (como presidente negro), y como un l¨ªder pol¨ªtico a veces reticente, pero siempre profundamente serio, incluso brillante, en un tiempo de problemas totalmente intratables. Pero en el resurgimiento tras la Gran Recesi¨®n, la inmigraci¨®n, la protecci¨®n sanitaria, los derechos de los gays, quiz¨¢ el control de las armas, y ciertamente en el cambio clim¨¢tico, tendr¨¢ un legado duradero y transformador. Tambi¨¦n habr¨ªa que decir que quiz¨¢ ning¨²n presidente de gran importancia desde Lincoln (quiz¨¢ Franklin Roosevelt) ha afrontado una oposici¨®n tan feroz e implacable como Obama. Durante la mayor parte del tiempo ha manejado los ataques de la derecha con una gracia que no merec¨ªan. Y finalmente, a?adir¨ªa dos sugerencias. Es posible que miremos a la presidencia de Obama como el tiempo en que el Partido Republicano se destruy¨® en pedazos en medio de espasmos de odio hacia Obama y hacia un Estado activo, y ces¨® de ser un a entidad viable. Pero tambi¨¦n es posible que miremos a la era de Obama como un tiempo en que los dem¨®cratas quedaron en una especie de inmovilidad, dirigidos por pol¨ªticos del ¡®mainstream¡¯ [la corriente principal], mayores y tradicionales, que no han desarrollado una coalici¨®n sucesora real, viable".
GEORGE C. EDWARDS III, catedr¨¢tico de estudios presidenciales en a Universidad A&M de Texas
"Barack Obama ha sido un presidente importante. Desde el hecho de frenar el deslizamiento hacia un abismo fiscal e incrementar la regulaci¨®n de las instituciones que nos llevaron a este punto, hasta ampliar enormemente el acceso de los americanos a la protecci¨®n sanitaria, ha hecho este pa¨ªs m¨¢s fuerte y m¨¢s humano. Tambi¨¦n ha gestionado una situaci¨®n internacional extremadamente compleja sin enviar m¨¢s americanos a la guerra, ha aumentado el comercio, y ha reducido la amenaza de un Ir¨¢n nuclear. Es probable que la historia le trate con amabilidad".
JENNIFER MERCIECA, historiadora del discurso pol¨ªtico americano en la Universidad A&M de Texas
"Obama ha intentado, desde el principio, ser recordado como un gran presidente. Los grandes presidentes lideran la naci¨®n en tiempos de crisis y mantienen el rumbo del Estado a trav¨¦s de tormentas convulsas. En el ¨¢mbito interno, el legado del presidente Obama consistir¨¢ en el liderazgo a la hora de conducir a la naci¨®n a trav¨¦s de la crisis econ¨®mica de 2008, en el hecho de dar a todos los americanos acceso de la protecci¨®n sanitaria, en liderar a la naci¨®n a trav¨¦s del malestar civil causado por la violencia con armas, las tensiones raciales y las decisiones controvertidas del Tribunal Supremo como Obergefell vs. Hodges [la decisi¨®n que legaliz¨® el matrimoni¨® homosexual en todo el pa¨ªs]. Bajo su mandato la econom¨ªa de la naci¨®n mejor¨® y la naci¨®n ampli¨® el derecho al matrimonio a todas las parejas, pero la naci¨®n tambi¨¦n luch¨® con los miedos a la inmigraci¨®n, el terrorismo, la raza y la violencia con armas. Internacionalmente, el legado del presidente Obama ser¨¢ ambivalente: al mismo tiempo que actu¨® para reparar las relaciones de la naci¨®n en el extranjero, tambi¨¦n vio c¨®mo el extremismo radical continuaba por todo el mundo. Creo que el presidente Obama ser¨¢ recordado como un gran presidente en la pol¨ªtica interna".
MICHAEL BARONE, miembro del American Enterprise Institute, periodista y coautor del ¡®Almanaque de la pol¨ªtica americana¡¯
"Creo que el p¨¢rrafo del presidente Obama ha sido mayoritariamente incorrecto. En un tiempo en que los cambios econ¨®micos y culturales est¨¢n produciendo una sociedad menos centralizada, en la que el crecimiento de la innovaci¨®n y la productividad emerge desde abajo, ¨¦l busca un Estado de 'mando y control', m¨¢s centralizado y m¨¢s grande. En tiempos en los que las fuerzas del terrorismo ganan terreno en partes importantes del mundo, ¨¦l intenta disminuir el poder americano para combatirlas con la esperanza que con declaraciones emolientes har¨¢ que sean m¨¢s amigas de Am¨¦rica y que est¨¦n menos comprometidas con el terrorismo. En este sentido, trabaja contra la corriente de la historia y contra la perspectiva de unas sociedades democr¨¢ticas y regidas por la ley decentes".
BRANDON ROTTINGHAUS, profesor de ciencia pol¨ªtica en la universidad de Houston y especialista en la presidencia
"Los ocho a?os del presidente Obama le colocan en un s¨®lido lugar intermedio en la curva de los grandes presidentes: fuerte en algunos temas, m¨¢s d¨¦bil en otros. Se juzga a los presidentes por c¨®mo navegan en medio de grandes momentos hist¨®ricos. Al presidente Obama se le reconoce que haya reducido grandes guerras en el extranjero y haya estabilizado una econom¨ªa tambaleante. Pero, a pesar de sus promesas valientes, su incapacidad para mitigar las estrecheces econ¨®micas para la clase media y el aumento de la desigualdad de ingresos da?an su agenda dom¨¦stica, as¨ª que el legado del presidente se sostendr¨¢ ¨²nicamente en el ¨¦xito de la reforma de la protecci¨®n sanitaria".
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