Democracia: ahora es diferente
Am¨¦rica Latina no est¨¢ irremisiblemente condenada a que sus democracias sean inviables
Am¨¦rica Latina no est¨¢ irremisiblemente condenada a que sus democracias sean inviables. No solo no lo son, sino que recurrentemente sacan fuerzas para responder a lo que las amenace. Tampoco merecen una mirada condescendiente y de perdonavidas. Hay muchos ejemplos en los ¨²ltimos 15 a?os en los que una feliz convergencia entre vigorosas capacidades democr¨¢ticas nacionales y el sistema internacional ha enfrentado con relativo ¨¦xito circunstancias amenazantes.
Lo hemos estado viendo estos d¨ªas ante la evoluci¨®n de los acontecimientos en dos pa¨ªses: Paraguay y Venezuela. En el primero, una movida parlamentaria para producir un cambio constitucional "entre bambalinas" fue bloqueada por la gente en las calles y las se?ales de la comunidad internacional.?
M¨¢s del autor
En Venezuela, el autogolpe, a trav¨¦s de una sentencia del Tribunal Supremo, fue frenado y enfrentado. Esto no despeja los nubarrones antidemocr¨¢ticos que siguen golpeando al pa¨ªs ni la dram¨¢tica crisis humanitaria que sufre su pueblo, pero s¨ª ha revertido el autogolpe. La gente sigue en las calles pues la agenda democr¨¢tica no se reduce a enfrentar el autogolpe; la respuesta este martes fue una "feroz represi¨®n", como la calific¨® Almagro.
Nada es lineal ni simple. Lo ocurrido en los ¨²ltimos 15 a?os en la regi¨®n es variado, pero los hitos democr¨¢ticos son alentadores. Pongo el ejemplo del Per¨². Los que vivimos la experiencia peruana de lucha por la reconstrucci¨®n democr¨¢tica a fines de la d¨¦cada de los 90, pudimos constatar que el sistema internacional ¨Cen nuestro caso, particularmente el sistema interamericano¨C puede ser un soporte importante para reforzar el papel central de fuerzas democr¨¢ticas internas cohesionadas para salir de una crisis autoritaria.
De esa experiencia sali¨®, precisamente, la iniciativa de la Carta Democr¨¢tica Interamericana ¨Caprobada en el 2001¨C para enfrentar amenazas distintas del tradicional "golpe militar". "Nunca se ha aplicado" o "no sirve para nada" es uno de los lugares comunes o distorsiones m¨¢s persistentes sobre la Carta Democr¨¢tica Interamericana. Error; eso no es cierto. Se ha hecho uso y aplicaci¨®n de ella muy claramente en tres casos.
Primero, en Venezuela el 2002, con ocasi¨®n del golpe del 11 de abril contra Hugo Ch¨¢vez. S¨ª, la misma Carta hoy denostada por el r¨¦gimen de Maduro como "arma del imperio". Se impuls¨® la inmediata convocatoria de una sesi¨®n del Consejo Permanente de la OEA en aplicaci¨®n del art¨ªculo 20 de la Carta. Cuando dos d¨ªas despu¨¦s del golpe se adopt¨® en el Consejo la resoluci¨®n sobre el golpe de Estado en Venezuela, se conden¨® "la alteraci¨®n del orden constitucional en Venezuela"?y se inst¨® a la "normalizaci¨®n de la institucionalidad democr¨¢tica [¡] en el marco de la Carta Democr¨¢tica Interamericana". Este paso convergi¨® con el desarrollo interno del proceso pol¨ªtico y ese mismo d¨ªa se normaliz¨® la situaci¨®n.
M¨¢s adelante se aplic¨® en Honduras en 2009, luego del derrocamiento del presidente Manuel Zelaya; y en Paraguay (2012) cuando el presidente Lugo fue apartado del cargo de presidente de la rep¨²blica por el Senado paraguayo "por mal desempe?o de sus funciones". En estos casos el mecanismo de la Carta se puso en acci¨®n y ello tuvo manifestaciones sostenidas en el tiempo. Ahora la aplicaci¨®n en curso de la Carta a Venezuela sigue estando en la agenda del Consejo Permanente de la OEA; un tanto convulsionado, cierto, pero en una din¨¢mica que est¨¢ en pleno desarrollo al escribirse estas l¨ªneas.
No es que todo est¨¦ claro o el suelo parejo. Un instrumento interamericano, universal y hasta "interplanetario" no sustituye ni se superpone a lo fundamental: la din¨¢mica interna de las fuerzas sociales y pol¨ªticas. Eso s¨ª: cuando la oposici¨®n a un r¨¦gimen autoritario act¨²a dividida o sin un eje articulador claro y com¨²n, la comunidad internacional no podr¨¢ suplir esas limitaciones (ni le corresponde). Pero con ella al lado, mucho se puede lograr cuando hay unidad.
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