Xi Jinping arrincona a sus rivales del Partido Comunista

El documento, aprobado por el Comit¨¦ Central del Partido Comunista, afirma que los ¨®rganos centrales y provinciales de la Liga ¡ªdonde se acumula m¨¢s poder¡ª se reducir¨¢n y se asignar¨¢ m¨¢s personal a las administraciones municipales y en ¨¢reas "que sirven directamente a la juventud del pa¨ªs". El texto tambi¨¦n apunta que los delegados "deber¨ªan ser m¨¢s representativos de los miembros" y urge a "prestar m¨¢s atenci¨®n a los j¨®venes corrientes".

Esta deposici¨®n supone la en¨¦sima estocada a una facci¨®n que tradicionalmente ha ejercido de contrapeso a la que lidera el presidente Xi, los princelings (hijos de la ¨¦lite pol¨ªtica). La Liga de Juventudes, con 87 millones de miembros, alcanz¨® su mayor cuota de poder con Hu Jintao como jefe de Estado, pero desde finales de 2012 ¡ªcoincidiendo con la llegada de Xi al poder¡ª su importancia y prestigio han ido en declive.

"El plan de reforma indica que la Liga est¨¢ de capa ca¨ªda. No solamente por el conflicto entre facciones, en el que una de ellas ha logrado el control, sino tambi¨¦n por su incompetencia y falta de responsabilidad", opina el historiador Zhang Lifang.

La ca¨ªda en desgracia del grupo empez¨® con la de Ling Jihua, mano derecha del presidente Hu y tambi¨¦n miembro de la Liga. Su hijo de 23 a?os se mat¨® hace cuatro a?os en un accidente de tr¨¢fico mientras conduc¨ªa un Ferrari a toda velocidad por Pek¨ªn. El esc¨¢ndalo indign¨® a la opini¨®n p¨²blica y cort¨® de ra¨ªz el ascenso pol¨ªtico de su padre. El ¨®rgano anticorrupci¨®n del Partido Comunista, liderado por Wang Qishan ¡ªun hombre muy pr¨®ximo a Xi¡ª le puso en el punto de mira y a toda la facci¨®n. Hace un mes fue condenado a cadena perpetua.

Adem¨¢s de perder a uno de sus principales exponentes, esta ala del partido se ha visto denostada desde varios sectores de la formaci¨®n. Xi calific¨® a algunos de sus miembros de "arist¨®cratas" y los medios estatales han asegurado que el grupo se hab¨ªa vuelto "elitista e ineficiente". Su presupuesto ha sido recortado a m¨¢s de la mitad este a?o. Hasta el propio primer ministro Li Keqiang ha quedado ensombrecido por Xi, que ha acumulado poder hasta en los asuntos en materia econ¨®mica, que deber¨ªan recaer en Li.

Los cambios que deber¨¢ aceptar la Liga de Juventudes evidencian la lucha de las distintas facciones de la formaci¨®n ante el 19 Congreso del pr¨®ximo a?o, durante el cual cinco de los siete miembros del m¨¢ximo ¨®rgano de decisi¨®n del pa¨ªs ¡ªtodos excepto Xi y Li¡ª deber¨¢n retirarse al tener m¨¢s de 68 a?os (hay algunas excepciones). Los dos l¨ªderes chinos tienen mandatos de diez a?os, pero a mitad del camino se lleva a cabo una remodelaci¨®n y entra una nueva horneada de altos cargos, entre ellos los que ser¨¢n sus sucesores. Xi quiere allanar el camino para que los elegidos a finales de 2017 sean hombres de su m¨¢xima confianza y que mantengan su legado.

"Es dif¨ªcil de decir porque aun queda un a?o, pero todo indica que la facci¨®n liderada por Xi est¨¢ rompiendo el equilibrio de poder que se alcanz¨® en el decimoctavo congreso y construyendo un nuevo Ej¨¦rcito para el pr¨®ximo", explica Zhang. Aunque no se ha anunciado de forma oficial, se especula que una de las pr¨®ximas v¨ªctimas de la campa?a anticorrupci¨®n podr¨ªa ser el actual vicepresidente Li Yuanchao, curiosamente otra de las grandes figuras de la Liga de Juventudes que permanecen en el n¨²cleo de poder chino.