La viuda de Steve Jobs contra Donald Trump

Steve Jobs nunca mostr¨® demasiado inter¨¦s por la pol¨ªtica, pero siempre reconoci¨® que compartir su vida con Laurene Powell, obsesionada con la educaci¨®n, le hab¨ªa cambiado la vida. Ella, que nunca cambi¨® su apellido a pesar de la costumbre de adoptar el del marido tras el matrimonio, siempre prefiri¨® mantener su vida al margen de las actividades de Jobs, que muri¨® en 2011. Tras la llegada del presidente Donald Trump, se ha convertido en una hero¨ªna inesperada a favor de los inmigrantes.

La semana pasada, Powell mantuvo una reuni¨®n con Trump en la Casa Blanca. Su mensaje era claro: se?alar al presidente las aportaciones que los inmigrantes han hecho a Estados Unidos tomando a su marido, alma de Silicon Valley y fundador de Apple ¡ªuna de las empresas ma? valiosas del mundo¡ª como ejemplo. Jobs era de origen sirio, una de las seis nacionalidades vetadas por la orden migratoria de Trump. Su padre biol¨®gico, Abdul Fattah Jandali, lleg¨® a EEUU como refugiado desde Homs (Siria), huyendo de la guerra de Siria en 1952. Jandali vive en Reno (Nevada), donde trabaja como gerente de un casino.

La mujer del difunto Jobs ha conseguido lo que ninguno de los gigantes de Silicon Valley, verse con el presidente en privado. Tras ganar las elecciones, Trump cre¨® un consejo asesor econ¨®mico en el que quiso contar con los l¨ªderes de Google, Facebook, Amazon, Apple, Uber y Tesla. Los cuatro primeros declinaron la oferta. Travis Kalanick, de Uber, lo abandon¨® tras sufrir una campa?a de protesta por parte de los usuarios. En un solo fin de semana se registraron m¨¢s de 200.000 bajas en su aplicaci¨®n de servicio de transporte. Elon Musk, de Tesla, es el ¨²nico que mantiene una l¨ªnea de conversaci¨®n abierta. A pesar de las cr¨ªticas, argumenta que as¨ª puede dar otros puntos de vista al equipo presidencial. A tenor de las im¨¢genes que difundi¨® Getty tras la ¨²ltima reuni¨®n, en las que se le ve¨ªa aislado y fuera de lugar, sin acceso a las conversaciones o corros, parece que Powell es, hasta la fecha, la representante de Silicon Valley que m¨¢s atenci¨®n ha conseguido por parte del mandatario.

Poco ha trascendido de la reunion, que fue cerrada a la prensa. Alan Marks, portavoz de Emerson Collective, una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro creada por Powell y el periodista Carlos Watson en 1997 para ayudar a estudiantes sin recursos, se ha limitado a reconocer que hablaron de educaci¨®n e inmigraci¨®n pero que no cerraron ning¨²n tipo de acuerdo.

En Sillicon Valley, donde Powell sigue residiendo, se espera que?sea una voz cantante para enfatizar la val¨ªa de los inmigrantes y la importancia de la educaci¨®n para el futuro del pa¨ªs. En 2015, Powell don¨® 50 millones de d¨®lares a XQ: The Super School Project, una iniciativa para modernizar las escuelas p¨²blicas de la zona de San Francisco. Es la mujer m¨¢s adinerada del mundo de la tecnolog¨ªa, aunque no ejerce su labor en el mismo. De su marido hered¨® un 7,3% de Disney y suma m¨¢s de 38,5 millones de acciones de Apple. Mientras que ella es una destacada fil¨¢ntropa, Jobs pas¨® a la historia como un hura?o que nunca apoy¨® causa alguna.