Francia afronta el terror de nuevo cu?o
El terrorista ten¨ªa que haber devuelto el d¨ªa 13 el cami¨®n que alquil¨® en una localidad cercana
La matanza del jueves en Niza, que ha costado la vida a 84 personas y heridas de extrema gravedad a otras 52, demuestra que Francia debe prepararse para otros atentados de nuevo cu?o similares: cometidos por un solo individuo con escasos medios y log¨ªstica. De su pasado solo constan antecedentes por delitos comunes de violencia. Ning¨²n rastro en los servicios de inteligencia. Ninguna huella de radicalizaci¨®n islamista. El terror entra en una nueva fase. Es la confirmaci¨®n de avisos recientes de los expertos y del espionaje franc¨¦s, mientras lo ocurrido ha echado por tierra la tesis oficial de que el mayor peligro ya hab¨ªa pasado y hab¨ªa llegado el momento de bajar el nivel de alerta. El presidente, Fran?ois Hollande, ha tenido que rectificar a marchas forzadas.
El autor de la matanza no necesit¨® infraestructura ni grandes gastos. Solo alquilar tres d¨ªas antes un cami¨®n muy cerca del objetivo. Lo aparc¨® y, poco antes de la masacre, lleg¨® en bici hasta el veh¨ªculo. Mohamed Lahouaiej Bouhlel, de 31 a?os, nacido en M¡¯Saken (T¨²nez), era un hombre ¡°totalmente desconocido de los servicios de informaci¨®n¡±, como cont¨® ayer el fiscal de Par¨ªs, Fran?ois Molins, encargado de este caso. Tan solo consta una condena en marzo por agredir a otro conductor en un altercado de tr¨¢fico. Le golpe¨® con un bate de b¨¦isbol.
En pleno proceso de divorcio de su mujer, tambi¨¦n tunecina, este reservado y hosco vecino de Niza se ha convertido en el verdugo de la ciudad de un d¨ªa a otro. Durante dos kil¨®metros, embisti¨® con el cami¨®n a adultos y ni?os. ¡°Rebotaban en el cami¨®n o eran aplastados¡±, han contado varios testigos.
Entre los muertos, diez ni?os y adolescentes. En los hospitales, 52 heridos se debaten entre la vida y la muerte. ¡°Nos enfrentamos a una guerra¡±, repiti¨® el primer ministro, Manuel Valls. ¡°Hemos cambiado de ¨¦poca, Francia va a tener que vivir con el terrorismo¡±, a?adi¨®.
La guerra ha cambiado esta vez y el Gobierno no lo esperaba. Diez horas antes del ataque, el presidente Fran?ois Hollande anunci¨® que el estado de excepci¨®n vigente desde noviembre se levantar¨ªa el pr¨®ximo 26 y que los 10.000 militares en la calle pasar¨ªan a ser 7.000.
Hab¨ªa pasado la Eurocopa sin incidentes mayores, ya no hab¨ªa previstas manifestaciones sindicales y el Tour de Francia est¨¢ en su ¨²ltima semana. Ayer tuvo que dar marcha atr¨¢s en las dos medidas anunciadas mientras la oposici¨®n le exig¨ªa m¨¢s dureza.
Ning¨²n grupo se ha responsabilizado de este nuevo atentado, de factura diferente a los recientes en Francia ¡ªpreparados, ejecutados por yihadistas entrenados, con alarde log¨ªstico¡ª, pero Valls, Hollande y Molins han aportado sus valoraciones: para el primero, Lahouaiej ¡°sin duda est¨¢ conectado con el islamismo radical¡±. Para Hollande, ¡°no se puede negar que es un atentado¡±; para Molins, la matanza responde ¡°exactamente¡± a lo que ordenan y predican los movimientos yihadistas. Es decir, ataques por todos los medios ¡ªcuchillos, coches¡¡ª contra los no creyentes, y especialmente contra ¡°los sucios franceses¡±, como ped¨ªa un reconocido portavoz del ISIS en un mensaje en 2014.
Este salto cualitativo, con zarpazos a¨²n m¨¢s dif¨ªciles de prever, es el que anunci¨® hace tres meses el jefe de los servicios de espionaje interior, Patrick Calvar. Augur¨® ¡°un nuevo tipo de ataque¡± en lugares de gran afluencia de p¨²blico ¡°para crear un clima de p¨¢nico¡±. Y es lo que vienen anunciando los expertos en paralelo a la p¨¦rdida de terreno en Siria e Irak por parte del Estado Isl¨¢mico (ISIS, en sus siglas en ingl¨¦s).
Dirigentes yihadistas han afirmado que, en efecto, se multiplicar¨¢n las acciones individuales por todo Occidente.
Ante el fen¨®meno, la polic¨ªa sabe que sirve de poco el enorme despliegue de gendarmes y militares por todo el pa¨ªs: m¨¢s de 100.000 solo durante el mes de la Eurocopa. Ni los bombardeos franceses en Siria e Irak, que el Gobierno se apresta de nuevo a intensificar.
Origen de combatientes
La clave, insisten fuentes policiales, est¨¢ en el terreno de la informaci¨®n, del espionaje, de la infiltraci¨®n en grupos vecinales de exaltados. El caso de Niza es claro. De all¨ª sali¨® hace a?os Omar Omsen, convertido en uno de los principales reclutadores de combatientes yihadistas en Europa. De all¨ª han salido 55 presuntos yihadistas a Siria o Irak en lo que va de a?o. En octubre de 2014 se fueron 11 miembros de la misma familia, incluidos cuatro ni?os. Y en la id¨ªlica Niza hay detectados 122 radicalizados.
Pero ninguno de ellos era Mohamed Lahouaiej Bouhlel. Aparte de las peleas, su ¨²nico problema era que estaba separ¨¢ndose. El tel¨¦fono y la pistola que ten¨ªa en el cami¨®n, junto con material inform¨¢tico intervenido en su casa, pueden arrojar luz sobre el porqu¨¦.
Mientras, los franceses est¨¢n convencidos de que seguir¨¢n contando muertos. ¡°La guerra ser¨¢ larga¡±, les repite Hollande. Y tambi¨¦n h¨¦roes. Como el polic¨ªa que se lanz¨® sobre el cami¨®n y sus dos compa?eros que se tirotearon con Lahouaiej hasta matarlo. Nadie sabe a cu¨¢ntos adultos y ni?os han salvado.
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