La unidad mexicana busca l¨ªder

Los pol¨ªticos comenzaron a invocar una unidad nacional que ha tenido recientes muestras espont¨¢neas. Algunos mexicanos eligieron banderas como imagen de sus perfiles de redes sociales. Decenas de miles de voces entonaron Cielito Lindo en la final de la Serie del Caribe de b¨¦isbol, donde M¨¦xico perdi¨® contra Puerto Rico.

Pe?a Nieto apel¨® a la unidad desde las elecciones de noviembre en Estados Unidos, pero intensific¨® su llamado en 2017. Primero en su mensaje de a?o nuevo y de forma m¨¢s asidua desde el 20 de enero, cuando Trump lleg¨® a la Casa Blanca. Este s¨¢bado, el presidente dijo: ¡°M¨¦xico exige de nosotros unidad. Unidad no alrededor de una persona o un Gobierno, si no unidad en torno a los valores de la Constituci¨®n¡­: soberan¨ªa, libertad y justicia, democracia e igualdad¡±.

El presidente cuenta con una baja aprobaci¨®n, que var¨ªa entre el 12% y el 19%. Su Gobierno no ha podido reducir la violencia en el pa¨ªs. Las reformas econ¨®micas impulsadas no han dado los frutos prometidos y su mandato ha sido salpicado por esc¨¢ndalos de corrupci¨®n de gobernadores del PRI. Las agresiones de Trump han hecho que la opini¨®n p¨²blica deje de hablar moment¨¢neamente de estos temas, que hab¨ªan dejado a la Administraci¨®n en una d¨¦bil posici¨®n por el descontento y la insatisfacci¨®n social. ¡°El presidente tiene poca legitimidad. La sociedad ha tratado de organizarse, pero sin un liderazgo¡±, se?ala Roy Campos, presidente de Consulta Mitofsky.

¡°Se ha creado una solidaridad, no hacia el Gobierno sino hacia la gente afectada por Trump¡±, agrega Campos. Los pol¨ªticos han tratado de aprovecharse de esta solidaridad. Los l¨ªderes de los grandes partidos han convocado a un di¨¢logo nacional para dar una respuesta unida frente a la amenaza del presidente de Estados Unidos. La mano se qued¨® extendida en el aire. Ninguna fuerza mostr¨® una genuina disposici¨®n en negociar con las otras partes. Los presidentes de los partidos eligieron rutas paralelas que en realidad son la misma. Las cabezas de PRI, PAN y Morena inician esta semana sendos viajes a Estados Unidos a apoyar a los mexicanos en peligro de ser repatriados.

¡°Todas las instituciones se han venido abajo en t¨¦rminos de confianza, incluidos los empresarios¡±, se?ala Campos. ¡°No veo a una persona que pueda unir. Ni Carlos Slim, como se ha dicho, ni Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, que va en cabeza rumbo a las presidenciales de 2018¡±. En las ¨²ltimas semanas, solo estos personajes han puesto sobre la mesa y con claridad sus visiones sobre el futuro de M¨¦xico. El l¨ªder de Morena present¨® un gobierno en la sombra e hizo m¨¢s pronunciado su viraje al centro pol¨ªtico para intentar desactivar la polarizaci¨®n que causa. El magnate mexicano, en cambio, ofreci¨® una in¨¦dita conferencia de prensa en la que expuso parte del pensamiento empresarial de Trump e hizo un llamado a los pol¨ªticos para impulsar el mercado interno.

La relaci¨®n M¨¦xico-Estados Unidos se est¨¢ convirtiendo en un campo de batalla y el Gobierno mexicano no se ha dado cuenta de eso
Emilio ?lvarez Icaza, exsecretario de la CIDH

El calendario electoral tambi¨¦n hace dif¨ªcil que los partidos encuentren puntos en com¨²n en el corto plazo. Este a?o se disputan las gobernaturas de Estado de M¨¦xico, la entidad m¨¢s poblada del pa¨ªs; Coahuila y Nayarit. Los primeros dos bastiones importantes rumbo a las elecciones de 2018.

El momento de unidad ha dejado claro la distancia abismal que la sociedad mexicana tiene con sus pol¨ªticos. ¡°En lugar de construir se emplazan y se neutralizan unos a otros. Todo se vuelve un show de toma de posiciones¡±, considera Emilio ?lvarez Icaza, exsecretario ejecutivo de la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de 2012

?lvarez Icaza cree que la sociedad mexicana debe tomar la iniciativa desaprovechada por el Gobierno. ¡°La relaci¨®n M¨¦xico-Estados Unidos se est¨¢ convirtiendo en un campo de batalla de las pol¨ªticas de Trump. Y el Gobierno mexicano no se ha dado cuenta de eso porque su respuesta a las agresiones ha sido desconcertante¡±. En su opini¨®n, M¨¦xico dej¨® una oportunidad de convertirse en l¨ªder de la regi¨®n al desairar la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribe?os (CELAC) del 27 de enero. ¡°Pe?a Nieto pudo liderar un bloque regional e ir con una resoluci¨®n surgida de ese encuentro a la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA). En su lugar, se qued¨® en su casa¡±.

El domingo, varias instituciones educativas y organizaciones de la sociedad civil saldr¨¢n a manifestarse en un movimiento llamado Vibra M¨¦xico. ¡°Es un reclamo para tumbar los muros donde los haya. Pero no es un cheque en blanco al Gobierno de Pe?a Nieto¡±, agrega ?lvarez Icaza. La marcha ha demostrado que la unidad no es monol¨ªtica. Otros quieren convertir el domingo en un acto de respaldo al Gobierno. Algunas organizaciones han llamado a concentrarse a la misma hora unos kil¨®metros m¨¢s adelante. ¡°Esa manifestaci¨®n est¨¢ convocada por grupos cercanos al Gobierno que han defendido sus acciones. Creo que tiene la intenci¨®n de confundir¡±, agrega el exfuncionario de la CIDH.

Aunque los pol¨ªticos no han podido capitalizar la unidad, s¨ª son responsables de mantenerla. Un sondeo reciente de Consulta Mitofsky mostr¨® el lastre que signific¨® para el PRI el aumento del precio de los combustibles. El partido en el Gobierno es el m¨¢s castigado y se ha convertido en el m¨¢s repudiado al inicio de este a?o con una desaprobaci¨®n de 51 por ciento. ¡°Todos los pri¨ªstas se han desplomado en la boleta de 2018. Ni uno solo se salva de este castigo¡±, dice Roy Campos. La fr¨¢gil unidad nacional es una burbuja que puede romperse cuando M¨¦xico entre de lleno en la espinosa ruta de la sucesi¨®n presidencial.