La doctrina exterior de Obama, en 11 claves

Barack Obama ha estudiado la historia de Estados Unidos: sus aciertos y errores. Su pol¨ªtica exterior se basa en un principio: actuar seg¨²n los intereses estrat¨¦gicos de la primera potencia mundial.

La revista The Atlantic publica en su ¨²ltimo n¨²mero un extenso art¨ªculo sobre la doctrina de Obama. El periodista Jeffrey Goldberg entrevist¨® en los ¨²ltimos meses varias veces a Obama y sus asesores. Goldberg se sumerge en la mente del mandatario y esboza el perfil m¨¢s completo sobre su visi¨®n en pol¨ªtica exterior.

Estas son las claves:

1. Internacionalista e idealista

Obama sostiene que hay cuatro grandes teor¨ªas de pol¨ªtica exterior: aislacionismo, realismo, intervencionismo liberal (que en EE UU se entiende como progresista) e internacionalismo.

Se define como un internacionalista idealista. Defiende la promoci¨®n de valores democr¨¢ticos, pero con pragmatismo: ¡°Para avanzar tanto nuestros intereses de seguridad como los ideales y valores que nos importan, tenemos que ser testarudos y actuar al mismo tiempo con un gran coraz¨®n, escoger y seleccionar nuestros lugares, y reconocer que habr¨¢ momentos en que lo mejor que podremos hacer es poner el foco en algo que es terrible pero sin creer que podremos solucionarlo autom¨¢ticamente¡±.

2. Multilateralismo contra arrogancia

Obama defiende que otros pa¨ªses asuman m¨¢s responsabilidad en vez de esperar que EE UU siempre tenga la iniciativa. El presidente no reh¨²ye del liderazgo estadounidense. Dice que es imprescindible pero defiende que sea compartido: ¡°El multilateralismo regula la arrogancia¡±.

Los abusos y errores del pasado explican la cautela de Obama: ¡°Tenemos una historia en Ir¨¢n, en Indonesia y Centroam¨¦rica. As¨ª que tenemos que ser conscientes de nuestra historia cuando empezamos a hablar de intervenir, y entender el origen de las suspicacias de otra gente¡±.

3. Contra el ¡°manual de Washington¡±

Obama se distancia del llamado ¡°manual de Washington¡± y lo que ¨¦l denomina el ¡°establishment de pol¨ªtica exterior¡±, que define el consenso sobre las respuestas adecuadas a las crisis geopol¨ªticas. El presidente lamenta que las respuestas de estos expertos suelen ser militares: ¡°Cuando Am¨¦rica est¨¢ amenazada directamente, el manual funciona. Pero el manual puede ser tambi¨¦n una trampa que puede llevar a malas decisiones¡±. Y a?ade: ¡°En medio de un desaf¨ªo internacional como Siria, eres juzgado duramente si no sigues el manual, incluso si hay buenas razones¡±

4. Orgulloso de la pol¨ªtica con Siria

¡°Estoy muy orgulloso de ese momento¡±, dice Obama sobre su decisi¨®n en septiembre de 2013 de dar a ¨²ltima hora marcha atr¨¢s a un plan de bombardeos contra posiciones del r¨¦gimen sirio por el uso de armas qu¨ªmicas contra civiles. El presidente hab¨ªa asegurado que el uso de esas armas era una ¡°l¨ªnea roja¡± que alterar¨ªa su estrategia con relaci¨®n al presidente sirio, Bachar el Asad.

Obama defiende que no atacar fue una ¡°decisi¨®n correcta¡±. El principal motivo fue la percepci¨®n de que los ataques no podr¨ªan eliminar las armas qu¨ªmicas y la posibilidad de que El Asad saliera ¡°fortalecido¡± por poder esgrimir que hab¨ªa sobrevivido y desafiado a EE UU.

5. El ISIS y la met¨¢fora de Batman

Obama sostiene que el Estado Isl¨¢mico no es una ¡°amenaza existencial¡± para Estados Unidos. Compara al grupo yihadista, al que EE UU bombardea en Irak y Siria, con el Joker de la pel¨ªcula de 2008 de Batman El Caballero Oscuro. Como el personaje de ficci¨®n, el ISIS ¡°tiene la capacidad de incendiar toda la regi¨®n¡± y ¡°por eso tenemos que combatirlo¡±, ha dicho a sus asesores.

6. El error de Libia y los oportunistas

El presidente admite que la campa?a de bombardeos en 2011 contra el r¨¦gimen de Muamar el Gadafi ¡°no funcion¨®¡± y que Libia es ahora un ¡°desastre¡±. Defiende los motivos que llevaron a EE UU a participar, pero lamenta que otros pa¨ªses hicieran menos de lo prometido y se atribuyeran m¨¦ritos inmerecidos.

Los denomina free riders, que en espa?ol podr¨ªa traducirse como oportunistas. En esa categor¨ªa, sugiere, est¨¢n Francia y Reino Unido por su papel en la campa?a libia. El presidente explica que ¡°ten¨ªa m¨¢s fe en que los europeos, dada la proximidad de Libia, invertir¨ªan en el seguimiento¡± de la situaci¨®n en el pa¨ªs tras la intervenci¨®n.

