Merkel entra en campa?a con un discurso m¨¢s duro en inmigraci¨®n

El sentir mayoritario de las bases qued¨® claro en un momento del congreso. La l¨ªder hablaba de sus temas habituales ¨Cretos de la era digital, defensa del acuerdo migratorio con Turqu¨ªa, cuentas del Estado equilibradas¡­¡ª. Entre los delegados se o¨ªa de vez en cuando unos t¨ªmidos y rutinarios aplausos. De repente, pronunci¨® una frase m¨¢gica: ¡°Aqu¨ª hay que mostrar la cara. El velo integral ha de estar prohibido donde sea posible¡±. El pabell¨®n estall¨® en la que probablemente fuera la mayor ovaci¨®n del d¨ªa. Hace solo tres meses, Merkel defend¨ªa que el uso del burka y del niqab forma parte de la libertad religiosa, un bien consagrado en la Constituci¨®n alemana.

Para vencer las reticencias de los cr¨ªticos, la direcci¨®n de la CDU elev¨® el tono en el documento sometido a votaci¨®n. As¨ª, una propuesta de ¨²ltima hora endurece las condiciones para deportar a solicitantes de asilo no aceptados. "El n¨²mero de devoluciones va a aumentar significativamente en los pr¨®ximos meses", avisa el texto. Tambi¨¦n se alaba el cierre de la ruta de los Balcanes, una decisi¨®n en su momento muy criticada por Merkel. Y hacen un gui?o a las familias al descartar categ¨®ricamente subidas de impuestos para la pr¨®xima legislatura.

¡°Necesito vuestra ayuda¡±, dijo Merkel a los 1.001 delegados. Y estos respondieron con una penalizaci¨®n menor de la esperada. Estaba claro que Merkel no iba a renovar el 96,7% que obtuvo hace dos a?os, cuando la ola de refugiados no hab¨ªa llegado y ella flotaba en su culmen de popularidad. Pero s¨ª pod¨ªa recibir un serio aviso. El lunes, en el tradicional encuentro con periodistas previo al congreso, un importante ministro aseguraba que esperaba un porcentaje ligeramente por encima del 80%. El resultado es el segundo peor en sus 16 a?os como l¨ªder de la CDU, pero sin embargo es bastante aceptable. A los democristianos, a diferencia de los socialdem¨®cratas, no les gusta exhibir sus diferencias en p¨²blico.?

Frente a unos socialdem¨®cratas que dudan entre Sigmar Gabriel o Martin Schulz como candidato, Merkel es reelegida con porcentajes de reminiscencias sovi¨¦ticas. Varios delegados consultados aseguraban que, si algunos ten¨ªan dudas, se hab¨ªan convencido tras el discurso de su l¨ªder. ¡°Tuvo la mezcla justa de realismo y de emoci¨®n¡±, comentaba un militante de Renania-Palatinado.

El apoyo a Merkel del 90% no significa que en la CDU reine el entusiasmo. Como mucho, un convencimiento racional de que nadie puede sustituir a la jefa con seguridad de ¨¦xito. Pero los democristianos, que presumen de representar al centro de la sociedad, tienen problemas a la vista. En un pa¨ªs tan descentralizado como Alemania, solo participan en el Gobierno de seis de los 16 Estados federados. Los Verdes, en cambio, gobiernan en 11 l?nder.

El gran argumento con el que ir¨¢n a las elecciones federales de septiembre de 2017 ser¨¢, por un lado, evitar una coalici¨®n de partidos izquierdistas en el Gobierno, y por otro, a los extremistas de derechas de Alternativa para Alemania (AfD). Merkel se presenta as¨ª como el ¨²nico ant¨ªdoto contra radicalismos. Frente a los problemas que amenazan al mundo ¡ª"2016 no trajo m¨¢s calma y estabilidad. Al contrario", dijo-, Merkel quiere ser el ancla de estabilidad que Alemania necesita. Si logra la reelecci¨®n y permanece toda la legislatura, habr¨¢ gobernado 16 a?os, igualando el r¨¦cord de su mentor, Helmut Kohl.