La UE ultima un pacto para edulcorar la expulsi¨®n masiva de refugiados

Europa se arriesga a quedar retratada para la historia como el continente rico que, en medio de una guerra cruenta, es incapaz de gestionar la crisis de refugiados y gesticula para buscar v¨ªas legales para las expulsiones fulminantes. Los Veintiocho, reunidos la noche del jueves en Bruselas, negociaban para sellar un pacto con Turqu¨ªa que permitir¨¢ la devoluci¨®n de refugiados sirios desde Grecia por la v¨ªa r¨¢pida. Los l¨ªderes expresaron dudas legales y sobre otras concesiones a Ankara.

Europa se dispone a cerrar su acuerdo m¨¢s dr¨¢stico para frenar el flujo de refugiados procedentes de Turqu¨ªa. Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE certificar¨¢n este viernes, salvo imprevistos, el arriesgado giro que han perge?ado con el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu. Ankara quiere explotar la ansiedad europea: se acerca la primavera, que con el buen tiempo acelerar¨¢ los flujos de migrantes, y todos los planes anteriores han fracasado estrepitosamente. Europa ha reubicado a un millar de los 160.000 refugiados que esperan en Grecia e Italia, y solo ha recolocado a 4.000 de los 22.000 que pact¨® directamente con Turqu¨ªa, que acoge a cerca de tres millones de sirios, y otros pa¨ªses de la zona. El continente ha cerrado sus fronteras por la denominada ruta de los Balcanes occidentales y ha creado un tap¨®n en Grecia que mantiene varadas a decenas de miles de personas. El objetivo es devolver a Turqu¨ªa a quienes lleguen en adelante, incluso a quienes tengan derecho a asilo, con un procedimiento por la v¨ªa de urgencia que ha despertado enormes dudas legales, incluso morales en un continente que presume de valores.

Se trata de lanzar un mensaje a los sirios para que no crucen el Mediterr¨¢neo con las mafias; para que esperen en suelo turco a ser reubicados directamente en la UE. Europa se compromete a admitir a tantos refugiados sirios como inmigrantes devuelva a Turqu¨ªa. Para ello, tiene que dar a Turqu¨ªa el estatus de pa¨ªs seguro, algo que es imposible sin cambios legales sustanciales: Ankara solo ofrece protecci¨®n total a los europeos, no a otros refugiados.

Turqu¨ªa, adem¨¢s, genera enormes dudas por sus continuos ataques a la libertad de prensa, por el conflicto con los separatistas turcos y por el autoritarismo del presidente Recep Tayyip Erdogan, que ha convertido a sus adversarios pol¨ªticos en presa f¨¢cil de jueces y fiscales.

Europa es perfectamente consciente de todo eso, pero prefiere mirar hacia otro lado y contar con Turqu¨ªa como potencia aliada y f¨®rmula para detener el flujo masivo de migrantes, que tras el mill¨®n de entradas de 2015 puede batir todas las marcas este a?o. La UE necesita a Ankara. Y para ello, adem¨¢s de la f¨®rmula para detener el flujo de refugiados, ofrece diversas concesiones: 3.000 millones adicionales a partir de 2018 ¡ªque se unen a los 3.000 millones que ya han empezado a desembolsarse¡ª, la aceleraci¨®n de las negociaciones de adhesi¨®n con la UE, el acceso sin visado de los turcos a la Uni¨®n a partir de junio y, sobre todo, la apertura de una v¨ªa legal para que Europa se lleve de forma masiva, y directamente, a los migrantes con derecho a asilo desde Turqu¨ªa.

Nada de eso ser¨¢ f¨¢cil. El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, se mostr¨® al inicio de la cumbre ¡°m¨¢s cauto que optimista¡±. Tampoco Ankara se muestra convencida, despu¨¦s de las rebajas que han aplicado en las ¨²ltimas horas las instituciones europeas a algunas de las concesiones pactadas el pasado 7 de marzo. Tusk y Davutoglu negociar¨¢n esta ma?ana sobre el borrador que los Veintiocho han pactado en la madrugada de hoy.

Maniobras legales

Los servicios jur¨ªdicos de la Comisi¨®n y el Consejo se han afanado en encontrar un encaje legal consistente a las devoluciones de migrantes y refugiados desde Grecia a Turqu¨ªa. No habr¨¢ devoluciones colectivas, insiste Bruselas; cada demanda de asilo recibir¨¢ un tratamiento individualizado. Pero el mecanismo de devoluci¨®n por la v¨ªa r¨¢pida despierta algo m¨¢s que recelos. ¡°Tenemos algunas garant¨ªas, pero no estamos convencidos¡±, admiti¨® el primer ministro luxemburgu¨¦s, Xavier Bettel. ¡°El paquete ser¨¢ dif¨ªcil de aplicar y est¨¢ al filo de lo aceptable en el derecho internacional¡±, a?adi¨® Dalia Grybauskait¨¦, la presidenta de Lituania. Grybauskati¨¦ pone el dedo en una doble llaga: los acuerdos anteriores han sido un fiasco a la hora de ponerlos en pr¨¢ctica por el escaso apetito de muchos de los socios a la hora de asumir los compromisos firmados. Y la propia ONU ha mostrado serias dudas acerca de la legalidad del nuevo mecanismo.

Hay m¨¢s problemas. La apertura de nuevos cap¨ªtulos en la negociaci¨®n para la adhesi¨®n de Turqu¨ªa a la UE ha llevado a Chipre a amenazar con bloquear el pacto. Chipre mantiene un contencioso territorial con Turqu¨ªa ¡ªpor la ocupaci¨®n del norte de la isla¡ª, y reclama acceso a los puertos y aeropuertos turcos. ¡°Si Turqu¨ªa no cumple con sus obligaciones, no hay m¨¢s opci¨®n [que vetar]¡±, se?al¨® el presidente chipriota, Nikos Anastasiadis. Adem¨¢s, la liberalizaci¨®n de visados no convence a Francia. El presidente Fran?ois Hollande subray¨® que Par¨ªs vigilar¨¢ que Ankara cumpla escrupulosamente las 72 condiciones del Tratado de Schengen si quiere que sus ciudadanos circulen por Europa sin visado. El cumplimiento deber¨ªa llegar en abril, para que la medida se active en junio, algo pr¨¢cticamente inasumible, seg¨²n las fuentes consultadas.

Patrocinio alem¨¢n

Alemania, el pa¨ªs m¨¢s afectado por la crisis de asilo, es el gran patrocinador de este intento por frenar la marea de migrantes. La canciller Angela Merkel se mostr¨® esta madrugada optimista sobre el pacto con Turqu¨ªa, aunque admiti¨® que de los 72 criterios que Ankara tiene que cumplir para obtener el fin del visado, "a¨²n hay 50 o 60 puntos abiertos". Adem¨¢s, los problemas no cesan: el semanario Der Spiegel se vio obligado este jueves a retirar a su corresponsal en ese pa¨ªs por problemas con Erdogan.

Berl¨ªn, que ha apretado sistem¨¢ticamente las tuercas a Grecia con los rescates, es consciente de la necesidad de ayudar a Atenas. Con 50.000 refugiados atrapados, Grecia es ya el triste escenario de la primera crisis humanitaria en suelo de la UE desde la formaci¨®n del club, all¨¢ por los a?os cincuenta del siglo pasado. Los griegos son el eslab¨®n m¨¢s d¨¦bil de un continente que puede quedar muy se?alado en funci¨®n de c¨®mo se resuelva ese l¨ªo.