El Gobierno de la Ciudad de M¨¦xico: ¡°Tenemos el control de las c¨¢rceles¡±
¡°Como un baldazo de agua fr¨ªa¡±. Esa fue la sensaci¨®n que tuvo Patricia Mercado, secretaria de Gobierno de la Ciudad de M¨¦xico, al ver los v¨ªdeos grabados al interior del Reclusorio Norte. Las im¨¢genes, a las que EL PA?S tuvo acceso, muestran que la venta de drogas y la extorsi¨®n telef¨®nica son actividades cotidianas en esta prisi¨®n de 8.715 reclusos. ¡°Es una actuaci¨®n muy c¨ªnica esta colusi¨®n de los internos con los custodios¡±.
A pesar de las im¨¢genes, Mercado dice sin dudar: ¡°Tenemos el control de las c¨¢rceles¡±. La secretaria del Gobierno de Miguel ?ngel Mancera reconoce los problemas de corrupci¨®n pero afirma con contundencia que en el Reclusorio Norte no operan c¨¢rteles del narcotr¨¢fico. ¡°Es un mercado de drogas para uso personal. Se ve muy poca coca¨ªna porque la gran mayor¨ªa de internos no tiene dinero¡±, se?ala.
En 2016, las autoridades decomisaron 270 gramos de coca¨ªna en esa prisi¨®n. En cambio, arrebataron a los internos 14.5 kilos de marihuana y 147 litros de inhalantes. Estas drogas son las preferidas de una paup¨¦rrima poblaci¨®n compuesta en un 70% por personas sentenciadas por robo.
Mercado cree que se podr¨¢ impedir la entrada de droga al Reclusorio Norte reduciendo los d¨ªas de visita. La prisi¨®n permite cuatro d¨ªas a la semana la entrada de familiares. ¡°Es mucho, es un problema estructural¡±, admite la secretaria de Gobierno. La funcionaria asegura que las mujeres de la visita introducen insertadas en la vagina botellas de solvente o paquetes de marihuana envueltos en cinta de embalar. ¡°Es un tr¨¢fico a cuentagotas¡ No podemos hacer un cateo a fondo porque es una violaci¨®n a los derechos humanos¡±.
Los v¨ªdeos han dejado claro el fracaso del Gobierno de la capital en el combate contra la extorsi¨®n telef¨®nica. En los pasillos de los dormitorios de la prisi¨®n varios hombres sentados dan la cara a los barrotes. Sobre ellos se recargan los tel¨¦fonos m¨®viles, algunos de ellos conectados a la corriente el¨¦ctrica.
Es un mercado de drogas para uso personal. Se ve muy poca coca¨ªna porque la gran mayor¨ªa de internos no tiene dinero
Patricia Mercado, secretaria de Gobierno CDMX
Los internos discuten las dos formas de extorsi¨®n. A una la llaman La t¨ªa y se trata de un fraude con el que engatusan al escucha asegur¨¢ndole haber ganado un premio que obtendr¨¢ a cambio de una remuneraci¨®n. El otro es conocido como El Chill¨®n y hace creer a la v¨ªctima que alg¨²n familiar ha sido secuestrado porque del otro lado de la bocina escucha gritos y s¨²plicas de auxilio. En las im¨¢genes se puede observar a presos consultando libretas para leer diferentes argumentos de estos enga?os.
Los v¨ªdeos han obligado a las autoridades a actuar en la prisi¨®n, que tiene una sobrepoblaci¨®n de 60%. La noche del mi¨¦rcoles se llev¨® a cabo un nuevo barrido de los dormitorios, pero los polic¨ªas solo hallaron cinco tel¨¦fonos m¨®viles, adem¨¢s de pilas y cables de aud¨ªfonos.
Seis reclusos filmados mientras extorsionaban fueron trasladados a otras prisiones de la Ciudad de M¨¦xico. Las autoridades han emprendido una batalla legal para reubicar a otro interno. Tras el esc¨¢ndalo, el Gobierno se ha dado cuenta de que este prisionero cuenta con un amparo que le impide ser trasladado. Mercado afirma que han iniciado las gestiones ante un juez federal para que deje sin efecto la protecci¨®n. Los custodios, el director y el subdirector del Reclusorio Norte ya han declarado ante la Fiscal¨ªa que investiga a los servidores p¨²blicos.
¡°Nos hacemos responsables de estas fallas¡±, dice Mercado. El lunes, el Gobierno de la Ciudad de M¨¦xico se reunir¨¢ con integrantes del Sistema Nacional de Seguridad P¨²blica, una instituci¨®n del Gobierno Federal responsable del control de los inhibidores de frecuencias, para saber por qu¨¦ no se est¨¢n bloqueando las llamadas salientes desde la prisi¨®n.
En 2011 el 80% de las extorsiones en la Ciudad de M¨¦xico sal¨ªan de las c¨¢rceles. Un a?o despu¨¦s, el Gobierno capitalino invirti¨® 25 millones de pesos en aparatos para bloquear las llamadas. Sin embargo, estos afectaron tambi¨¦n los m¨®viles de alrededor de las prisiones, lo que hizo que las compa?¨ªas telef¨®nicas se quejaran. El Gobierno se vio obligado a demandar a la empresa Software DSI para que se hiciera responsable por las fallas. El Gobierno perdi¨® la batalla en los tribunales.
Patricia Mercado afirma que las autoridades penitenciarias de la capital ya se encuentran planeando hacerse cargo de los inhibidores de se?al y de instalar c¨¢maras en el Reclusorio Norte.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.