Adviento de terror en Oriente Pr¨®ximo

La alerta lanzada la semana pasada por el MI6 sobre la amenaza de inminentes ataques del Estado Isl¨¢mico en Reino Unido y otros pa¨ªses occidentales parec¨ªa una advertencia m¨¢s de la inteligencia exterior brit¨¢nica para que los servicios de seguridad no bajen la guardia en v¨ªsperas de Navidad. El jefe del contraespionaje, Alex Younger, acababa de desvelar que contaba con agentes infiltrados en el entorno del ISIS. Qui¨¦n sabe si solo para hurgar con la revelaci¨®n en la herida del desmoronamiento de las filas yihadistas en el frente iraqu¨ª de Mosul ¡ªo en el que se cierne sobre Raqa, capital siria del califato¡ª o para echarse un farol de pel¨ªcula de James Bond.

Lo cierto es que dos grandes ataques terroristas se han sucedido en pocas horas en las dos mayores metr¨®polis del Mediterr¨¢neo oriental, mientras las milicias del Estado Isl¨¢mico despertaban de su letargo en Siria con una ofensiva a gran escala contra la emblem¨¢tica Palmira. Grup¨²sculos de la nebulosa kurda y del islamismo radical se han apresurado a atribuirse los atentados de Estambul, la noche del s¨¢bado, y de El Cairo, en la ma?ana de ayer. Ambas series de deflagraciones de veh¨ªculos cargados con explosivos bien pueden llevar el sello del ISIS, que est¨¢ recurriendo a los coches bomba como arma de guerra en Mosul, e incluso junto a las bimilenarias ruinas grecorromanas de Palmira.

Ambas acciones siembran adem¨¢s el terror en las macrourbes m¨¢s vibrantes y plurales de Turqu¨ªa y Egipto, de los gigantes demogr¨¢ficos del islam sun¨ª. Dos Estados a¨²n no fallidos, aunque golpeados por la inestabilidad pol¨ªtica (el paso marcado por golpes o asonadas castrenses) y la incertidumbre econ¨®mica (la lira y la libra en ca¨ªda libre). Los atentados se han producido en escenarios demoniacos para la visi¨®n del mundo del yihadismo: los alrededores de un estadio de f¨²tbol y de una catedral cristiana de Oriente Pr¨®ximo.

Ahora que el Pent¨¢gono acaba de contabilizar 50.000 muertos en las filas del Estado Isl¨¢mico desde 2014, el ISIS ha vuelto a mover sus piezas en el tablero del conflicto de Siria. El anuncio tambi¨¦n coincide con el despliegue de 200 militares estadounidenses como asesores de las Fuerzas Democr¨¢ticas Sirias, coalici¨®n rebelde encabezada por las milicias kurdas que debe actuar como punta de lanza en el frente nororiental de Raqa.

A escasos kil¨®metros de Alepo, los yihadistas han asistido impasibles a la batalla final del r¨¦gimen de Bachar el Asad para desalojar a los insurgentes de su mayor feudo urbano. La inesperada incursi¨®n del ISIS sobre Palmira parece querer demostrar que, a pesar de las masivas campa?as de bombardeos a¨¦reos que han machacado sus bases desde hace dos a?os, el Estado Isl¨¢mico sigue siendo una fuerza militar temible y letal, capaz de golpear sin previo aviso la retaguardia de sus enemigos. Como advert¨ªa el jefe del MI6, antes incluso de verse forzado a abandonar sus bastiones en Irak y Siria, el terror yihadista amenaza con desbordarse hacia el exterior en tiempo de Adviento.