La airada protesta contra la violencia policial se extiende por las barriadas de Par¨ªs
Los choques con los agentes entre coches en llamas se repiten desde la violaci¨®n de un joven por la polic¨ªa
En plena campa?a electoral y en estado de emergencia desde hace 15 meses, Francia se enfrenta al riesgo de otra grave crisis. La violaci¨®n de un joven negro con una porra mientras era detenido por tres polic¨ªas al norte de Par¨ªs ha desembocado en violentos incidentes y protestas nocturnas desde hace diez d¨ªas. Las escenas de guerrilla urbana se extienden por las barriadas y el contagio ha llegado ya a media docena de ciudades.
¡°La polic¨ªa mata inocentes, ¡°Todo el mundo odia a la polic¨ªa¡±, ¡°Justicia para Th¨¦o¡±. Son gritos y pancartas que estas pasadas noches se leen y escuchan en barriadas del gran Par¨ªs como Seine-Saint-Denis y especialmente en la Cit¨¦ 3.000, en Aulnay-sous-Bois, una conflictiva zona del extrarradio habitada por un elevado porcentaje de emigrantes o hijos de emigrantes procedentes sobre todo del norte de ?frica.
Es ah¨ª donde vive Th¨¦o L, el joven de 22 a?os al que tres polic¨ªas detuvieron el pasado d¨ªa 2. Los tres est¨¢n imputados. Uno de ellos por violaci¨®n una vez que los m¨¦dicos certificaron que sufr¨ªa graves heridas en el ano producidas por la introducci¨®n de la porra del agente. Desde entonces, cientos de j¨®venes airados participan todas las noches en las protestas.
De nada han servido las llamadas a la calma del propio Th¨¦o o la visita que le hizo en el hospital, donde a¨²n contin¨²a tras ser operado, el presidente Fran?ois Hollande. Son ya decenas los coches incendiados, establecimientos destrozados, mobiliario urbano destruido¡ M¨¢s de un centenar de j¨®venes han sido detenidos o interrogados. Algunos, ya condenados a medio a?o de prisi¨®n.
Algunos de los incidentes m¨¢s graves se han registrado este fin de semana en Bobigny, Argenteuil o Drancy. Entre granadas lacrim¨®genas y un masivo despliegue policial, las manifestaciones de apoyo a Th¨¦o han derivado en quemas de coches, uno de ellos una furgoneta de la cadena RTL, lanzamientos de piedras y tornillos a la polic¨ªa y destrozos de tiendas.
Iniciativas de la polic¨ªa han agravado el problema. Un informe preliminar interno concluy¨® que la violaci¨®n hab¨ªa sido "accidental¡±. El abogado de Th¨¦o ha dicho que, si esa estupidez de aplica a los casos de violaci¨®n, todos los acusados quedar¨ªan libres. ¡°Les bastar¨ªa decir que no hubo intencionalidad sexual¡±.
El s¨¢bado, y durante las violentas protestas en Bobigny, al noroeste de Par¨ªs, la prefectura de polic¨ªa inform¨® de que un agente hab¨ªa salvado a una ni?a de 5 a?os de las llamas al sacarla de un coche ardiendo del que hab¨ªa logrado salir su madre con otro ni?o de dos a?os. Era mentira. Hab¨ªa sido un joven manifestante de 16 a?os quien salv¨® a la ni?a. ¡°Saqu¨¦ a la peque?a. No soy un h¨¦roe. Solo quiero restablecer la verdad¡±, ha dicho a un blog que se realiza en la zona.
Los antecedentes del alcalde de Aulnay-sous-Bois, el conservador Bruno Beschizza, tampoco le convierten en el hombre m¨¢s adecuado a la hora de pedir calma. Fue polic¨ªa, dirigente de un sindicato policial, responsable de estudios de seguridad para el expresidente Nicolas Sarkozy. En noviembre orden¨® retirar por motivos morales unos carteles de una campa?a antisida en la que se ve¨ªa dos hombres abrazados. Y antes hab¨ªa propuesto que en los trenes de cercan¨ªas hubiera un vag¨®n solo para mujeres.
El Defensor de Derechos, Jacques Toubon, ha declarado a varios medios sentirse muy preocupado por lo ocurrido y por c¨®mo lo est¨¢n gestionando las autoridades. Recuerda Toubon un reciente estudio realizado entre 5.000 j¨®venes: la polic¨ªa hab¨ªa registrado o identificado al 80% de quienes eran negros o ¨¢rabes, y solo al 16% de los blancos y cat¨®licos.
Algunas iniciativas que ha adoptado? la polic¨ªa han agravado el problema
El recuerdo de los graves incidentes de 2005 sigue muy vivo en Francia y buena parte del mundo. Dos j¨®venes llamados Zyed y Bouna murieron electrocutados en un transformador cuando eran perseguidos por la polic¨ªa. Durante las tres semanas siguientes de protestas, 300 edificios resultaron da?ados, 10.000 coches quemados y 130 polic¨ªas heridos.
En julio pasado, el joven de 24 a?os Adama Traor¨¦ muri¨® mientras era interrogado por la polic¨ªa en otra localidad al norte de Par¨ªs. Ahora, en las protestas se exhiben fotos junto con pancartas con este texto: ¡°Th¨¦o y Adama nos recuerdan por qu¨¦ Zyed y Bouna corr¨ªan¡±.
Mientras promete dureza y justicia, el Gobierno no logra calmar los ¨¢nimos. El primer ministro, Bernard Cazeneuve, ha recibido este lunes a representantes de asociaciones contra el racismo. Comprende, dice, la emoci¨®n ciudadana, pero no la "inaceptable violencia". Su sucesor al frente de Interior, Bruno Le Roux, repite el anuncio de que miles de polic¨ªas de patrulla -2.600 en breve- llevar¨¢n permanentemente c¨¢maras de v¨ªdeo activadas. Le Roux pide respeto para los polic¨ªas proque no todos son como los que agredieron a Th¨¦o.
Los dirigentes pol¨ªticos en campa?a han tenido que pronunciarse. La mayor¨ªa para pedir esa calma que no llega. Pero tambi¨¦n para echar en cara ¡°la responsabilidad¡± del Gobierno en esta explosiva situaci¨®n, como ha hecho el conservador Fran?ois Fillon.
Marine Le Pen, del ultraderechista Frente Nacional, es la m¨¢s contundente y la ¨²nica para la que los sospechosos son siempre los habitantes de esas zonas problem¨¢ticas, los manifestantes ¡°extremadamente radicales¡±, no los polic¨ªas.
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