Asesinado a tiros un periodista a la puerta de su casa en M¨¦xico

Dos tiros a la puerta de su casa. El periodista Francisco Pacheco Beltr¨¢n, de 49 a?os, fue asesinado en torno a las 6.30 de esta ma?ana cuando acababa de dejar a sus hijas en el colegio y regresaba a su domicilio de la calle 20 de Noviembre, en la convulsa localidad de Taxco (Guerrero). Con su muerte se alarga la interminable lista de informadores ca¨ªdos en M¨¦xico, una tierra donde el periodismo se escribe con sangre. Desde el a?o 2000 han muerto violentamente unos 90 reporteros. Una cifra que, seg¨²n la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos, convierte al pa¨ªs en el lugar m¨¢s peligroso de Am¨¦rica para ejercer la profesi¨®n.

Pacheco colaboraba con El Sol de Acapulco, El Faro de Taxco y la emisora de radio Capital M¨¢xima, en Chilpancingo. Pero su principal actividad proced¨ªa de su modesto portal de noticias: Pacheco Digital. Desde ah¨ª daba cuenta de los sucesos que a diario sacuden Guerrero, el estado m¨¢s violento del pa¨ªs. Su ¨²ltima cr¨®nica, colgada el domingo, trataba sobre la ¡°noche de terror¡± vivida en Acapulco tras el ataque del narco al concurrido hotel donde se aloja la Polic¨ªa Federal.

El m¨®vil del crimen a¨²n no ha sido aclarado. Pero su muerte se ajusta a la diana habitual. Periodistas sin protecci¨®n y mayoritariamente aut¨®nomos, que desde sus atalayas digitales dan cuenta de las matanzas del crimen organizado o los abusos municipales. V¨ªctimas que una vez asesinadas apenas encuentran respaldo y sobre las que recae, como es habitual en M¨¦xico, la insidiosa sombra de la sospecha.

As¨ª ocurri¨® el pasado 2 de enero con Mois¨¦s S¨¢nchez Crespo, el editor del peque?o semanario comunitario La Uni¨®n, en Medell¨ªn Bravo (Veracruz). Nueve encapuchados irrumpieron en su casa de noche, le arrebataron el m¨®vil, la c¨¢mara y el ordenador, y se lo llevaron al infierno. Su cad¨¢ver apareci¨® degollado. Aunque en un principio se intent¨® atribuir la autor¨ªa a la delincuencia com¨²n, finalmente emergi¨® que el asesinato hab¨ªa sido ordenado por la propia jefatura de la Polic¨ªa Municipal. M¨¢s confuso fue el caso de la periodista Anabel Flores Salazar, de 27 a?os, el ¨²ltimo de la lista hasta hoy. La mujer fue secuestrada el 8 de febrero en su domicilio de Veracruz y un d¨ªa despu¨¦s su cad¨¢ver maniatado y semidesnudo fue hallado en una carretera de Puebla. Madre de dos ni?os y colaboradora de El Sol de Orizaba, la investigaci¨®n a¨²n no ha concluido, aunque su asesinato ha sido vinculado con la muerte de un cabecilla narco.

En el caso de Pacheco, la directora de El Sol de Acapulco, Lucila Pel¨¢ez, se mostr¨® prudente. ¡°Nunca nos refiri¨® ninguna amenaza; vamos a esperar a ver por qu¨¦ lo mataron, pero estamos muy tristes. Deja una ni?a y un ni?o. Aqu¨ª, los periodistas estamos en alerta siempre, como en otras partes de M¨¦xico¡±, dijo Pel¨¢ez a este diario.

Poco despu¨¦s del tiroteo, el cad¨¢ver fue reconocido por su esposa. En el lugar de los hechos quedaron, como testigos mudos de los hechos, dos casquillos de 9 mil¨ªmetros percutidos. Pacheco se presentaba a s¨ª mismo en su portal como un hombre ¡°para el que no hab¨ªa imposibles¡±. Desde esta ma?ana engrosa la lista de periodistas asesinados en M¨¦xico.