El ¡®hacker¡¯ que vend¨ªa en la web profunda falsas amenazas de bomba
Un adolescente autista propag¨® desde Israel 2.000 avisos de atentados, la mayor¨ªa de perfil antisemita. Recaud¨® 500.000 d¨®lares
A Michael Ron David Kadar la vida no le hab¨ªa sonre¨ªdo. Aquejado de profundo autismo y con un tumor cerebral diagnosticado, sus palabras estaban marcadas desde la ni?ez por un defecto en el habla. Aun as¨ª, intent¨® sacarle partido a su destino. Naci¨® en Estados Unidos, pero sus padres le llevaron a Israel al cumplir los cinco a?os. Se mudaron a Ashkelon, una ciudad portuaria que nadie recuerda salvo cuando caen los cohetes Qassam desde la vecina franja de Gaza o los gu¨ªas tur¨ªsticos glosan la figura b¨ªblica de Sans¨®n.
Kadar no conoc¨ªa a casi nadie. No fue al colegio ni al instituto. Se libr¨® tambi¨¦n del servicio militar, obligatorio en el Estado hebreo. Fue educado en casa por sus padres ¡ªun israel¨ª y una norteamericana de quienes hered¨® ambos pasaportes¨C, como si fuera un ser monstruoso que la familia quisiera ocultar. Pasaba el d¨ªa entero con sus ordenadores. Hasta que se convirti¨® en un experto inform¨¢tico, un hacker global, un explorador de la Web Oscura: las profundidades de Internet adonde los buscadores nunca llevan.
Fue detenido hace un mes, cumplidos ya los 18 a?os, por la brigada de cibercr¨ªmenes de la polic¨ªa de Israel. El FBI le pisaba las talones desde semanas atr¨¢s. Era el principal sospechoso de la creciente ola de amenazas lanzadas contra instituciones jud¨ªas en EE UU desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca.
La conmoci¨®n social generada por el arresto de un muchacho hebreo acusado de delitos de odio religioso y antisemitismo se vio aliviada cuando su abogado y sus familiares detallaron el precario estado de su salud mental. Israel y Estados Unidos, sus dos patrias, parec¨ªan dispuestas a dar carpetazo judicial al caso y abrirle un expediente psiqui¨¢trico.
Alert¨® de que un vuelo de El Al se iba a estrellar deliberadamente. La falsa advertencia provoc¨® el despegue de emergencia de cazas franceses y suizos con orden de derribar el aparato
No estaba tan desvalido. Los pliegos de cargos presentados por los investigadores policiales ante un juzgado de distrito de Tel Aviv ¡ªdonde le imputaron m¨¢s de 2.000 ciberdelitos¡ª y sendos tribunales federales de Florida y Georgia han dejado al descubierto las huellas que dej¨®. Kadar llevaba un dietario de sus actividades en una memoria externa. Conservaba las grabaciones de sus conversaciones. Archivaba las noticias publicadas sobre las consecuencias de sus intimidaciones en la sociedad y en los servicios de seguridad.
El joven operaba como un extorsionador a sueldo a escala global que cobraba en bitcoins, la moneda digital an¨®nima que no deja rastro. Los agentes que le detuvieron en su domicilio de Ashkelon ¡ªdonde manejaba cinco computadoras y una antena wifi de largo alcance, as¨ª como programas de manipulaci¨®n de la voz y aplicaciones para suplantar la personalidad¡ª se incautaron de un bot¨ªn equivalente a medio mill¨®n de d¨®lares en la criptodivisa virtual. Los obtuvo durante dos a?os de chantajes a trav¨¦s de la Red en Estados Unidos, Reino Unido, Noruega, Dinamarca, Australia y Nueva Zelanda.
Hab¨ªa comenzado practicando el swatting (de SWAT, unidades policiales de ¨¦lite, broma consistente en llamar a servicios de emergencia para alertar de una incidencia falsa) al amparo de sus varias identidades de impostor digital. A partir de 2015 comenz¨® a rentabilizar su afici¨®n a la Web Oscura. Ofrec¨ªa sus servicios como extorsionista y ciberacosador al tiempo que traficaba con pasaportes, visados y documentos de identidad falsos. Tambi¨¦n pasaba drogas en l¨ªnea y coleccionaba material de pornograf¨ªa infantil.
Era aficionado a utilizar la expresi¨®n ¡°ba?o de sangre¡± como un sello personal en sus misivas y conversaciones, pero lo que m¨¢s le gustaba era sembrar el p¨¢nico. ¡°A un gran n¨²mero de ni?os jud¨ªos les va a estallar la cabeza a causa de la metralla¡±, lleg¨® a amenazar a los responsables de una escuela. Oblig¨® a evacuar colegios, aeropuertos, centros comerciales, comisar¨ªas¡ en medio de ingentes despliegues de las fuerzas de seguridad.
