El jefe sirio de Antig¨¹edades asegura que el 80% de la ruinas de Palmira est¨¢ en buen estado

¡°Podemos asegurar que el 80% de las ruinas de Palmira est¨¢n en buen estado¡±, ha confirmado en una conversaci¨®n telef¨®nica a EL PA?S, Maamoun Abdulkarim, director general de Antig¨¹edades y Museos en Siria. ¡°He llorado dos veces en mi vida. Cuando fui padre y tras conocer la liberaci¨®n de Palmira¡±, a?ad¨ªa un euf¨®rico director al recibir los informes de su equipo, ya desplazado en el terreno.

Tras sobrevivir a m¨¢s de 2.000 a?os con sus guerras desde el imperio romano al otomano, una quinta parte del yacimiento de Palmira ha sucumbido en pleno siglo XXI bajo el Estado Isl¨¢mico (ISIS por sus siglas en ingl¨¦s). El califato se hac¨ªa el pasado mes de mayo con la novia del desierto y patrimonio de la humanidad, que este domingo fue finalmente liberada por las tropas regulares sirias junto con el apoyo de la aviaci¨®n rusa.

Parte de esta ¡°amarga victoria¡± en la reducci¨®n de da?os, como la califica Abdulkarim, recae sobre la poblaci¨®n local, un remanente de 15.000 de los 70.000 vecinos iniciales. ¡°Tras la destrucci¨®n del Arco del Triunfo seis meses atr¨¢s, los funcionarios junto con la poblaci¨®n local advirtieron a Daesh (acr¨®nimo peyorativo en ¨¢rabe para referirse al ISIS) que nuevos destrozos provocar¨ªan un levantamiento popular¡±, relata Abdulkarim.

En el intervalo de 10 meses, el ISIS ha destruido parte de los tesoros de la humanidad que albergaba este antiguo oasis. Paso obligado para las caravanas llegadas de Asia en su ruta hacia el Imperio Romano, Palmira alberga vestigios grecorromanos ¨²nicos. En agosto, el ISIS dinamitaba el templo de Bel, donde se vener¨® al m¨¢s importante de sus dioses. Tan s¨®lo han sobrevivido los muros exteriores y sus p¨®rticos. La estructura m¨¢s completa con la que contaba Palmira, 2.000 a?os de antig¨¹edad, ya no preside la entrada del Tetrapylon, el corredor de 1.100 metros de largo escoltado por 750 columnas romanas. ¡°?Las columnas est¨¢n intactas al igual que el ¨¢gora!¡±, espeta incr¨¦dulo por tel¨¦fono el director de antig¨¹edades.

En 2010, hasta 150.000 turistas visitaban anualmente Tedmur, como se conoce a Palmira en ¨¢rabe. Entonces, los visitantes recorr¨ªan a camello su espina dorsal, apuntalada por la hilera de columnas. Pero ya no podr¨¢n cruzar el Arco del Triunfo, el ¨²ltimo en ser dinamitado por los yihadistas. ¡°Nos llevar¨¢ un a?o reconstruirlo, pero no es una misi¨®n imposible¡±, se muestra optimista Abdulkarim. A las p¨¦rdidas, que la directora de la UNESCO, Irina Bokova, ha tildado de ¡°cr¨ªmenes de guerra¡±, se suma el templete de Bal Shamin, datado del a?o 17 d.C. En ¨¦l, las gentes imploraban al dios fenicio lluvias que regaran la des¨¦rtica regi¨®n. Los da?os tambi¨¦n se extienden a una decena de torres milenarias, entre ellas las de Elahbel, Iamliku y Kitot. En una evaluaci¨®n preliminar, Abdulkarim celebr¨® la recuperaci¨®n de la estatua del Le¨®n de Al-Lat, de 1.900 a?os y que se pensaba destruida, localizada a pocos metros de su pedestal.

Las im¨¢genes satelitales auguraban otra grata sorpresa. El teatro romano, que cierra el Tetrapylon y donde en tiempos de preguerra los ni?os cargados con un enjambre de postales persegu¨ªan a los turistas, tambi¨¦n ha sobrevivido al califato. Menos suerte ha vivido su museo.¡°Las caras est¨¢n quemadas, pero no est¨¢n muertas¡±, dice Abdulkarim en referencia a los bustos recuperados de las estatuas decapitadas por los terroristas en su interior.

Transcurridas tan solo 24 horas de la expulsi¨®n del ISIS, Abdulkarim ya ha comenzado a sentar las bases para la reconstrucci¨®n. ¡°Me ha llamado Irina Bokova para felicitarme y me ha asegurado que la UNESCO est¨¢ dispuesta a movilizar los recursos necesarios para su restauraci¨®n¡±, se?alo Abdulkarim, confirmando las declaraciones previas hechas por UNESCO. Unos recursos que habr¨¢n de concretar y cifrar en una reuni¨®n prevista para los pr¨®ximos d¨ªas y a la que atender¨¢ el equipo sirio. ¡°Si hay suficientes restos de piedras y est¨¢n en buen estado, podremos reconstruir Palmira en cinco a?os¡±, calcula Abdulkarim. ¡°Pero para eso necesitamos el apoyo de la comunidad internacional¡±, apostilla.

La recuperaci¨®n de Palmira es una de las muchas batallas que libra este director. Quien habr¨¢ de proseguir su particular guerra, una paralela a la que asola al pa¨ªs desde un lustro y que se ha cobrado m¨¢s de 270.000 vidas. Su labor es la de preservar las joyas sirias y de la humanidad. Las ciudades viejas de Alepo, Bosra y Damasco, las ciudades muertas del norte del pa¨ªs o el castillo del Crack de los caballeros, son otros de los seis sitios sirios catalogados como patrimonio de la humanidad por la UNECSO hoy en peligro. A la destrucci¨®n fruto de la guerra se suma el saqueo del pa¨ªs por parte de mercenarios del arte de las grandes mafias afincadas en Europa y Estados Unidos. Un pillaje que, en lo que respecta a las tumbas de Palmira, Abdulkarim espera poder valorar esta misma semana in situ.