El voto ¡®antiestablishment¡¯ corona a Wall Street
Nunca el ¡®hombre de Davos¡¯ hab¨ªa llegado tan lejos dentro de los estamentos pol¨ªticos
En Estados Unidos el t¨¦rmino hillbilly se utiliza ¡ªcasi siempre de forma despectiva¡ª para designar a los habitantes blancos rurales de la regi¨®n monta?osa, minera e industrial, del este del pa¨ªs. Unas zonas que apoyaron de forma mayoritaria a Donald Trump en las pasadas elecciones presidenciales y a las que prometi¨® devolverles la prosperidad y el empleo de un esplendor que hace tiempo qued¨® atr¨¢s. Ning¨²n hillbilly formar¨¢ parte del nuevo Gobierno de Trump.
La designaci¨®n de Rex Tillerson, hasta ahora presidente de Exxon Mobil, la mayor petrolera del mundo, como futuro secretario de Estado culmina la mayor toma de posiciones de las grandes corporaciones sobre la pol¨ªtica econ¨®mica de la primera potencia mundial. Tillerson se suma a la designaci¨®n del n¨²mero dos de Goldman Sachs, Gary Cohn, como director del Consejo Econ¨®mico Nacional, el principal asesor econ¨®mico de la Casa Blanca y un puesto tradicionalmente destinado a dise?ar las grandes reformas del sistema tributario o del financiero impulsadas por los distintos presidentes. La nominaci¨®n de Cohn hace m¨¢s improbables los habituales choques entre el Consejo Econ¨®mico y el secretario del Tesoro. Steve Mnuchin, que ha sido elegido para ocupar este cargo, pas¨® 17 a?os de su carrera en el gigante bancario.
Trump ha creado, adem¨¢s, un foro de estrategia y pol¨ªtica para asesorarle en su empe?o de hacer ¡°Am¨¦rica grande de nuevo¡±. Al frente de este nuevo foro estar¨¢ Stephen A. Schwarzman, presidente de Blackstone, el mayor fondo de inversi¨®n del mundo, y junto a ¨¦l los m¨¢ximos responsables del establishment financiero, como JPMorgan y BlackRock; y empresarial, con General Motors, IBM, Boeing o Wal-Mart, entre otros.
Nunca el hombre de Davos hab¨ªa llegado tan lejos dentro de los estamentos pol¨ªticos. Los habituales de la reuni¨®n anual de la estaci¨®n de esqu¨ª suiza se han trasladado, casi literalmente, al jard¨ªn de la Casa Blanca. La edici¨®n del pr¨®ximo mes de enero va a verse notablemente mermada. El candidato antiestablishment ha entregado el gobierno econ¨®mico a sus m¨¢ximos representantes.
Trump sali¨® elegido con el voto de los blancos de zonas rurales. Ninguno formar¨¢ parte de su Gobierno
Junto a sus abultadas carteras, todos ellos tienen otro rasgo en com¨²n: carecen de experiencia de Gobierno, lo cual a?ade m¨¢s incertidumbre a la que ya de por s¨ª provoca un presidente electo que presume de ser imprevisible.
¡°A los mercados puede que no les guste la incertidumbre, pero claramente est¨¢n aprendiendo a vivir con ella¡±, trataba de explicar en un reciente informe el Instituto de Finanzas Internacionales, el mayor lobby mundial de la banca privada. Contra sus advertencias tradicionales, las Bolsas han celebrado este radical giro pol¨ªtico con fuertes subidas y nuevos m¨¢ximos. Pero del amor al odio, tambi¨¦n en los mercados, apenas hay un paso.
En una reciente reuni¨®n en Madrid fuentes financieras internacionales apuntaban: ¡°Estamos a un tuit de la cat¨¢strofe¡±. Atentos a sus redes.
?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.