¡°Combatir el zika tratando solo de erradicar al mosquito no funcionar¨¢¡±

La crisis por el virus del Zika es una oportunidad ¨²nica para que Am¨¦rica Latina reabra un debate necesario sobre problemas subyacentes tras esta nueva crisis sanitaria: las desigualdades sociales y los a menudo ignorados derechos reproductivos de la mujer, afirma Alicia Ely Yamin, directora de pol¨ªticas en el Centro de Salud y Derechos Humanos Fran?ois-Xavier Bagnoud de la Universidad de Harvard. Porque si no se atiende este caso tambi¨¦n desde la perspectiva ¡°social¡±, la del zika no ser¨¢ la ¨²nica crisis sanitaria que podr¨ªa afrontar la regi¨®n, advierte la tambi¨¦n asesora de la ONU y autora del libro Poder, Sufrimiento y la Lucha por la Dignidad: Marcos de derechos humanos para la salud y por qu¨¦ son importantes.

Pregunta. La crisis del zika, ?puede ser una oportunidad para abrir el debate sobre los derechos reproductivos y la educaci¨®n sexual en Am¨¦rica Latina?

Respuesta. Deber¨ªa ser una oportunidad, pero lo que pasa es que entre la respuesta de los gobiernos y la histeria que est¨¢n fomentando los medios, se ha olvidado lo que es realmente una cuesti¨®n de defectos cr¨®nicos pol¨ªticos en la regi¨®n: que [la mayor¨ªa de las afectadas] son mujeres pobres que viven a menudo en condiciones insalubres, no tienen educaci¨®n sexual ni acceso seguro a anticonceptivos, son mujeres que ni pueden decidir cu¨¢ndo tienen relaciones sexuales, que no tienen derecho a una vida digna. Todo eso aparentemente se ha olvidado.

P. ?Qu¨¦ se puede hacer para abrir ese debate?

R. Hay que sopesar que tenemos congresos en la regi¨®n que en algunos casos parecen haber abdicado el poder a las iglesias en vez de asumir su obligaci¨®n de proteger y respetar los derechos reproductivos y los derechos humanos. As¨ª que s¨ª me parece que es una oportunidad para abrir esa conversaci¨®n, pero no se est¨¢ haciendo. Se dice que todos los pa¨ªses van a actuar conjuntamente para controlar los vectores, los mosquitos, y eso es una buena medida, s¨ª. Pero tambi¨¦n hay que reconocer que este requiere abordar un fen¨®meno social.

P. Resumiendo, ?no todo se debe limitar a combatir al mosquito que transmite el zika?

R. En este caso combatir el mosquito es el primer paso. Pero a menudo no se llega al segundo paso. Esto lo hemos visto en otras ocasiones, en la reacci¨®n internacional al ¨¦bola, al SARS, siempre pasa lo mismo: son violaciones de derechos fundamentales las que fomentan estas enfermedades olvidadas o estos brotes dram¨¢ticos. Es cierto, tenemos que controlar el mosquito. Pero tambi¨¦n tenemos que ver por qu¨¦ surgi¨® esto y por qu¨¦ tienen que sufrir las mujeres pobres, las adolescentes, las mujeres violadas.

P. ?Ser¨¢n efectivos los llamamientos de las autoridades en la regi¨®n a las mujeres para que eviten quedarse embarazadas?

R. Sabemos que campa?as de salud p¨²blica como la de ¡°di no a las drogas¡± o "solo abstinencia" no funcionan. Pero en este caso particular es el colmo del cinismo, supone trasladar un problema pol¨ªtico, sist¨¦mico, estructural, a una cuesti¨®n de conducta individual de mujeres pobres, marginadas y sin poder sobre sus proyectos de vida. Nunca se deben transformar las pol¨ªticas, las condiciones estructurales que subyacen en todas estas enfermedades de pobreza, en una conducta individual.

Adem¨¢s, incluso con acceso seguro a anticonceptivos, algunas mujeres quedar¨¢n embarazadas, y estamos hablando de los pa¨ªses que tienen la peor legislaci¨®n en cuanto al aborto en todo el mundo. Como El Salvador, donde no existe ninguna excepci¨®n de criminalizaci¨®n del aborto. Y usan la ley penal, incluso no les acusan de aborto solamente, sino tambi¨¦n de infanticidio, que lleva mayores penas privativas de la libertad.

P. ?Qu¨¦ pasos propondr¨ªa usted?

R: Obviamente se tienen que controlar los mosquitos, es el mismo que provoca dengue, as¨ª que tenemos idea c¨®mo controlarlo. Pero segundo, reformar leyes no es cuesti¨®n de dinero, as¨ª que se puede hacer para asegurar que las mujeres que se embaracen y a las que se les diagnostique la microcefalia, puedan acceder a un aborto seguro si lo desean. Y tercero, garantizarles acceso a anticonceptivos, a una gama de anticonceptivos en la pr¨¢ctica, no en papel. Eso ser¨ªa un comienzo.

Tambi¨¦n hay que empezar una conversaci¨®n con la ciudadan¨ªa de por qu¨¦ est¨¢ pasando esto, qu¨¦ nos dice de estas sociedades y de la igualad de g¨¦nero y de goce efectivo de los derechos sexuales y reproductivos. Am¨¦rica Latina tiene sus particularidades en relaci¨®n con estos temas. El grado extremo de inequidades, las ¨¦lites al lado de gente sumamente pobre y marginada, esas diferencias, el sexismo, la violencia y la falta de control que las mujeres tienen de sus propios proyectos de vida aunque haya legislaci¨®n en la regi¨®n y se hayan firmado las convenciones. La brecha entre las legislaciones y la implementaci¨®n en la pr¨¢ctica tiene unas din¨¢micas particulares en la regi¨®n.