La retirada de la reforma educativa pone a prueba el di¨¢logo de Pe?a Nieto con los maestros
El Gobierno se compromete a reunirse con los familiares de los fallecidos en la matanza de Nochixtl¨¢n
La negociaci¨®n abierta entre el Gobierno y la radical Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educaci¨®n (CNTE) se top¨® anoche con su primer escollo. La exigencia sindical de que se retire la reforma educativa choc¨® con la negativa presidencial. El encontronazo, que pone a prueba el propio di¨¢logo, no impidi¨® que la reuni¨®n alcanzar¨¢ un avance significativo: un pr¨®ximo encuentro del secretario de Gobernaci¨®n, Miguel ?ngel Osorio Chong, con los familiares de la matanza de Nochixtl¨¢n (Oaxaca), donde nueve civiles murieron en un salvaje enfrentamiento con la polic¨ªa.
La negociaci¨®n ha entrado en su fase m¨¢s delicada. En la primera reuni¨®n, celebrada la semana pasada, Osorio Chong, el enviado plenipotenciario del presidente, mostr¨® su disposici¨®n a ¡°tocar todo y hablar de todo¡±. La frase, aunque muy matizada por el propio secretario, despert¨® en la CNTE la esperanza de que su petici¨®n de principio pudiese prosperar. Pero el lunes, antes de reanudarse las conversaciones, esta ilusi¨®n se diluy¨®. Desde Canad¨¢, el presidente Enrique Pe?a Nieto dej¨® claras las l¨ªneas rojas. ¡°El Gobierno no est¨¢ dispuesto a negociar la reforma educativa. Ni esta ley ni ninguna otra. Esa es la premisa central. Sobre ella, el Gobierno siempre estar¨¢ abierto a dialogar, escuchar y encauzar diferencias. Espero que estos encuentros deparen una distensi¨®n¡±, afirm¨® Pe?a Nieto.
Abierta la negociaci¨®n, en la noche del lunes al martes, Chong record¨® las palabras del jefe de Estado y puso sobre la mesa el concepto de ¡°corresponsabilidad¡±, es decir, que el Gobierno har¨¢ cesiones en la medida en que la CNTE levante los bloqueos que impiden el abastecimiento a cientos de miles de ciudadanos de Oaxaca y Chiapas, donde la coordinadora tiene su base de poder. ¡°Ellos deben trabajar para que se den las condiciones de estabilidad y tranquilidad, y que lleguen los suministros a los municipios. Y nosotros generaremos una ruta que nos permita hacer un planteamiento integral¡±, expuso Chong.
Bajo estas coordenadas, el Gobierno acept¨® reunirse este mi¨¦rcoles con los familiares de los fallecidos en Nochixtl¨¢n y dej¨® para posteriores encuentros las espinas mayores de la negociaci¨®n. La CNTE, por su parte, manifest¨® su ¡°decepci¨®n¡± por la negativa a retirar la ley y pidi¨® tiempo para avanzar. ¡°Estamos en un proceso, esto no es algo que se resuelva en horas. Volveremos a encontrarnos y mantendremos los mecanismos abiertos, pero la movilizaci¨®n se mantiene¡±, indic¨® un dirigente sindical.
La coordinadora, una escisi¨®n radical del mayoritario Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educaci¨®n (SNTE), lleva dos a?os ofreciendo una feroz resistencia a la implantaci¨®n de la reforma educativa. Los bloqueos de carreteras, las tomas de aeropuertos y los asaltos a dependencias estatales han jalonado su oposici¨®n a una ley que fue aprobada por la mayor¨ªa del Parlamento y que goza, seg¨²n las encuestas, del respaldo de gran parte de la ciudadan¨ªa.
Considerada la ¨²ltima gran baza pol¨ªtica de Pe?a Nieto, esta norma pone fin al sistema clientelar que sirve de base al poder de la CNTE en los empobrecidos estados del sur. Para ello acaba con la compra-venta de plazas y su heredad, e impone evaluaciones a los maestros. Pero en un universo de enorme pobreza, con un PIB per c¨¢pita cinco veces menor que el de la capital, estas medidas son vistas por miles docentes como una amenaza a unos puestos de trabajo que representan su ¨²nica fuente de ingresos.
Las apelaciones oficiales a que, incluso suspendiendo tres veces la evaluaci¨®n docente, se puede retener el empleo, no han servido para apaciguar los ¨¢nimos. La CNTE, que lleg¨® a controlar la administraci¨®n educativa en Oaxaca, ha mantenido las espadas en alto y movilizado en el sur a sus contingentes. Los cortes de carretera y las protestas se han sucedido en las ¨²ltimas semanas hasta tocar techo el domingo 19 de junio con la matanza de Nochixtl¨¢n. S¨®lo este derramamiento de sangre, cuyas principales inc¨®gnitas siguen intactas, abri¨® las puertas a la negociaci¨®n. Ahora, asentadas las posiciones y reducido el maximalismo, el di¨¢logo ha entrado en el resbaladizo terreno de lo posible.
Pero el tablero va m¨¢s all¨¢ de la mesa de negociaciones. La oposici¨®n a la reforma educativa ha sido tomada como bandera por el aspirante presidencial Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. En una jugada bien calculada, el t¨®tem de la izquierda mexicana y l¨ªder de Morena ha salido en defensa de los maestros disidentes y ha pedido la dimisi¨®n de Osorio Chong por las muertes de Nochixtl¨¢n. Este paso, que se formaliz¨® este domingo con una manifestaci¨®n en pleno centro de la Ciudad de M¨¦xico, busca reforzar sus apoyos en el sur y, sobre todo, catalizar a su favor el malestar con el Gobierno.
La toma de postura no deja de ser arriesgada. Su respaldo a un movimiento tan vol¨¢til como la CNTE le sit¨²a, como denuncian los portavoces gubernamentales, en el l¨ªmite de la ley, en una zona confusa que le aleja de los caladeros del voto moderado y abona la tesis de sus adversarios de que es un extremista. Pero tambi¨¦n le permite elevar el tiro y entrar en confrontaci¨®n directa con los dos pri¨ªstas con m¨¢s posibilidades de aspirar a la carrera presidencial, el propio Osorio Chong, y el secretario de Educaci¨®n, Aurelio Nu?o. Desde esta perspectva, sobre la mesa de negociaci¨®n ahora mismo est¨¢ en juego mucho m¨¢s que un acuerdo con un sindicato levantisco.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.