Sab¨ªa ad¨®nde dirigir sus intimidaciones. Alert¨® de que un vuelo de la compa?¨ªa israel¨ª El Al se iba a estrellar deliberadamente contra zonas habitadas en Europa. La falsa advertencia provoc¨® el despegue de emergencia de cazas franceses y suizos sobre el espacio a¨¦reo helv¨¦tico. Ten¨ªan orden de derribar el aparato en caso necesario.
Sus servicios pod¨ªan consultarse en la Web Oscura. ¡°Amenaza de masacre a domicilio: 40 d¨®lares¡±. ¡°Advertencia de matanza en una escuela: 80 d¨®lares¡±
Otra de sus llamadas afect¨® a un aeropuerto canadiense. Oblig¨® a desembarcar a trav¨¦s de las rampas de evacuaci¨®n a los pasajeros de una aeronave comercial, varios de los cuales resultaron heridas. Incluso el avi¨®n oficial de un equipo de la NBA, el de los Celtics de Boston, estuvo en su punto de mira el pasado mes de diciembre cuando trasladaba a los jugadores.
Las tarifas de sus servicios pod¨ªan consultarse en la Web Oscura. ¡°Amenaza de masacre a domicilio: 40 d¨®lares¡±. ¡°Advertencia de matanza en una escuela: 80 d¨®lares¡±. Una alerta de bomba a bordo de un avi¨®n en vuelo ascend¨ªa a 500 d¨®lares. A los clientes les ofrec¨ªa tambi¨¦n, a cambio de un suplemento, una intimidaci¨®n personalizada en lugar de la f¨®rmula est¨¢ndar.
La espiral de extorsiones lleg¨® a alcanzar al senador republicano en la legislatura del Estado de Delaware Ernesto L¨®pez, quien hab¨ªa denunciado en p¨²blico la ola de amenazas contra instituciones jud¨ªas. Exigi¨® al parlamentario estatal sucesivos pagos en bitcoins bajo un inquietante m¨¦todo de coacci¨®n: ordenar en la Red la compra de drogas para que le fueran enviadas a su domicilio.
Uno de los principales grupos de presi¨®n jud¨ªos, la Liga Antidifamaci¨®n, ha informado de que los incidentes contra instituciones jud¨ªas aumentaron un 86% en EE UU durante el primer trimestre de este a?o. En su mayor¨ªa fueron atribuidos al auge del racismo de los denominados individuos blancos supremacistas. Medios de comunicaci¨®n israel¨ªes y estadounidenses se interrogaron entonces sobre los or¨ªgenes de un fen¨®meno de antisemitismo que coincid¨ªa con el inicio del mandato el presidente Trump.
Entre el 1 de enero y el 23 de marzo, cuando fue detenido, Kadar efectu¨® 245 llamadas de intimidaci¨®n, casi todas a centros sociales y colegios de la comunidad jud¨ªa norteamericana. La fiscal¨ªa israel¨ª pide diez a?os de c¨¢rcel para el chantajista, que era menor de edad cuando se efectuaron la mayor parte de las amenazas. Entre otros cargos, se le imputa tambi¨¦n blanqueo de dinero por el cobro no declarado en moneda virtual. La alternativa a la c¨¢rcel en Israel es una improbable extradici¨®n a Estados Unidos.
Autista profundo y con presuntos trastornos de conducta derivados del agravamiento de su tumor cerebral, el muchacho de Ashkelon que solo se relacionaba con sus ordenadores articul¨® una trama de pavorosa eficacia. Lo constata uno de los casos extra¨ªdos de la lista de cargos formulados en su contra. Un estudiante contact¨® con Kadar desde Estados Unidos. Estaba desesperado. Ten¨ªa un examen ese mismo d¨ªa y no lo hab¨ªa preparado. Le sac¨® en el acto del apuro. Telefone¨® desde Israel con una terrible advertencia y el instituto fue desalojado.
Las llamadas acabaron siendo su perdici¨®n. A pesar de los avanzados programas que enmascaraban su voz, no pudo ocultar indefinidamente su identidad. Despu¨¦s de haber seguido su pista por medio mundo, los investigadores del FBI sometieron las grabaciones a sucesivos filtrados digitales hasta que pudieron reconocer con claridad el inconfundible defecto de pronunciaci¨®n del extorsionador de la Web Oscura que cobraba en bitcoins.
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