?Ha cambiado el ISIS de t¨¢ctica?
La campa?a de atentados muestra un nuevo patr¨®n en un grupo que pierde territorio y reclutas
Es tal la pasi¨®n del Estado Isl¨¢mico (ISIS si se usan sus antiguas siglas en ingl¨¦s) por los atentados suicidas que en una de sus ¨²ltimas infograf¨ªas -haberlas haylas y con frecuencia- enumera los tipos de dispositivos y veh¨ªculos usados para atacar. Seg¨²n el gr¨¢fico difundido por Amaq, uno de los ¨®rganos de propaganda de los yihadistas, el terrorista del ISIS cuenta con hasta 13 modalidades: coches, tanques, camiones, chalecos, cinturones...e incluso maletines. Un bot¨®n de muestra para ilustrar una brutal campa?a terrorista con la que la organizaci¨®n sirio-iraqu¨ª ha respondido ante la p¨¦rdida de territorio y hombres; esto es, un viraje t¨¢ctico con el que los milicianos de Abubaker al Bagdadi quieren mantener el pulso b¨¦lico y el efecto en la opini¨®n p¨²blica. Muy al estilo Al Qaeda.
Seg¨²n las propias cifras reunidas mensualmente por Amaq, hasta el mes de abril, el ISIS habr¨ªa perpetrado 372 atentados suicidas. En este recuento se incluyen ataques en Siria e Irak -con la disputada provincia de Al Anbar a la cabeza-, pero tambi¨¦n algunos llevados a cabo en Libia. Y si la tendencia se mantiene en mayo, mes en el que el grupo ha matado a decenas de personas en una brutal campa?a sobre la capital iraqu¨ª, Bagdad -al menos 140 muertos en siete d¨ªas-, la cifra superar¨¢ los 400 atentados antes de que llegue junio. Este martes, el grupo asumi¨® de nuevo la autor¨ªa de un ataque en el barrio chi¨ª de Shaab. Aunque un portavoz gubernamental se?al¨® en primera instancia que el atacante era una mujer, el grupo identific¨® posteriormente al suicida como Abu Khattab al Iraqi.
Pese a lo parad¨®jico, la campa?a de atentados coincide con uno de los momentos de mayor debilidad del grupo que proclam¨® el califato en junio de 2014 desde Mosul, en el norte de Irak. En unas recientes declaraciones, el diplom¨¢tico norteamericano Brett McGurk, representante especial en la coalici¨®n anti-ISIS que lidera Estados Unidos, manifest¨® que el califato se estaba "hundiendo". "El ISIS se apoya en los ataques suicidas", dijo McGurk, "para conseguir titulares espectaculares; adem¨¢s no es dif¨ªcil tener a alguien que se ajuste un cintur¨®n de explosivos y se meta en un mercado para hacerse volar por los aires."
El portavoz del Pent¨¢gono Peter Cook inform¨® precisamente este lunes de que el ISIS ha perdido un 40% del territorio que controlaba en Irak y cerca del 20% en Siria desde que Washington inici¨® la campa?a a¨¦rea contra el grupo, en agosto de 2014 -m¨¢s de 12.000 bombardeos, la mayor¨ªa sobre posiciones y arsenales yihadistas en Irak-. Por aquel entonces, los hombres de Al Bagdadi contaban pr¨¢cticamente con un tercio del suelo sirio y otro tanto del iraqu¨ª.Sirva de ejemplo: si 2015 fue el a?o de la conquista de Palmira (Siria) y Ramadi (Irak), 2016 es el de su p¨¦rdida. Ramadi es un buen paradigma de c¨®mo el ISIS usa los atentados yihadistas: lo hizo para entrar en la cuidad a trav¨¦s de yihadistas for¨¢neos, muchos de ellos saud¨ªes, y lo repiti¨® al ser expulsados como ¨²ltimo coletazo en la defensa de la posici¨®n.
El mapa ha cambiado sustancialmente, como lo ha hecho el poder de atracci¨®n del grupo. De nuevo seg¨²n los datos del Alto Mando norteamericano, si hace un a?o cruzaban a tierras del califato unos 2.000 nuevos reclutas al mes, ahora la cifra ronda los 200. El refuerzo de los controles fronterizos en Turqu¨ªa han ayudado a este descenso.
Y como pez que se muerde la cola, sin territorio, el atractivo para los posibles reclutas decae, y sin hombres resulta m¨¢s dif¨ªcil controlar el terreno. Coinciden los analistas en se?alar que ante la falta de un ej¨¦rcito fuerte, el ISIS ha recurrido a elevar su campa?a de atentados como golpe desesperado para impactar a corto plazo, como ya hiciera Al Qaeda en Irak y Afganist¨¢n.
Si la estrategia es la misma, mantener el califato, la t¨¢ctica ha virado de la ofensiva constante para ganar terreno -a¨²n lo hacen, pero en plazas peque?as- a la campa?a de atentados. Dos flancos quedan no obstante al descubierto para la coalici¨®n internacional: los fallos de seguridad en Bagdad, uno de los objetivos simb¨®licos del ISIS, y las pocas bajas sufridas por el grupo en su c¨²pula o Consejo de la Shura.
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