Juan Fernando Cristo: ¡°El gran desaf¨ªo del posconflicto en Colombia es tener unas ciudades seguras¡±

Juan Fernando Cristo (C¨²cuta, 1964) se ha convertido en uno de los apagafuegos del segundo Gobierno del presidente colombiano Juan Manuel Santos. El ministro del Interior ha mediado en las crisis fronterizas con Venezuela, form¨® parte del equipo que termin¨® de cerrar el proceso de paz con las FARC y el que negoci¨® con los promotores del ¡®no¡¯ a las negociaciones un nuevo acuerdo tras el rechazo en el plebiscito.

En su etapa final al frente del Ministerio, antes de lanzarse presumiblemente a la carrera presidencial de 2018, algo que trata entre risas durante la entrevista, tendr¨¢ que garantizar que las leyes pactadas durante casi cuatro a?os en La Habana se aprueben en el Congreso para que la implementaci¨®n sea real. Al mismo tiempo que combate sobre el terreno a las bandas criminales que pugnan por controlar los territorios que la guerrilla abandone.

Pregunta. ?C¨®mo van a actuar frente a los que dominan las zonas rurales, los herederos del paramilitarismo u organizaciones como el Clan ?suga?

Respuesta. Hay una estrategia conjunta del Ministerio de Defensa y la Polic¨ªa para atacar especialmente en las zonas de miner¨ªa ilegal donde se concentran. Estamos en la tarea de garantizar que cuando las FARC salgan de estas regiones, entre el Estado. A estas bandas se les dan golpes muy duros, pero tienen gran habilidad de reciclaje permanente.

P. Con el final de la guerra con las FARC, ?podr¨ªa producirse una cartelizaci¨®n en Colombia?

R. La ¨¦poca de los c¨¢rteles de la droga en Colombia est¨¢ muy superada. Hay que combatir peque?os grupos criminales que est¨¢n muy generalizados y controlan ciertas rutas del narcotr¨¢fico. Esperamos que con los procesos de sustituci¨®n de cultivos en colaboraci¨®n con las FARC se reduzca la oferta de coca y, por tanto, la violencia.

P. ?Qu¨¦ son estos grupos armados que, entre otras cuestiones, est¨¢n asesinando de manera sistem¨¢tica a l¨ªderes sociales?

R. Nos preocupan enormemente esos asesinatos. La Unidad Nacional de Protecci¨®n prepara un programa especial al margen del que est¨¢ previsto en los acuerdos para proteger a las FARC. Lo peor que puede pasar es la impunidad, si los autores de estos asesinatos no ven que se sancionan estos cr¨ªmenes, no habr¨¢ esquema de protecci¨®n que alcance. Es una prioridad porque somos conscientes de que en la implementaci¨®n no se pueden permitir estas situaciones.

P. Si no es paramilitarismo, ?qu¨¦ es?

R. Bandas criminales. No vamos a caer en esa disputa del lenguaje.

P. Adem¨¢s de la seguridad, para el posconflicto ser¨¢n determinantes una serie de leyes que ya se debaten en el Congreso, ?conf¨ªa en que se vayan a cumplir los plazos y en seis meses est¨¦n aprobadas?

R. La ley de Amnist¨ªa se aprob¨® en tiempo r¨¦cord. Ya se debate el proyecto de la Justicia Especial. Hay mayor¨ªas en el Congreso apoyando al Gobierno. Vemos con optimismo la aprobaci¨®n del paquete de reformas m¨¢s ambicioso planteado en Colombia desde la Constituci¨®n del 91. En mayo queremos haber evacuado las iniciativas. Si no, hay una pr¨®rroga de seis meses m¨¢s. Antes de terminar el a?o se van a aprobar.

P. 2016 cerr¨® con el menor ¨ªndice de homicidios de la historia reciente de Colombia debido al final de la guerra con las FARC. No sucede lo mismo con los hurtos. ?Qu¨¦ estrategia plantean ante este tipo de delincuencia?

R. Acabamos de aprobar un nuevo c¨®digo de polic¨ªa y una ley de procedimientos abreviados para que se reduzca la duraci¨®n de los juicios de los delitos menores. Cuando termine el desarme de las FARC y comience el del ELN mucha polic¨ªa tendr¨¢ que reorientar sus tareas. Volver¨¢n a los cascos urbanos a proteger a los ciudadanos. El gran desaf¨ªo del posconflicto es tener unas ciudades seguras.

