Los casos de microcefalia reabren el debate sobre el aborto en Brasil

Por un lado est¨¢ el virus del zika, responsable del aumento de las incidencias de microcefalia en Brasil. Por otro, uno de los panoramas pol¨ªticos m¨¢s conservadores de los ¨²ltimos a?os, con un proyecto de ley para dificultar el aborto legal en casos de violaci¨®n. En medio, una situaci¨®n de emergencia de salud p¨²blica, en la que la salud f¨ªsica y mental de las mujeres embarazadas est¨¢ en juego.

D¨¦bora Diniz es antrop¨®loga del instituto de bio¨¦tica Anis, responsable de la creaci¨®n de una propuesta para el Supremo Tribunal Federal (STF) que prevea, entre otras medidas, la posibilidad de abortar legalmente en caso de que los fetos tengan microcefalia. Actualmente, la interrupci¨®n del embarazo es legal en caso de anencefalia (ausencia parcial o total del cerebro o el cr¨¢neo del feto), violaci¨®n o riesgo para la vida de la madre. ¡°No podemos resignarnos a vivir en un contexto retr¨®grado y no proponer nada. Estamos ante una epidemia y tenemos que dar respuestas a las personas afectadas¡±, comenta Diniz.

La propuesta del instituto pretende, por un lado, garantizar que las pol¨ªticas p¨²blicas de planificaci¨®n familiar den acceso a m¨¦todos anticonceptivos e incluyan la posibilidad de hacer ecograf¨ªas para diagnosticar microcefalia y de interrumpir la gestaci¨®n si la mujer lo desea. ¡°Es una acci¨®n relacionada con los derechos de la mujer, no es una acci¨®n para imponer el aborto¡±, destaca Diniz. Por otro lado, proponen acciones sociales para proteger la maternidad y la infancia para las mujeres que den a luz a beb¨¦s con microcefalia.

El pasado domingo, el peri¨®dico Folha de S.Paulo asegur¨® que las embarazadas diagnosticadas con el virus del zika ya est¨¢n recurriendo a abortos clandestinos, incluso antes de saber si el feto tiene o no microcefalia. Seg¨²n el reportaje, el procedimiento cuesta entre 1.200 y 3.700 d¨®lares, dependiendo de la etapa del embarazo.

¡°Hay que reconocer la negligencia del Estado, que no ha conseguido erradicar el Aedes aegypti, y, a partir de ah¨ª, crear mecanismos para compensar y proteger a las mujeres y a los futuros ni?os. El aborto, como una medida de protecci¨®n, es solo una pieza en esta discusi¨®n, que es mucho mayor¡±, argumenta Diniz.

La soci¨®loga Jacqueline Pitanguy, como Diniz, luch¨® a favor de la decisi¨®n del Supremo (hace 12 a?os) para legalizar el aborto en caso de anancefalia. Ella tambi¨¦n cree que los casos de microcefalia fortalecen todav¨ªa m¨¢s la necesidad de discutir sobre el aborto en Brasil. ¡°Tenemos una de las legislaciones m¨¢s restrictivas del mundo y hay proyectos para volverla todav¨ªa m¨¢s prohibitiva. La microcefalia, que demanda una respuesta inmediata, pone en evidencia el retraso que sufrimos en relaci¨®n a este tema¡±, comenta. Seg¨²n la soci¨®loga, las recomendaciones de que las mujeres que no se queden embarazadas o que contraigan la enfermedad de forma intencionada, pero que el aborto siga siendo intocable, demuestran lo disparatada que es la situaci¨®n.

Pintaguy tambi¨¦n recuerda que un alto porcentaje de camas de la sanidad p¨²blica ya est¨¢n ocupadas por mujeres que han sufrido un aborto. Un estudio realizado en 2014 por el profesor jubilado de la Universidad Estatal de R¨ªo de Janeiro, Mario Giani Monteiro, indica que aproximadamente 200.000 mujeres que abortaron en 2013 acudieron a alg¨²n hospital p¨²blico para realizar un raspado, ya sea porque sufrieron un aborto natural, porque hicieron el procedimiento amparadas por la ley, o tras un aborto clandestino malogrado. Es un n¨²mero relevante, todav¨ªa m¨¢s si lo comparamos con las internaciones debidas a enfermedades como el c¨¢ncer (243.709) o que afectan al sistema respiratorio (236.940), por ejemplo. ¡°Estoy totalmente a favor del aborto como un derecho individual de la mujer, pero en este momento, teniendo en cuenta la situaci¨®n de emergencia epid¨¦mica, mi mayor preocupaci¨®n es la salud p¨²blica, resolver una situaci¨®n de emergencia¡±, asegura.

Pron¨®stico

Considerando que la legislaci¨®n brasile?a sobre el aborto ha cambiado muy poco desde la d¨¦cada de 1940, el pron¨®stico m¨¦dico de microcefalia puede ser uno de los puntos centrales para cualquier decisi¨®n futura sobre el tema, seg¨²n la opini¨®n de S¨¦rgio Floriano de Toledo, director regional de la Asociaci¨®n de Obstetricia y Ginecolog¨ªa del Estado de S?o Paulo.

¡°Solo se puede hacer un pron¨®stico sobre el tama?o de la circunferencia de la cabeza del feto a partir de la 16? semana, el cuarto mes de embarazo, y, aun as¨ª, es muy dif¨ªcil decir con seguridad cu¨¢l ser¨¢ el grado de severidad de la microcefalia¡±, asegura Toledo. Lo ideal es realizar el aborto hasta la 12? semana de gestaci¨®n, lo cual no excluye, sin embargo, que el procedimiento se haga posteriormente en casos en que haya riesgo para la vida de la mujer o en caso de violaci¨®n.

Para Diniz, si el diagn¨®stico llega como m¨¢ximo hasta la 15? o 16? semana, todav¨ªa no es tarde para realizar el aborto. ¡°El tiempo dentro del cual se debe realizar el procedimiento no es una cuesti¨®n que deba discutirse en el Supremo, es una cuesti¨®n m¨¦dica y de salud. Si el c¨®digo penal dice que el aborto en caso de violaci¨®n, por ejemplo, es legal, quien tiene que decidir sobre el tiempo son las pol¨ªticas p¨²blicas¡±, argumenta. Para Pitanguy, si la legislaci¨®n brasile?a estuviera m¨¢s avanzada, como ocurre en otros pa¨ªses, no se estar¨ªa discutiendo esta cuesti¨®n: ¡°Antes de la 12? semana, la mujer, preocupada con la posibilidad de haber contra¨ªdo el virus del zika, podr¨ªa escoger tranquilamente qu¨¦ hacer¡±.