Los maestros tensan el pulso contra Mauricio Macri

La pulseada entre el gobierno de Mauricio Macri y los docentes argentinos parece haber llegado a un punto sin retorno. Las clases deben comenzar el lunes 6, pero los maestros de todo el pa¨ªs han declarado una huelga de 48 horas para presionar por una actualizaci¨®n salarial. Las discusiones se han salido de cauce con ataques directos del Presidente a un l¨ªder sindical de los maestros, quien a su vez lo ha denunciado ante la Justicia por ¡°amenazas¡±. Mientras la oferta oficial est¨¢ lejos de las aspiraciones de los docentes, una campa?a espont¨¢nea en Twitter sum¨® el apoyo de 60.000 personas dispuestas a reemplazar a los maestros en huelga, s¨ªntoma de las pasiones que despierta la pelea. Como mar de fondo est¨¢ la defensa de los sindicatos ante lo que consideran un ataque del Gobierno al modelo de la escuela p¨²blica y gratuita, una de las marcas de identidad del sistema educativo argentino.

Macri abri¨® el mi¨¦rcoles las sesiones anuales del Congreso con un discurso de una hora en el que repas¨® los logros de su Gobierno, subi¨® el tono con el kirchnerismo y atac¨®, con una dureza, a los docentes en huelga. Cuando llamaba a defender a los maestros que son agredidos en las aulas por padres disconformes, desde una banca le recordaron que Roberto Baradel, titular del sindicato de los docentes de la provincia de Buenos Aires, hab¨ªa recibido amenazas. ¡°No creo que Baradel necesite nadie que lo cuide¡±, dijo fuera de libreto Macri, y recibi¨® el aplauso de sus diputados. Al sindicalista no le cay¨® bien la broma y denunci¨® a Macri por amenazas. ¡°Lo que est¨¢ haciendo es una suerte de amenaza velada y declarar una zona liberada", dijo Baradel. Por la noche, el dirigente se retir¨® enojado de un set de televisi¨®n ante la pregunta de un periodista que quiso saber cu¨¢l era su experiencia al frente de un aula. ¡°Es una pregunta que en el marco de esto intenta deslegitimar al locutor. Es una falta de respeto.¡±, lanz¨® mientras se pon¨ªa de pie y abandonaba el estudio. Es en este clima de crispaci¨®n que el Gobierno y los maestros deben decidir los aumentos salariales.

El problema se inici¨® a finales de febrero, cuando el ministerio de Educaci¨®n anunci¨® que no habr¨ªa paritaria docente nacional, sino que cada distrito deber¨ªa discutir con sus docentes por separado. La ley establece que la paritaria nacional fija un piso y desde all¨ª cada provincia mantiene o sube la cifra de acuerdo a sus posibilidades. El jefe de ministros, Marcos Pe?a, ratific¨® ayer que la discusi¨®n no ser¨¢ nacional porque a principios de 2016 se acord¨® una actualizaci¨®n anual autom¨¢tica. ¡°Es importante que los sindicatos se sienten a discutir de manera franca. Pedimos que revisen la actitud del paro (huelga) nacional que no tiene raz¨®n de ser, salvo que esconda otros fines pol¨ªticos. En ese caso que planteen un debate pol¨ªtico¡±, dijo en una rueda de prensa conjunta con la gobernadora de Buenos Aires, Mar¨ªa Eugenia Vidal, y el jefe del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodr¨ªguez Larreta.

Vidal y Rodr¨ªguez Larreta lideran distritos que son la punta de lanza de las discusiones salariales. La provincia, donde vive el 40% de la poblaci¨®n de Argentina, ofreci¨® primero un aumento de 18% y cedi¨® luego a una suba que se actualice por inflaci¨®n. Para los sindicatos la suba no puede ser menor al 35%, algo por debajo del 40% de inflaci¨®n de 2016. Y exigen adem¨¢s que la oferta sea un compromiso de que el macrismo defiende a la escuela primaria p¨²blica y gratuita, donde cada a?o cursan 12 millones de ni?os.El delantal blanco que usan los alumnos se ha convertido en s¨ªmbolo de ese reclamo. Y volver¨¢ a serlo el martes, cuando los docentes se sumar¨¢n a una movilizaci¨®n convocada a Plaza de Mayo por la Confederaci¨®n General del Trabajo (CGT), que agrupa a los sindicatos peronistas m¨¢s poderosos.

Protesta sindical

La marcha del martes ser¨¢ una prueba de fuerza de los sindicatos, que rompieron la tregua que dieron a Macri en el inicio de su mandato. Como este ser¨¢ un a?o electoral, la protesta servir¨¢ tambi¨¦n para redefinir la interna del peronismo, dividido entre kirhcneristas y no kirchneristas desde la derrota en las presidenciales de octubre de 2015. El Gobierno aspira a que esas divisiones, y el apoyo que tiene de buena parte de la sociedad en su pulseada contra los docentes, terminen por torcer el brazo de los sindicatos. El humor social qued¨® en evidencia tras el tuit de un desconocido que se ofreci¨® a dar clases durante el primer d¨ªa de huelga docente.

En pocas horas, otras 60.000 personas se sumaron a la iniciativa. La gobernadora Vidal ha dicho que esos argentinos ¡°no pueden reemplazar a los docentes¡±, pero ¡°expresan una manera positiva de la sociedad de involucrarse en la educaci¨®n p¨²blica, frente al hartazgo de los sindicatos que todos los a?os pretenden someternos para saber si las clases empiezan o no¡±. La cuesti¨®n salarial parece ser lo de menos.