Las protestas en Francia se agravan con m¨¢s violencia en las calles

Camioneros, ferroviarios, controladores y empleados del sector de la energ¨ªa han sido de nuevo los m¨¢s activos en las protestas. M¨¢s de un tercio de trenes no han cubierto sus destinos ni tampoco el 15% de los vuelos previstos. El mi¨¦rcoles, adem¨¢s, se vot¨® a favor de paros y huelgas en las 19 centrales nucleares del pa¨ªs, de las que depende el 75% de la producci¨®n el¨¦ctrica.

Desde la madrugada y de norte a sur del pa¨ªs, piquetes de trabajadores han bloqueado carreteras y puertos en Nantes, Rennes, Cherburgo, Brest o Le Havre. En Par¨ªs, cientos de camiones han provocado colas de decenas de kil¨®metros de coches en el perif¨¦rico de la capital.

A mediod¨ªa, entre 153.000 y 300.000 personas (seg¨²n la polic¨ªa o los convocantes) han participado en manifestaciones por ciudades de todo el pa¨ªs. El l¨ªder de la CGT, Philippe Martinez, ha encabezado la de Par¨ªs, donde han desfilado 19.000 personas (100.000, seg¨²n los sindicatos).

Al menos en media docena de ciudades ha habido incidentes, choques con la polic¨ªa o destrozos de mobiliario urbano o establecimientos. La polic¨ªa, que us¨® gases lacrim¨®genos, ha detenido en la capital a 12 j¨®venes y a otros 65 en el resto de Francia. En Burdeos (m¨¢s de 3.000 maifestantes), decenas de j¨®venes han lanzado piedras y objetos contra una comisar¨ªa y coches policiales. En Lyon (3.000), airados manifestantes lanzaron recipientes de pintura a los agentes. En Nantes (1.300), varios enmascarados participaron en la manifestaci¨®n y luego lanzaron objetos o pintura contra las sedes del diario Ouest France o la emisora France 3 Ouest. En Rennes (3.500), varias personas bloquearon las v¨ªas f¨¦rreas.

La CGT, primera sindicato del pa¨ªs con m¨¢s de 600.000 afiliados, asegura estar dispuesta a ¡°bloquear Francia¡± para forzar que el Ejecutivo retire el proyecto de ley. ¡°No queremos negociarlo, sino simplemente que se retire¡±, agrega Jean-Claude Mailly, l¨ªder del tercer sindicato franc¨¦s, Fuerza Obrera, presente a la manifestaci¨®n junto a Matinez.

El Ejecutivo, que aprob¨® por decreto la reforma a su paso por la C¨¢mara baja, tampoco est¨¢ dispuesto a ceder. El mi¨¦rcoles, el jefe del gubernamental grupo socialista, Bruno Le Roux, declar¨® que estaba abierta la posibilidad de dialogar sobre el punto ahora m¨¢s pol¨¦mico de la reforma: la primac¨ªa de los acuerdos de empresa sobre los del sector. De inmediato, le corrigi¨® el primer ministro, Manuel Valls. ¡°Ni retirada ni cesiones¡±, afirm¨® el jefe del Ejecutivo. ¡°La CGT no hace las leyes en Francia¡±.

Lo mismo ha ocurrido este jueves cuando el ministro de Finanzas, Michel Sapin, amigo de Hollande, ha sugerido cambios en ese art¨ªculo clave. Valls ha insistido de inmediato a la cadena BFMTV que no habr¨¢ cambios importantes. "No se plantea un cambio de rumbo" sino, en todo caso, algunas "mejoras y modificaciones" en el tr¨¢mite parlamentario antes de ser aprobada definitivamente en julio. El texto ya ha sido rebajado con la inclusi¨®n de 600 de las casi 5.000 enmiendas presentadas.

Para el jefe del Gobierno, las resistencias a la reforma demuestran de nuevo que "este pa¨ªs se muere por sus conservadurismos", tanto a la izquierda como a la derecha. Ante el Senado, Valls ha calificado este jueves de "inaceptable" que los sindicatos compliquen tanto la vida diaria de los franceses y las cadenas de producci¨®n. "No se puede bloquear Francia".

La polic¨ªa ha desbloqueado dos de las seis refiner¨ªas ¡ªhay ocho en Francia¡ª que los sindicatos manten¨ªan aisladas, as¨ª como 11 dep¨®sitos de combustible de los 92 existentes. El mayor riesgo actual para la actividad del pa¨ªs se centra ahora en las 19 centrales que, con sus 58 reactores, producen el 75% de la electricidad del pa¨ªs. Por iniciativa de la CGT, los empleados de la de Nogent-sur-Seine fueron los primeros en votar a favor de la huelga y de inmediato hicieron lo mismo el resto de centros.

Suspendidos el 15% de los vuelos y un tercio de los trayectos ferroviarios en la nueva jornada de protestas

La red de distribuci¨®n no descarta potenciales cortes de suministro. En varios departamentos, los prefectos han limitado por decreto a 20 litros la venta de gasolina por habitante y han prohibido rellenar garrafas o botellas en las gasolineras. Por vez primera desde hace seis a?os, el Gobierno ha tenido que usar la reserva estrat¨¦gica de combustibles, mientras tranquiliza a la poblaci¨®n al afirmar que hay gasolinas para m¨¢s de tres meses de consumo.

Para Valls, todo el caos lo genera ¡°una minor¨ªa¡±, la CGT, que ha perdido a raudales militantes en los ¨²ltimos a?os ¡ªlleg¨® a tener dos millones¡ª debido a la crisis de credibilidad entre los trabajadores. Para el principal sindicato, los problemas que causan sus movilizaciones a los ciudadanos amenazan con volverse en su contra si, como anuncian, los paros y huelgas ser¨¢n mayores en junio, en pleno campeonato de la Eurocopa de f¨²tbol. Hasta el momento, los franceses apoyan las protestas: el 62%, seg¨²n una encuesta difundida por la cadena RTL. "Respeto a esa organizaci¨®n y su historia, pero no la inaceptable radicalizaci¨®n", dijo Valls el mi¨¦rcoles Valls en el Parlamento.

La derecha, con su l¨ªder Nicolas Sarkozy a la cabeza, ha pedido que les retengan los sueldos a los trabajadores que bloquean centros de producci¨®n y que les lleven ante los jueces. La ley prev¨¦ penas de hasta cinco a?os de c¨¢rcel. El partido de Sarkozy, Los Republicanos, exige al Gobierno que emplea la fuerza para no permitir que haya ni una sola refiner¨ªa bloqueada.

A un a?o de las elecciones presidenciales, el jefe del Estado, Fran?ois Hollande, ha tenido un respiro esta semana en medio de tanta tensi¨®n. El paro volvi¨® a bajar en abril (en 19.900 personas) despu¨¦s de haberlo hecho tambi¨¦n en marzo (menos 60.000 desempleados). La tendencia facilita que Hollande, a quien las encuestas le auguran una cat¨¢strofe, vuelva a ser candidato porque dijo que solo lo ser¨ªa si baja el paro, ahora ligeramente por encima del 10%.

Y tambi¨¦n un m¨ªnimo doble consuelo para el Gobierno: el movimiento de indignados de la plaza de la Rep¨²blica languidece ante este enorme movimiento sindical y el gran sindicato reformista CFDT (Confederaci¨®n Francesa Democr¨¢tica de Trabajo) exige p¨²blicamente que no se retire la reforma laboral. En muchos grandes centros de trabajo, la CFDT disputa el primer puesto a la CGT, que con esta ola de movilizaciones intenta recuperar buena parte de su fuerza perdida.