P. ?Por qu¨¦ han decidido usar c¨¢maras de seguridad para hacer las ciudades m¨¢s seguras?

R. Hace un par de a?os se identific¨® que el 82% de los delitos que afectan la seguridad de los ciudadanos (robo de celulares, microtr¨¢fico, hurto de veh¨ªculos o de casas) se concentraba en 12 capitales del pa¨ªs. Las c¨¢maras son un instrumento ¨²til para prevenir el crimen, perseguir al delincuento y judicializar.

P. ?Qu¨¦ efectividad tiene este sistema?, ?cu¨¢nto tarda la polic¨ªa en actuar?

R. En Medell¨ªn o Cali, donde ya funcionan plenamente, el tiempo es corto, pero no tenemos un promedio. En Bogot¨¢ hay muy baja cobertura de c¨¢maras, tiene que ser una de las prioridades este a?o.

P. Adem¨¢s de las c¨¢maras, ?se va a incrementar el n¨²mero de efectivos o se van a plantear otro tipo de iniciativas?

R. Tenemos que lograr que la tecnolog¨ªa, la buena movilidad y las buenas comunicaciones reemplacen ese modelo que tiene en la mente desde hace muchos a?os el ciudadano colombiano de que solo con m¨¢s polic¨ªa puede sentirse m¨¢s seguro.

P. ?Le preocupa que el pr¨®ximo Gobierno modifique las leyes del posconflicto?, ?que se d¨¦ marcha atr¨¢s?

R. Este proceso nos va a llevar a una desmovilizaci¨®n hist¨®rica y a una serie de transformaciones pol¨ªticas, econ¨®micas y sociales muy positivas. Cuando est¨¦ acabado a finales de a?o no habr¨¢ fuerza pol¨ªtica que le plantee al pa¨ªs que lo va a reversar.

P.?Entonces, ?no cree que vaya a ser un tema electoral en 2018?

R.?Hace un a?o era una expectativa, en un a?o ser¨¢ una realidad: las FARC habr¨¢n desaparecido como movimiento armado en Colombia. Nadie va a querer cambiar esa situaci¨®n. Pretender que el proceso de paz est¨¦ ajeno a la campa?a es una ilusi¨®n. Es el gran desaf¨ªo del Gobierno.

P. Al mismo tiempo se estar¨¢ desarrollando el proceso de paz con el ELN, ?qu¨¦ expectativas tiene teniendo en cuenta los problemas que ha habido solo para elegir una fecha para el inicio de la fase p¨²blica?

R.?Hay que ser moderadamente optimistas. El Gobierno no puede desconocer las dificultades de estos meses previos. Esperamos que se pueda avanzar en un acuerdo este a?o, y si no es definitivo, por lo menos conseguir un desescalamiento del conflicto.

P.?Otra negociaci¨®n en la que se ha involucrado han sido los cierres de la frontera con Venezuela. ?Por qu¨¦ el Gobierno de Colombia se ha mostrado tan tibio a las decisiones unilaterales del presidente Maduro?

R.?El Gobierno ha reaccionado en la lucha contra el contrabando de gasolina y las bandas criminales. En su momento se pidi¨® respeto a Venezuela por el uso del lenguaje al referirse a los ciudadanos de esa regi¨®n. Es una situaci¨®n que depende mucho de c¨®mo se solucione la realidad venezolana. A veces en la frontera piden dureza y cuando se responde te vuelven a decir: ¡°B¨¢jenle porque llegan nuevos inconvenientes¡±. Hoy la integraci¨®n fronteriza, lamentablemente, no existe.

P.??Va a presentar su candidatura a la presidencia de 2018?

R.?Estoy concentrado en las responsabilidades del ministerio: liderar la implementaci¨®n, la comisi¨®n de negociaci¨®n con el ELN y acompa?ar los dispositivos para mejorar la seguridad en el pa¨ªs. No he tenido tiempo para pensar en decisiones pol¨ªticas.

P. ?Ha tenido tiempo para pensar en otros posibles candidatos como Humberto de la Calle, que tambi¨¦n es de su partido [el liberal]?

R. Me tienen prohibida la intervenci¨®n en pol¨ªtica.