En 2017, por m¨¢s democracia y m¨¢s derechos

La defensa de principios y valores fundamentales hace que la incertidumbre nunca puede ser un signo de los tiempos para la OEA, debemos saber en toda coyuntura pol¨ªtica, econ¨®mica y social lo que debemos hacer.

Nuestras declaraciones, Convenciones, la Carta Democr¨¢tica, est¨¢n construidas para generar sociedades m¨¢s justas, y sistemas pol¨ªticos m¨¢s funcionales, con una l¨®gica que se apoya en los derechos de la gente.

No podemos dudar respecto a qu¨¦ debemos hacer porque de nuestra acci¨®n depende: elegir a quienes nos gobiernan, hacerlos responsables por sus inconductas y dar marco a un gobierno del pueblo para el pueblo. Y la sola racionalidad de los Gobiernos es asegurar la felicidad y libertad del pueblo.

Estos principios que son el fundamento mismo de la obra "Derechos del Hombre" de 1791, a¨²n hoy, no son conquistas definitivas, a¨²n hoy debemos luchar contra la incertidumbre, esa sensaci¨®n de que es poco lo que se puede controlar y que las circunstancias mandan, y lamentablemente es as¨ª como comienzan todos los presagios de c¨®mo ser¨¢ el 2017.

Y si bien es cierto que estamos viviendo tiempos de incertidumbres econ¨®micas, tecnol¨®gicas, sociales y pol¨ªticas, no es menos cierto que el futuro se construye con nuestra acci¨®n.

Por eso, para m¨ª, 2017 ser¨¢ un a?o clave en la vigencia de los principios democr¨¢ticos que hacen de las Am¨¦ricas un continente de paz, donde la democracia es nuestro estilo de vida, donde los derechos de la gente deben estar siempre primero. No podemos permitir que la discriminaci¨®n prevalezca, en ning¨²n sentido. No podemos permitir que ning¨²n discurso de odio se instale en nuestras sociedades como patr¨®n de conducta. Ning¨²n derecho puede quedar por el camino a la hora de construir el bienestar del pueblo.

Eso vale para cada mujer en nuestro continente, que puede confiar en que tiene en la OEA la herramienta esencial para asegurar sus derechos y conquistar nuevos, los fundamentales, los que las rescaten de los patrones de pobreza estructural y violencia, de la muerte por no acceder a derechos de salud, de su marginalizaci¨®n de los sistemas educativos.

Y ello vale para los pobres cuyos derechos son conculcados cuando luchan contra las causas de su pobreza. Vale para la comunidad LGTBIQ, v¨ªctima de violencia y estigmatizaci¨®n. Para cada ind¨ªgena, cada afrodescendiente, cada mestizo y mulato empujado hacia la periferia de los derechos cuando deben ser el centro mismo de cualquier pol¨ªtica de soluciones sociales.

Vale para cada migrante que tenga sus derechos cuestionados, como si pudiera haber un sistema de castas ciudadanas a la hora del ejercicio de los derechos. Todos deben ser el centro de nuestra atenci¨®n y nuestro trabajo. Los principales ant¨ªdotos contra estos venenos son democracia, democratizaci¨®n y estado de derecho.

Cuando las sociedades sienten que se encuentran en un punto de inflexi¨®n, en parte producto de los cambios pol¨ªticos que se han venido operando, donde las tendencias anti-globalizaci¨®n han ganado espacio y se plantean reacomodar la ecuaci¨®n internacional a nuevas visiones de inter¨¦s nacional y general, la OEA deber¨¢ ser un eje de afirmaci¨®n de los principios y valores democr¨¢ticos esenciales, que todos los pa¨ªses han acordado y que deben estar vigentes d¨ªa a d¨ªa.

Tolerancia Cero a la corrupci¨®n y castigo a los culpables, defensa y promoci¨®n de los derechos humanos, defensa y fiscalizaci¨®n de que la democracia realmente funcione y no sea una fachada para un ejercicio infame del poder. Por ello, bregamos por elecciones libres y con derechos para todos, la independencia de los poderes del Estado, la m¨¢s irrestricta libertad de expresi¨®n y prensa.

El pluralismo de ideas y el respeto a la disidencia son valores a los que no podemos renunciar, por el contrario son los valores que nos hacen diferentes frente al mundo, son los valores que nos caracterizan como americanos, seamos del Sur, del Norte, del Centro o del Caribe. Cualquiera que los corrompa es enemigo de la democracia y no podemos permitir que el silencio se transforme en c¨®mplice de malas pr¨¢cticas.

La democracia es el instrumento esencial para el desarrollo de nuestros pa¨ªses, ejemplos recientes nos muestran c¨®mo el debilitamiento de las instituciones, la falta de sujeci¨®n al estado de derecho, el desconocimiento de poderes del Estado, la cooptaci¨®n de la justicia, el deterioro de los derechos civiles y pol¨ªticos tienen una incidencia absoluta en el bienestar y la seguridad de los pueblos.

Los remedios est¨¢n todos en nuestra Carta Democr¨¢tica Interamericana, aquello que debemos cumplir y respetar para que 2017 sea un a?o de reafirmaci¨®n de derechos y principios en las Am¨¦ricas. Un camino que debemos recorrer todos juntos, un futuro que debemos construir entre todos.

Todos pueden estar seguros que, si algunos se cansan, la OEA continuara sin tregua; si algunos abandonan esta lucha, la OEA la seguir¨¢; y si algunos callan, la OEA alzar¨¢ a¨²n m¨¢s su voz.

Luis Almagro es el Secretario General de la Organizacion de Estados Americanos (OEA). Twitter: @Almagro_OEA2015