Mauricio Macri anula el pol¨¦mico pacto de la deuda de su padre con el Estado
El presidente rectifica de nuevo ante la pol¨¦mica por el conflicto de intereses
Mauricio Macri quiere ser la ant¨ªtesis de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, su antecesora. Cada vez que hay un problema, trata de hacer lo contrario de lo que ella har¨ªa. As¨ª que ante la ¨²ltima pol¨¦mica por la renegociaci¨®n de una deuda de la empresa familiar de los Macri con el Estado, que estaba deteriorando de forma grave su imagen, ha decidido dar un giro de 180 grados, rectificar por completo y anular el acuerdo. Nada de mantenerse firme y seguir adelante frente a las cr¨ªticas, como har¨ªa ella.
No habr¨¢ responsables pol¨ªticos de esta enorme metedura de pata, nadie va a dimitir aparentemente por el fiasco. La soluci¨®n por la que ha optado el presidente, despu¨¦s de m¨¢s de una semana de intensa pol¨¦mica, es la de comparecer y ofrecer una rueda de prensa para anunciar que la negociaci¨®n de la deuda de los 300 millones de d¨®lares que los Macri le deben al Estado empieza de nuevo. El jefe del Gobierno argentino muestra as¨ª la cara y la cruz de su Gobierno: por un lado, cometen errores no forzados importantes, lo que genera inquietud en sus filas y muchas cr¨ªticas de analistas. Por otro, es capaz de rectificar y dar la cara. ¡°?Viste alguna vez una conferencia de prensa contestando a preguntas de todos ustedes cuando se publicaron graves acusaciones durante todos estos a?os? No¡±, le contest¨® a un periodista en referencia a la actitud de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner frente a los esc¨¢ndalos.
Pocas cosas hacen tanto da?o a Macri como el mensaje ¡°todos son iguales¡± y la idea de que gobierna para los ricos, el mundo del que viene este multimillonario que sali¨® de la empresa de su padre para dedicarse primero al f¨²tbol, como presidente de Boca Juniors, y despu¨¦s a la pol¨ªtica, como alcalde de Buenos Aires. Esta semana ha sido dura para el presidente. Durante varios d¨ªas intent¨® escudarse en sus segundos y esperar que amainara el esc¨¢ndalo del Correo Argentino, la empresa que fue de los Macri y por la que le deben 300 millones de d¨®lares al Estado argentino desde 2001. Pero no sucedi¨®. Un fiscal lo imput¨® por presunto perjuicio al Estado y un juez debe decidir ahora si avanza o no en la causa. Cada d¨ªa las cr¨ªticas fueron m¨¢s fuertes. As¨ª que al final el presidente, poco antes de iniciar un viaje clave a Espa?a, decidi¨® comparecer y asumir en persona el coste de esta en¨¦sima rectificaci¨®n.
Hoy mismo lleg¨® otra marcha atr¨¢s, la retirada de un decreto sobre jubilaciones que reduc¨ªa ligeramente el c¨¢lculo del aumento. La pol¨¦mica fue enorme y Macri anul¨® el decreto. La idea del ensayo y error constante cuando lleva m¨¢s de un a?o gobernando empieza a generar preocupaci¨®n en el ambiente pol¨ªtico, y m¨¢s en un a?o electoral clave.
¡°?D¨®nde est¨¢ la falla para que se produzcan todos estos errores?¡±, le pregunt¨® un periodista. ¡°Buena pregunta¡±, contest¨® el presidente mostrando su debilidad, con un Gobierno que no acaba de atinar en este tipo de cuestiones pol¨¦micas que afectan a la familia del presidente, una de las m¨¢s ricas del pa¨ªs. Macri tiene un problema con su padre, al que atribuy¨® su aparici¨®n en los Panama Papers. ¡°Mi padre es un cap¨ªtulo aparte¡±, lleg¨® a decir con una sonrisa durante la conferencia de prensa.
Y ah¨ª admiti¨® que no le cuesta rectificar, aunque cada vez le supone un coste pol¨ªtico mayor. ¡°Hay que entender que este cambio tiene estas situaciones. Yo les dije desde el primer d¨ªa que si quer¨ªan magos a Copperfield. Cuando uno hace tantas cosas comete errores. Lo importante es no persistir, si me equivoco doy el paso atr¨¢s y lo corrijo. Pero vamos en la direcci¨®n correcta¡±, insisti¨®, visiblemente tocado. La imagen que se ha instalado, incluso entre una parte de sus votantes, de que aprovech¨® su posici¨®n para beneficiar a la empresa familiar y ahorrarle varios millones de d¨®lares ha hecho mella.
Macri admiti¨® que, a pesar de que era evidente que ser miembro de una de las familias m¨¢s ricas del pa¨ªs y muy relacionada con negocios con el Estado le podr¨ªa traer problemas de conflictos de intereses, no pensaron en un sistema para resolverlos. As¨ª que de momento anulan todo y tratar¨¢n de empezar de nuevo. ¡°Le he pedido a Aguad [el ministro de Comunicaciones, que alcanz¨® el acuerdo con la empresa de Macri para que pagara la deuda en 15 a?os sin actualizaci¨®n y con un inter¨¦s del 7%, lo que para una fiscal era una especie de condonaci¨®n del 98%) que volvamos a foja cero¡±.
Macri insisti¨® en que a¨²n se puede deshacer todo. ¡°Todav¨ªa no sucedi¨® nada, no se condon¨® nada, no se pag¨®. Volvamos a la justicia y dig¨¢mosle empecemos de cero para buscar un acuerdo de todos a este problema. Llevamos 14 a?os, hay que resolverlo porque si no perjudica al Estado. Aceptaremos la soluci¨®n que nos propongan. Intentaremos la mayor transparencia posible. La ¨²nica buena intenci¨®n del ministro fue resolver para que el Estado cobrara, t¨¦cnicamente se hizo bien, pero vamos a volver a empezar. Adem¨¢s habr¨¢ un equipo de gente, incluida la Oficina Anticorrupci¨®n, a los que les he pedido fijar un sistema por si hay futuros conflictos similares a este. Somos muchos los que creemos en un cambio, que estamos comprometidos, necesitamos fijarnos est¨¢ndares elevados para que la confianza se refuerce¡±.
Macri parece as¨ª dispuesto a dar marcha atr¨¢s pero lo cierto es que el acuerdo se alcanz¨® hace siete meses ¨Caunque a¨²n no se hab¨ªa pagado- y si una fiscal no se hubiese opuesto se habr¨ªa seguido adelante con ¨¦l. El presidente reacciona as¨ª solo cuando la prensa publica los esc¨¢ndalos y siempre que alcancen una dimensi¨®n importante. Algo similar pas¨® con los papeles de Panam¨¢, solo entonces decidi¨® traer su dinero de Bahamas, cuando se conoci¨® que lo ten¨ªa all¨ª, y adem¨¢s entregar la gesti¨®n de su fortuna a un fideicomiso ciego. Macri demuestra una vez m¨¢s que sabe rectificar pero deja abierto el flanco de la cr¨ªtica por el aparente descontrol dentro de su Gobierno.
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