Si viene inmigraci¨®n: ¡°No abran la puerta, no digan nada, no firmen nada¡±
La detenci¨®n de un indocumentado tras dejar a su hija en el colegio confirma los peores temores sobre el Gobierno Trump
Es la peor pesadilla de una familia en la que hay un inmigrante indocumentado. El pasado martes, un padre fue detenido por la polic¨ªa de inmigraci¨®n de Estados Unidos justo despu¨¦s de dejar en el colegio a su hija de 12 a?os. La detenci¨®n de R¨®mulo Av¨¦lica-Gonz¨¢lez, mexicano de 48 a?os, se produjo en plena calle en el Este de Los ?ngeles delante de su esposa y otra de sus hijas, de 13 a?os. Ella grab¨® la detenci¨®n desde el coche. Se la oye llorar mientras los agentes se llevan a su padre.
Las nuevas normas de inmigraci¨®n dictadas por el presidente Donald Trump han convertido en objetivo a todos los inmigrantes indocumentados. En los ¨²ltimos a?os, a pesar de las cifras r¨¦cord de deportaciones, se hab¨ªa instalado la sensaci¨®n de que si un indocumentado no se met¨ªa en problemas, el Gobierno federal ten¨ªa otras prioridades. Ya no. Trump ha logrado que el miedo penetre las comunidades de inmigrantes en Estados Unidos en solo un mes.
Av¨¦lica-Gonz¨¢lez, de 48 a?os, ten¨ªa un antecedente por conducir ebrio y otro por tener documentos falsos. Ha vivido en Estados Unidos 25 a?os y tiene cuatro hijas, todas ciudadanas norteamericanas, seg¨²n cont¨® la familia a la prensa local.
Lo m¨¢s inquietante de su arresto es que no hab¨ªa hecho nada especial m¨¢s que su rutina diaria de dejar a su hija en el colegio. La detenci¨®n viene a confirmar los peores temores de una comunidad en la que desde hace dos semanas se suceden los rumores, por el momento sin confirmaci¨®n, de que la polic¨ªa migratoria (ICE) est¨¢ yendo a buscar a los inmigrantes a sus casas, a los colegios o a los hospitales. No est¨¢ claro que haya m¨¢s arrestos, a¨²n no hay datos que permitan comparar con la ¨¦poca de Obama, pero s¨ª que los agentes de ICE est¨¢n haciendo cosas que antes no hac¨ªan.
En lugares como Los ?ngeles, la ciudad con m¨¢s inmigrantes y donde se calcula que viven un mill¨®n de sin papeles, ese ambiente de miedo ha llevado a la movilizaci¨®n de autoridades y asociaciones para defender a los inmigrantes. Talleres sobre qu¨¦ hacer para evadir a la polic¨ªa migratoria se suceden a diario. El pasado s¨¢bado, el presidente del Senado de California, Kevin de Le¨®n, hijo ¨¦l mismo de una inmigrante mexicana, organiz¨® una reuni¨®n de vecinos en el centro de Los ?ngeles para tranquilizarlos respecto a la pol¨ªtica de California sobre los indocumentados y para que pudiera consultar con abogados.
Bajo una carpa en la que se sientan m¨¢s de 200 personas, un abogado preguntaba cu¨¢ntos est¨¢n en Estados Unidos sin papeles o tienen familiares en esa situaci¨®n. M¨¢s de la mitad levantaron la mano. De Le¨®n empez¨® por decir que en California ¡°no vamos a levantar ni un dedo para ayudar a la patrulla fronteriza¡±. El senador est¨¢ impulsando una ley que convertir¨ªa a todo California en un Estado santuario, es decir, cuyas autoridades tendr¨ªan prohibido por ley compartir informaci¨®n con ICE.
Porque la situaci¨®n desatada por Trump afecta tambi¨¦n a las fuerzas del orden locales. Los agentes que detuvieron a Av¨¦lica-Gonz¨¢lez llevaban chalecos en los que dec¨ªa ¡°polic¨ªa¡±. El alcalde de la ciudad ha pedido que dejen de hacerse pasar por polic¨ªas. Ha costado d¨¦cadas construir una relaci¨®n de m¨ªnima confianza entre las fuerzas de seguridad y los vecinos de barrios con fuerte presencia de inmigrantes. En una ciudad como Los ?ngeles, con semejante poblaci¨®n indocumentada, la polic¨ªa tendr¨ªa un ojo tapado si no pudiera contar con la colaboraci¨®n y las denuncias de cientos de miles de personas.
Ese d¨ªa estaban all¨ª tambi¨¦n el sheriff del condado de Los ?ngeles, Jim McDonnell, y el subjefe de la polic¨ªa local (LAPD) Robert Arcos. ¡°Soy hijo de inmigrantes¡±, dijo McDonnell a la audiencia, ¡°entiendo por lo que est¨¢n pasando¡±. Las fuerzas del orden ¡°solo podemos tener ¨¦xito si la comunidad nos apoya. Si ten¨¦is miedo de la polic¨ªa, todos salimos perjudicados¡±. McDonnell reiter¨®: ¡°En el condado de Los ?ngeles, la polic¨ªa y el sheriff est¨¢n con ustedes, para protegerlos¡±. ¡°La polic¨ªa sabe que muchos de ustedes tienen miedo y estamos perdiendo la confianza¡±, dijo el subjefe Arcos. ¡°Voy a decirlo alto y claro, el LAPD est¨¢ aqu¨ª para proteger y servir¡±.
Su audiencia eran personas que, literalmente, tienen miedo de no volver a ver a sus hijos despu¨¦s de dejarlos en el colegio. O ni?os que tienen miedo de volver a una casa vac¨ªa. Como Ren¨¦ G., de 33 a?os, que lleva siete en Estados Unidos. Vive en Watts, al sur de Los ?ngeles y ese d¨ªa hab¨ªa acudido con su hermana y con su hija Stephanie, de cuatro a?os, a la que miraba mientras dec¨ªa ¡°yo soy su soporte y ella el m¨ªo¡±. La detenci¨®n de R¨®mulo Av¨¦lica-Gonz¨¢lez ha instalado el terror en personas como Ren¨¦.
Un grupo de abogados dio consejos a los inmigrantes presentes. ¡°Tienen derechos bajo la Constituci¨®n¡±, record¨® Luis Nolasco, de la Uni¨®n Americana por las Libertades Civiles (ACLU). En un encuentro con ICE, ¡°est¨¦n siempre callados, cualquier cosa que digan la pueden utilizar¡±. ¡°Nunca firmen nada¡± continu¨®. Y por ¨²ltimo, si se presentan en su casa, ¡°no abran la puerta si no traen una orden judicial¡±.
Entre los consejos que dan los abogados estos d¨ªas a los inmigrantes irregulares hay uno desgarrador. Que vayan a un notario y nombren un tutor legal para sus hijos. Alrededor de cinco millones de menores de edad viven con al menos uno de sus padres sin papeles, seg¨²n un estudio del Migration Policy Institute citado por Reuters.
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