El presidente de Per¨² pide a Trump que deporte a Toledo
El pol¨ªtico es se?alado de haber cobrado 20 millones de d¨®lares en comisiones de la empresa brasile?a Odebrecht
La enredada situaci¨®n judicial del expresidente peruano Alejandro Toledo no hace m¨¢s que complicarse. Este domingo, el mandatario Pedro Pablo Kuczynski, ha solicitado a su hom¨®logo de Estados Unidos, Donald Trump, deportar al pol¨ªtico acusado de corrupci¨®n.
Denunciado por recibir 20 millones de d¨®lares en sobornos de la constructora brasile?a Odebrecht, Toledo enfrenta una orden de prisi¨®n preventiva de 18 meses en Per¨², acompa?ada por una notificaci¨®n roja de Interpol, activa en 190 pa¨ªses. Este fin de semana fue protagonista de un extra?o incidente, cuando una fuente an¨®nima del Ministerio del Interior revel¨® que planeaba viajar de San Francisco a Israel, para escapar de la justicia de su pa¨ªs.
Los rumores fueron tan persistentes que, ante lo que parec¨ªa la inminente llegada de Toledo, el Gobierno de Israel comunic¨® su decisi¨®n de negarle el ingreso a su territorio, hasta que resolviera sus asuntos pendientes con la justicia peruana. Aunque el expresidente pr¨®fugo finalmente no aterriz¨® en Tel Aviv, esta actitud motiv¨® que el Gobierno de Pedro Pablo Kuczynski enviara una carta de agradecimiento al Primer Ministro Benjam¨ªn Netanyahu.
Kuczynski tuvo un d¨ªa agitado en el frente exterior. Cerca de las 18:00 horas de Lima, sostuvo una comunicaci¨®n telef¨®nica con Donald Trump. Seg¨²n informa una nota de prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores, ah¨ª le solicit¨® que "en el marco de las competencias que la ley de migraci¨®n de ese pa¨ªs brinda al Departamento de Estado, se eval¨²e la opci¨®n de deportar a Alejandro Toledo hacia el Per¨², a fin que sea sometido a la justicia peruana".
El comunicado anota que tambi¨¦n conversaron sobre posibilidades de cooperaci¨®n comercial. "Ambos mandatarios intercambiaron puntos de vista sobre el estado de la relaci¨®n bilateral y las amplias posibilidades para profundizarla, sobre la base de las coincidencias en temas tales como la defensa de los principios democr¨¢ticos y la lucha contra la corrupci¨®n".
A las 20:30, Kuczynski?compareci¨® en un mensaje televisado en se?al nacional. Ah¨ª explic¨® las acciones que su gobierno hab¨ªa tomado para enfrentar la corrupci¨®n, a ra¨ªz del caso Odebrecht. Hacia el final de su presentaci¨®n se refiri¨® a la situaci¨®n de Toledo, en cuyo Gobierno fue ministro de Econom¨ªa y presidente del Consejo de Ministros.
Precis¨® que se ha hecho una modificaci¨®n a la ley, que impedir¨¢ que las empresas condenadas por corrupci¨®n vuelvan a contratar con el Estado. ?stas quedar¨¢n prohibidas de transferir sus recursos fuera, sin antes cumplir con el ¨ªntegro de sus obligaciones en Per¨². Tambi¨¦n dijo que los funcionarios involucrados en estas actividades irregulares ser¨¢n sometidos a la llamada ?muerte civil?, y no podr¨¢n volver a trabajar para el Estado. Asimismo, que de ahora en adelante todos los contratos de concesi¨®n peruanos incorporar¨¢n una cl¨¢usula anticorrupci¨®n. Finalmente, que se ha creado un sistema de recompensas, para aquellos funcionarios y ciudadanos honestos que decidan denunciar actos de corrupci¨®n.
"En relaci¨®n al caso del expresidente Alejandro Toledo, hemos tomado todas las acciones que la ley nos permite a nivel nacional y en jurisdicciones internacionales como Estados Unidos y otros pa¨ªses para lograr que regrese a aclarar su situaci¨®n frente a la justicia peruana", manifest¨®.
Un "gringo" en el Palacio de Pizarro
Aunque vivi¨® buena parte de su infancia en la Amazon¨ªa peruana ¡ªsu padre fue un m¨¦dico de origen polaco, que dirigi¨® el leprosario de San Pablo, en plena selva oriental¡ª, a Pedro Pablo Kuczynski (PPK) le dicen ?gringo?, por su estrechos v¨ªnculos con los Estados Unidos.
Estudi¨® en el Markham College de Lima y complement¨® su educaci¨®n en el Rossall School de Lancashire. Luego se especializ¨® en composici¨®n, piano y flauta en el Royal College of Music de Londres. Posteriormente, en 1961, realiz¨® una maestr¨ªa en econom¨ªa en la Escuela Woodrow Wilson de la Universidad de Princeton. (El di¨¢logo que sostuvo con Trump estaba programado originalmente para el pasado jueves, pero al final se posterg¨®. PPK ser¨¢ condecorado en Princeton el pr¨®ximo domingo 25 de febrero, y el Presidente de los Estados Unidos pensaba aprovechar la visita para llevar a cabo actos protocolares.)
Kuczynski volvi¨® al Per¨² en 1966, para trabajar con el Presidente Fernando Belaunde como director del Banco Central de Reserva. Tuvo que huir del Per¨² a ra¨ªz del golpe de Estado que el general Juan Velasco Alvarado dio en 1968. Entonces enfrent¨® acusaciones de corrupci¨®n, de las que la justicia lo terminar¨ªa absolviendo.
PPK se refugi¨® en los Estados Unidos, lo que, seg¨²n dice Mario Vargas Llosa en su libro de memorias ?El pez en el agua?: ?le permiti¨® pasar de modesto funcionario del Banco Central de Reserva del Per¨² a ejecutivo del First Boston de Nueva York (¡). En los ¨²ltimos a?os viajaba por el mundo entero ¡ªel siempre precisaba que en aviones privados, y, si no hab¨ªa m¨¢s remedio, en el Concorde¡ª privatizando empresas y asesorando a gobiernos de todas las ideolog¨ªas y geograf¨ªas que quer¨ªan saber qu¨¦ era una econom¨ªa de mercado y qu¨¦ pasos dar para llegar a ella?.
La primera esposa de Kuczynski fue Jane Dudley Casey ¡ªhija de Joseph Edward Casey, quien fuera miembro de la C¨¢mara de Representantes por Massachusetts¡ª. En aquel matrimonio tuvo tres hijos, antes de divorciarse en 1995. Dos a?os m¨¢s tarde se cas¨® con Nancy Ann Lange ¡ªtambi¨¦n estadounidense, prima de la actriz Jessica Lange¡ª, con quien tiene una hija de 18 a?os.
Conocidos estos hechos, el expresidente Toledo se decidi¨® a responder. A trav¨¦s de su cuenta de Twitter public¨® un comunicado titulado: "No al linchamiento pol¨ªtico, s¨ª a la justicia justa". En la misiva expone que no es fugitivo, pues cuando sali¨® del Per¨² no hab¨ªa cargos por corrupci¨®n en su contra. "El juzgado en Lima no solicit¨® mi testimonio para ayudar con su investigaci¨®n. Al contrario, me acus¨® directamente de delitos que no he cometido y que el juzgado no puede comprobar. (¡) Todos los peruanos tenemos derecho a la presunci¨®n de la inocencia y el debido proceso dentro de la ley sin distinci¨®n del color de la piel, del color pol¨ªtico o de g¨¦nero", afirm¨®.
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