El Parlamento turco aprueba la reforma constitucional que reforzar¨¢ a Erdogan
La ciudadan¨ªa decidir¨¢, en refer¨¦ndum en abril, si se convierte en un r¨¦gimen presidencialista
Las bancadas islamista y ultranacionalista del Parlamento turco han logrado sacar adelante la modificaci¨®n de la Constituci¨®n que convertir¨¢ a Turqu¨ªa en un r¨¦gimen presidencialista, si el electorado suscribe la reforma en un refer¨¦ndum la pr¨®xima primavera. En su segunda y definitiva votaci¨®n, que concluy¨® durante la madrugada del s¨¢bado, el texto presentado por el partido gobernante AKP a instancia del presidente Recep Tayyip Erdogan obtuvo el voto favorable de 339 de los 550 diputados con que cuenta el hemiciclo turco, nueve m¨¢s de los necesarios para que la propuesta prosperara y sea sometida a una consulta popular que, seg¨²n anunci¨® el portavoz del Ejecutivo, Numan Kurtulmus, tendr¨¢ lugar el primer o el segundo domingo de abril.
¡°El Parlamento ha dado la respuesta necesaria, pero ahora la verdadera y definitiva decisi¨®n la tomar¨¢ el pueblo. Con ello, Turqu¨ªa despegar¨¢ de nuevo¡±, dijo el presidente Erdogan en la ma?ana del s¨¢bado tras conocer la decisi¨®n. La modificaci¨®n de la Carta Magna significar¨¢ transformar la actual Presidencia de la Rep¨²blica que, ahora, legalmente, tiene un cometido poco m¨¢s que simb¨®lico, en jefatura no solo de Estado, sino tambi¨¦n de Gobierno, con lo que se eliminar¨¢ el puesto de primer ministro. El presidente adem¨¢s nombrar¨¢ a su consejo de ministros y se ampliar¨¢n los supuestos en los que podr¨¢ gobernar por decreto y en los que se podr¨¢ declarar el estado de emergencia. De esta forma, sostienen los islamistas del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), el pa¨ªs ganar¨¢ estabilidad. Habr¨¢ ¡°un solo poder que ser¨¢ fuerte¡± y ¡°no habr¨¢ debilidades a la hora de luchar contra el terrorismo o atajar cuestiones econ¨®micas¡±, dijo el primer ministro, Binali Yildirim.
¡°El Gobierno turco cita la presidencia de Estados Unidos como modelo de sus cambios. Pero la Constituci¨®n de EEUU limita el poder del presidente a trav¨¦s del (poder) legislativo y judicial, lo que no es el caso en los cambios constitucionales propuestos por Turqu¨ªa¡±, se quej¨® la organizaci¨®n proderechos humanos Human Rights Watch en un comunicado. La oposici¨®n turca, de hecho, ha denunciado que el nuevo sistema debilitar¨¢ las competencias del Parlamento como supervisor de la labor de gobierno e incrementar¨¢ la proporci¨®n de miembros de los principales tribunales y ¨®rganos rectores del aparato judicial que ser¨¢n elegidos por el presidente y el partido gobernante.
El l¨ªder de la oposici¨®n socialdem¨®crata, Kemal Kili?daroglu, denunci¨® adem¨¢s las presiones sufridas por los diputados oficialistas, quienes, pese a ser la votaci¨®n parlamentaria secreta, mostraron sus papeletas siguiendo las ¨®rdenes de la c¨²pula del AKP para evitar la disidencia interna. ¡°Si todos los diputados hubiesen votado libremente y de acuerdo con su conciencia, la reforma no habr¨ªa sido aprobada¡±, afirm¨® Kili?daroglu, quien anunci¨® que denunciar¨¢ la reforma ante el Tribunal Constitucional e iniciar¨¢ una campa?a a favor del no en el refer¨¦ndum: ¡°Nos dirigiremos a todos, a los dem¨®cratas, a los religiosos, a todo aquel que ame a su patria¡±.
Por su parte, el presidente de la Uni¨®n de Colegios de Abogados de Turqu¨ªa, Metin Feyzioglu, compar¨® el nuevo sistema de concentraci¨®n de poder en manos de una sola persona con el ¡°sultanato¡± vivido en la ¨¦poca otomana y afirm¨® que, al contrario de lo que defiende el Gobierno, se trata de un ¡°proyecto de inestabilidad permanente¡±. ¡°?C¨®mo puede ser estable un estado que divide a su pueblo?¡±, se pregunt¨® Feyzioglu.
De las divisiones que provoca la reforma da cuenta el tumultuoso y agitado debate en el parlamento. Si en la primera ronda de votaciones fueron los diputados quienes, en un lamentable espect¨¢culo se enfrentaron a pu?etazos, volaron las macetas del hemiciclo y un parlamentario oficialista denunci¨® haber sido mordido en la pierna por uno opositor, en la segunda y definitiva ronda de votaciones les toc¨® el turno a ellas. Cuando la diputada independiente Aylin Nazliaka se espos¨® al atril para protestar contra la reforma, las diputadas islamistas se lanzaron hacia ella para apartarla del estrado; las kurdas salieron en defensa de Nazliaka y se arm¨® la marimorena: tres parlamentarias ¨Ccada una de un partido diferente- hubieron de ser atendidas en el hospital.
Ante el refer¨¦ndum, Erdogan parece tenerlo f¨¢cil teniendo en cuenta que en las ¨²ltimas elecciones, el AKP cosech¨® el 49,5 % de los votos y que, desde el fallido intento de golpe de estado del pasado julio, los sondeos le dan un apoyo incluso mayor. Adem¨¢s, controla buena parte del flujo de informaci¨®n que llega diariamente a los turcos pues la inmensa mayor¨ªa de los medios de comunicaci¨®n del pa¨ªs se muestran d¨®ciles con las ¨®rdenes del Ejecutivo. La c¨²pula de la formaci¨®n ultranacionalista MHP, que obtuvo casi el 12 % de los sufragios en 2015, tambi¨¦n apostar¨¢ por el S¨ª, pero algunos miembros del partido ya han anunciado su postura contraria y que movilizar¨¢n a las bases a favor del No.
La oposici¨®n se queja adem¨¢s de que la campa?a electoral tendr¨¢ lugar en medio del estado de emergencia, vigente desde la asonada militar y que ha sido utilizado para prohibir actos y m¨ªtines de protesta. ¡°Resulta imposible que, durante un estado de emergencia, se lleve a cabo un debate p¨²blica efectivo en los medios sobre los cambios que se van a producir¡±, critic¨® la directora de HRW en Turqu¨ªa, Emma Sinclair-Webb, en declaraciones a AFP.
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