7. Cr¨ªtico con Arabia Saud¨ª

Obama se muestra muy cr¨ªtico con Arabia Saud¨ª, uno de los aliados estrat¨¦gicos de EE UU en Oriente Medio con el que las relaciones se han enfriado en los ¨²ltimos a?os. En conversaciones privadas, citadas en el art¨ªculo, deplora que haya financiado la propagaci¨®n de visiones radicales del Islam y sostiene que ¡°un pa¨ªs no puede funcionar en el mundo moderno cuando reprime a la mitad de su poblaci¨®n¡±.

En la entrevista, el presidente rechaza favorecer a Ir¨¢n frente a su rival saud¨ª, pero reniega de la percepci¨®n de los pa¨ªses del golfo P¨¦rsico de que Teher¨¢n es el origen de todos los males de la regi¨®n. Insta a Arabia Saud¨ª e Ir¨¢n a hallar una ¡°forma efectiva¡± de compartir pac¨ªficamente la regi¨®n en una suerte de ¡°guerra fr¨ªa¡±.

8. Cansado de Oriente Pr¨®ximo, elogioso con Asia

Obama expone su hartazgo con el caos en Oriente Medio y por el hecho de que le haya consumido, a su pesar, tanta energ¨ªa en pol¨ªtica exterior, cuyo objetivo estrat¨¦gico es dar prioridad a Asia.

Sobre Oriente Medio, afirma: ¡°Tienes a pa¨ªses que est¨¢n fracasando en ofrecer prosperidad y oportunidad a su gente. Tienes ideolog¨ªas extremistas, violentas, que son propulsadas por las redes sociales. Tienes a pa¨ªses con muy pocas tradiciones c¨ªvicas, por lo que cuando los reg¨ªmenes autocr¨¢ticos empiezan a debilitarse, los ¨²nicos principios organizativos son sectarios¡±.

El presidente lo compara con otras regiones. ¡°Contrasta esto con el Sudeste asi¨¢tico, que todav¨ªa tiene grandes problemas -enorme pobreza y corrupci¨®n- pero est¨¢ lleno de gente esforzada, ambiciosa, energ¨¦tica que est¨¢n cada d¨ªa desgarr¨¢ndose para construir empresas, recibir educaci¨®n, encontrar empleo y construir infraestructura¡±. La analog¨ªa la extiende a los j¨®venes africanos y latinoamericanos: ¡°No est¨¢n pensando en c¨®mo matar a americanos¡±.

9. Paciencia en Am¨¦rica Latina

Obama defiende haber evitado la confrontaci¨®n con la Venezuela de Hugo Ch¨¢vez al principio de su mandato en 2009. La decisi¨®n se bas¨® en la percepci¨®n de que Ch¨¢vez, junto a otros l¨ªderes izquierdistas cr¨ªticos con EE UU, ¡°no era una amenaza¡± para Washington.

El presidente destaca que esa actitud pasiva ha apaciguado el antiamericanismo y ha aumentado la influencia estadounidense en Latinoam¨¦rica. Eso se debe tambi¨¦n en parte, dice Obama, al restablecimiento de las relaciones diplom¨¢ticas con Cuba anunciado en diciembre de 2014.

10. Realismo ante China y Rusia

Ante las cr¨ªticas de que su prudencia aliment¨® la intervenci¨®n rusa en Ucrania, recuerda que el presidente Vladimir Putin invadi¨® Georgia en 2008 con George W. Bush en la Casa Blanca. Y niega que Rusia sea ahora m¨¢s fuerte por sus acciones militares en Ucrania y Siria: ¡°Es malentender la naturaleza del poder en relaciones internacionales. Poder real significa que puedes lograr lo que quieres sin necesidad de ejercer violencia¡±.

Obama tambi¨¦n es prudente sobre China. ¡°Tenemos m¨¢s a temer de una China debilitada y amenazada que de una China exitosa y creciente¡±, dice. El presidente cree que la relaci¨®n con Pek¨ªn es el mayor desaf¨ªo para Washington. Esgrime que si China mantiene su ¡°crecimiento pac¨ªfico¡± ser¨¢ un socio para EE UU. Si China no satisface a su poblaci¨®n, reh¨²ye de su responsabilidad internacional y ve el mundo ¡°solo en t¨¦rminos de esferas de influencia regional¡±, Obama ve un ¡°potencial¡± conflicto con China y una mayor dificultad para abordar desaf¨ªos globales.

11. El temor del cambio clim¨¢tico

Preguntado por qu¨¦ asuntos le preocupan m¨¢s cuando ceda la presidencia en enero de 2017, Obama manifiesta una preocupaci¨®n ¡°profunda¡± por el cambio clim¨¢tico si sus efectos se acent¨²an. Alega que el calentamiento global es una ¡°potencial amenaza existencial¡± para todo el mundo si no se act¨²a. Lamenta que no parece una amenaza inminente. Eso, esgrime, ¡°repele la intervenci¨®n de gobiernos¡±.