Un empate en el Supremo mantendr¨¢ bloqueada la reforma migratoria de Obama

En una comparecencia desde la Casa Blanca, Obama respondi¨® que el resultado del Supremo ¡°nos aleja a¨²n m¨¢s del pa¨ªs que aspiramos a ser¡± y que el dictamen es ¡°desgarrador¡± para los millones de inmigrantes que han creado familias y construido sus vidas en Estados Unidos. El presidente reiter¨® que la acci¨®n de los jueces no tendr¨¢ impacto en las reformas anteriores y que ¡°los padres de residentes legales seguir¨¢n siendo baja prioridad¡± de cara a las deportaciones.

¡°Debemos juzgar si queremos un sistema hip¨®crita en el que los trabajadores que cosechan nuestra fruta o hacen nuestras camas tienen los mismos derechos ante la ley o no¡±, dijo Obama, instando a los ciudadanos a que recuerden el impacto de esta sentencia, que afecta a casi cinco millones de personas y sus familias, cuando acudan a votar en noviembre. La reforma ya es uno de los asuntos centrales de esta campa?a electoral gracias a las acusaciones xen¨®fobas del republicano Donald Trump contra los inmigrantes.

La reforma ha pasado as¨ª de ser una de las grandes promesas electorales de Obama en 2008 a una de sus mayores frustraciones dentro de la Casa Blanca por el bloqueo republicano a sus iniciativas. Este jueves se ha convertido en uno de los agujeros que quedar¨¢n en su amplio legado. El presidente critic¨® duramente este jueves el rechazo de los republicanos tanto a la reforma como al reemplazo del juez Antonin Scalia, fallecido el pasado mes de febrero, y cuya ausencia ha propiciado el empate en este dictamen.

El Supremo no se ha pronunciado sobre la legalidad de la orden ejecutiva de Obama, por lo que no da la raz¨®n ni al presidente ni a los 26 Estados que le demandaron. El empate supone que debe prevalecer la sentencia pronunciada por la ¨²ltima corte federal que estudi¨® el caso en la ¨²ltima instancia y que ya decidi¨® bloquear la reforma. El presidente record¨® desde la Casa Blanca que la ¨²nica esperanza de los 11 millones de indocumentados es que el pr¨®ximo Congreso apruebe una ley para crear un nuevo sistema migratorio.

Obama se ha quedado sin ver entrar en vigor su proyecto ¡ªuno de los m¨¢s ambiciosos de su presidencia¡ª, para que los indocumentados que son padres de ni?os estadounidenses, adem¨¢s de cumplir con otros requisitos, puedan permanecer y trabajar legalmente en EE UU. La normativa tambi¨¦n ampliaba otro programa conocido como DACA y que desde un a?o antes conced¨ªa los mismos beneficios a los j¨®venes indocumentados conocidos como dreamers y que entraron en el pa¨ªs antes de cumplir los 16 a?os. Obama reiter¨® este jueves que este programa original ¡°ha cambiado m¨¢s de 700.000 vidas¡± y seguir¨¢ en vigor.

La demanda original hab¨ªa sido planteada por 26 Estados gobernados por republicanos liderados por Texas y que alegaban ser perjudicados por la regulaci¨®n de indocumentados. Los denunciantes consideraron asimismo que el presidente se hab¨ªa excedido en sus competencias y argumentaban que la autoridad para regular en materia de inmigraci¨®n es exclusiva del Congreso.

¡°La decisi¨®n de hoy mantienen lo que hemos alegado desde el principio: que una sola persona, ni siquiera el presidente, puede cambiar unilateralmente la ley¡±, declar¨® en un comunicado el fiscal general de Texas, Ken Paxton. ¡°Esta es una victoria para los que creemos en la separaci¨®n de poderes¡±.

¡°Estoy profundamente decepcionado y sorprendido por una decisi¨®n que perjudica a las familias y que obliga a nuestras comunidades a permanecer en las sombras¡±, asegur¨® el senador dem¨®crata Bob Men¨¦ndez, uno de los grandes defensores de la reforma. ¡°Esta decisi¨®n pasar¨¢ a la historia como uno de los peores momentos en nuestra lucha por un sistema justo de inmigraci¨®n¡±.

El Supremo estudi¨® esta primavera dos cuestiones centrales de la reforma migratoria. La primera es si el Estado de Texas, tiene legitimidad para declararse en perjuicio por la regulaci¨®n de indocumentados. La segunda es si Obama se extralimit¨® en sus competencias al decidir que se cancelaran las deportaciones de un grupo espec¨ªfico de indocumentados.

La Casa Blanca argument¨® que la normativa era necesaria porque, ante la falta de una reforma en el Congreso, deportar a m¨¢s de 11 millones de ¡®sin papeles¡¯ es una tarea costosa y pr¨¢cticamente imposible. Los Estados demandantes argumentaron que las leyes, como repiti¨® este jueves el presidente de la C¨¢mara de Representantes, Paul Ryan, ¡°es el Congreso quien redacta las leyes, no el presidente¡±. A pesar de que los republicanos celebraron la acci¨®n del Supremo como una victoria, la falta de una sentencia supone que la instituci¨®n no les ha quitado ni les ha dado la raz¨®n.