Plomo para el alcalde
El asesinato del regidor Ambrosio Soto recuerda la fuerza del narco en Tierra Caliente, M¨¦xico
Plata o plomo, la ley del narco. Ambrosio Soto Duarte se neg¨® a pagarle al narco y le cobraron con plomo. El alcalde del municipio mexicano de Pungarabato (Guerrero) fue emboscado en una carretera el s¨¢bado por la noche y acribillado dentro de su coche junto al ch¨®fer. Entre 250 y 300 balas. Los dos muertos. Ni siquiera los pudieron salvar los cuatro polic¨ªas que los escoltaban. Dos acabaron heridos. Uno de los sicarios tambi¨¦n muri¨® en el tiroteo, pero la venganza qued¨® consumada.
En Tierra Caliente, el narco sigue dictando sentencia. La regi¨®n comprende partes de los Estados de Michoac¨¢n, Guerrero y Estado de M¨¦xico. En 2014 vivi¨® el alzamiento de las autodefensas, civiles armados contra el crimen organizado, y el Gobierno tuvo que concentrar all¨ª buena parte de su m¨²sculo para golpear a las mafias y a la vez traer de vuelta al redil de la legalidad a los contingentes ciudadanos en v¨ªas de paramilitarizaci¨®n. El problema se contuvo. No se erradic¨®. Los carteles siguen queriendo ser el poder de facto. Soto Duarte es el ejemplo.
El alcalde gan¨® las elecciones de Pungarabato en 2015 e inmediatamente los se?ores del plomo llamaron a su puerta. "El tesorero y el director de obras ten¨ªan que ser los propuestos por el jefe de plaza [el capo local]", dijo Soto Duarte en una entrevista. Los hombres del narco ten¨ªan que seguir dentro del ayuntamiento para expoliarlo. Como tarifa base de extorsi¨®n le pidieron tres millones de pesos mensuales, unos 150.000 d¨®lares. Por lo dem¨¢s, ni que decir tiene que el nuevo alcalde deb¨ªa apartar la mirada a los cultivos de amapola o al robo de ganado.
Mataron a mi primo, estoy amenazado por la delincuencia organizada. Ya es hora de actuar se?or presidente @EPN. #TierraCaliente lo necesita.
— Ambrosio Soto (@BOCHOSOTO1) July 9, 2016
?l se neg¨® e hizo visible su problema. Con las autoridades, con los medios de comunicaci¨®n. La Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n le puso polic¨ªas de guardaespaldas. Desde la Ciudad de M¨¦xico estaban al tanto de que la zona se estaba volviendo a calentar y reforzaron el operativo en vigor desde la crisis de las autodefensas con medio millar de agentes, despu¨¦s de que el zar anticrimen Renato Sales fuese en diciembre de 2015 a hablar con los alcaldes de la comarca en Ciudad Altamirano, capital de Pungarabato. Al terminar la reuni¨®n, Soto Duarte dijo a la prensa: "Rompamos el pacto de silencio, hay que decir las cosas".
Pas¨® el tiempo y el alcalde sigui¨® amenazado. Adem¨¢s de ir con escoltas, empez¨® a cargar un arma. La primera semana de julio de 2016, su primo y anterior ch¨®fer, Sebast¨¢n Soto, fue secuestrado y apareci¨® en un basurero, torturado y ultimado a balazos. Entonces el alcalde elev¨® su llamada de auxilio y tuite¨® al presidente Enrique Pe?a Nieto: "Mataron a mi primo, estoy amenazado por la delincuencia organizada. Ya es hora de actuar se?or presidente. Tierra Caliente lo necesita".
El s¨¢bado pasado, de noche, lo cazaron a ¨¦l. "No se dej¨® amedrentar", record¨® tras su asesinato Miguel Barbosa, senador de su partido, el Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD). Barbosa dijo que Guerrero, punto de referencia de la geograf¨ªa criminal mexicana desde el caso de los 43 estudiantes desaparecidos, es un Estado "fallido" en el que las instituciones est¨¢n "rebasadas".
El fin de semana record¨® la vulnerabilidad de los alcaldes en M¨¦xico. Adem¨¢s de Soto Duarte fue asesinado Domingo L¨®pez, alcalde de San Juan Chamula, un municipio ind¨ªgena de Chiapas. Seg¨²n la Asociaci¨®n Nacional de Alcaldes, desde 2006 han han sido asesinados 47 alcaldes y 32 exalcaldes
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