Las FARC se abren al mundo en su ¨²ltima conferencia como grupo armado
La guerrilla inaugura el congreso en el que refrendar¨¢n los acuerdos, un acto p¨²blico de una semana con m¨¢s de 900 periodistas acreditados
La carretera que une Florencia con San Vicente del Cagu¨¢n era una zona guerra hasta que el 20 de julio de 2015 las FARC declararon el cese al fuego unilateral. Cada pocos kil¨®metros, Rufino, taxista en esta regi¨®n del Caquet¨¢, al suroriente de Colombia, recuerda un incidente. ¡°Este puente lo vol¨® la guerrilla para da?ar al Estado y de paso cobrar el paso por el r¨ªo. Aqu¨ª mataron a los Turbay [una familia de pol¨ªticos liberales]. En esa curva explotaron un cami¨®n bomba¡¡±. Desde hace varios d¨ªas, sin embargo, es la ruta de paso de los 900 periodistas que acuden a la X Conferencia de las FARC, la ¨²ltima como grupo armado, inaugurada este s¨¢bado y en la que las bases guerrilleras ratificar¨¢n los acuerdos de La Habana y renunciar¨¢n a las armas para iniciar la transici¨®n a un partido pol¨ªtico.
¡°Hay que conseguir que la paz se convierta en una realidad en nuestro pa¨ªs sobre la base de la justicia social y la democracia, eso implica la vinculaci¨®n de las grandes mayor¨ªas inconformes a la vida pol¨ªtica activa de nuestra naci¨®n¡±, ha asegurado el l¨ªder de las FARC, alias Timochenko, vestido de civil, sin armas, durante el discurso de apertura.
El encuentro se realizar¨¢ hasta el pr¨®ximo d¨ªa 23 en los Llanos del Yar¨ª, a unas seis horas en coche por carretera sin asfaltar desde San Vicente. Para albergar a guerrilleros y visitantes, las FARC, con ayuda civil y el permiso del Gobierno, llevan un mes adecuando la zona con campamentos, cocinas, oficinas y carpas para albergar las conferencias. Por primera vez, la guerrilla abre al mundo su congreso. Han pasado m¨¢s de 50 a?os de guerra y nueve conferencias (sin periodicidad fija) en la clandestinidad.
Timochenko, y todos los miembros del Secretariado, el ¨®rgano de direcci¨®n de la guerrilla, han volado desde Cuba a Colombia en compa?¨ªa de la Cruz Roja Internacional y sin miedo a ser detenidos, despu¨¦s de que el Estado levantase las ¨®rdenes de captura que pesan sobre ellos. El resto de mandos altos y medios que acuden al evento tampoco han tenido problema con los retenes del Ej¨¦rcito que acompa?an al paisaje monta?oso de esta regi¨®n, algo que no suced¨ªa desde 1965, cuando celebraron la primera conferencia.
Lejos quedan aquellos encuentros en los que la guerrilla pas¨® de ser el Bloque Sur a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia. Tampoco hay rastro en las charlas programadas sobre estrategia militar y ubicaci¨®n de frentes. Timochenko apel¨® a la necesidad de dar ¡°un mensaje nuevo, fresco y esperanzador por los cambios¡± e inst¨® a la guerrillerada a la unidad, ¡°sin la cual todo esfuerzo se desperdiga y pierde¡±. La insurgencia quiere recordar su pasado a trav¨¦s de la loa a sus l¨ªderes, sus muertos y a los que considera sus m¨¢rtires, como Sim¨®n Trinidad, encarcelado en Estados Unidos. Est¨¢ previsto que las conferencias p¨²blicas giren en torno al papel de las mujeres, del medio ambiente y culminar¨¢n la X Conferencia con un concierto. Silenciar¨¢n oficialmente sus fusiles en una declaraci¨®n para la historia. Pero no habr¨¢ recuerdos para la sexta y s¨¦ptima conferencia, en los ochenta, cuando decidieron que el secuestro ser¨ªa una forma de financiaci¨®n. Ni para tantas otras decisiones que han sembrado de dolor a todo un pa¨ªs.
¡°Hablen con la gente del Caquet¨¢, les dir¨¢n que van a votar No en el plebiscito¡±, dice Rufino en referencia al ¨²ltimo paso que determinar¨¢ el pr¨®ximo 2 de octubre si el conflicto armado m¨¢s antiguo de Am¨¦rica Latina de verdad llega a su fin. ¡°Y preg¨²ntenles qu¨¦ les parece que quienes secuestraron a sus padres y hermanos tengan curules [esca?os, presencia en el Congreso]¡±, contin¨²a. ¡°Aqu¨ª hay mucho dolor, si nos dicen que ma?ana Uribe es presidente votar¨ªamos por ¨¦l, aunque sabemos que signifique guerra. M¨¢s plomo¡±.
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