California, en v¨ªas de legalizaci¨®n del cannabis
Si la "Proposition 64" se aprueba el pr¨®ximo 8 de noviembre se autorizar¨¢ el consumo recreativo
Si bien es cierto que muchos estadounidenses, hastiados de la campa?a presidencial, cuentan los d¨ªas para las elecciones, otros lo hacen por un motivo muy diferente. En cinco Estados (California, Massachusetts, Maine, Arizona y Nevada), los electores deber¨¢n votar en refer¨¦ndum sobre el uso recreativo del cannabis. Y, en California, al contrario que en 2010, la "proposition 64" tiene todas las papeletas de ganar.
Desert Hot Springs, en el valle de Coachella, no esper¨® para abrirse hueco en este mercado, convirti¨¦ndose en la primera ciudad del Estado en autorizar el cultivo con fines m¨¦dicos en el a?o 2007. Desde entonces, otros Estados han seguido el mismo rumbo, como Colorado o Washington, pero California debe terminar de pulir la ley. "Californa fue el primer Estado en autorizarlo, en 1996, pero ser¨¢ el ¨²ltimo en regularlo", comenta Randall Patten, en su plantaci¨®n con instalaciones de ¨²ltima tecnolog¨ªa, inaugurada a finales de septiembre en las lindes del desierto. "A¨²n hay muchas lagunas, muchas cosas ilegales y poca legalidad ".
Este agricultor, que prev¨¦ cosechar unos 100 kg de marihuana al mes a partir de noviembre, lo que equivaldr¨ªa a 630.000 d¨®lares de producto por una inversi¨®n inicial de 6,5 millones de d¨®lares, explica que sus infraestructuras est¨¢n conformes a la futura ley: trazabilidad de las plantas, empleados asegurados, segmentaci¨®n del transporte para llevar la mercanc¨ªa hasta los dispensarios habilitados para vender hierbas o comestibles, etc. "Pero, aunque hace falta una licencia para vender hay muchos comercios ilegales", recalca. Oficialmente, el consumidor debe disponer de una "recomendaci¨®n" de un m¨¦dico, pero hay tal grado de hipocres¨ªa que es casi imposible no conseguirla. En Venice Beach, en Los ?ngeles, los "green doctors" la proporcionan a quien la solicita.
Y con esta "zona gris" muchos actores del sector se oponen, parad¨®jicamente, a la Proposition 64. Muchos manifiestan sus dudas sobre el incremento de normativas o el miedo a que grandes empresas aparezcan en "Little Morongo", la principal zona de cultivo. "M¨¢s vale un texto mediocre ahora que uno perfecto m¨¢s tarde", responde Jason Elsasser, un agricultor que afirma que este negocio le salv¨® de la quiebra tras la crisis financiera de 2008. "La legalizaci¨®n ha ido bien en Colorado, imaginad las consecuencias que puede tener aqu¨ª: nuestra econom¨ªa es 50 veces m¨¢s importante ".
El alcalde republicano de la ciudad se muestra de acuerdo. "Los habitantes han votado a favor de la legalizaci¨®n del cultivo en un 70 %. Desde entonces los inversores no paran de venir", se alegra Scott Matas. "Y la Proposition 64 nos abrir¨¢ una fuente de ingresos adicional". El precio de los terrenos industriales se ha multiplicado por 3 y 4 desde 2013 y los impuestos generados deber¨ªan alcanzar el mill¨®n de d¨®lares el pr¨®ximo a?o fiscal. A este ritmo, "el Estado Dorado" podr¨¢ cambiarse el nombre por "el Estado Verde".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.