Muere a los 83 a?os el dictador paname?o Manuel Antonio Noriega
El exgeneral fallece en un hospital de la capital de Panam¨¢, donde permanec¨ªa tras sufrir un tumor cerebral
Manuel Antonio Noriega, el que fuera hombre fuerte de Panam¨¢, muri¨® este lunes a los 83 a?os como lo han hecho pocos dictadores latinoamericanos del pasado siglo: apestado en su pa¨ªs, condenado por la justicia y despu¨¦s de pasar casi tres d¨¦cadas en distintas prisiones. Solo le salv¨® de morir en la c¨¢rcel el tumor cerebral que le oblig¨® a ser tratado las ¨²ltimas semanas de vida en un hospital de Ciudad de Panam¨¢.
Han pasado m¨¢s de 27 a?os de la ¨²ltima imagen de aparente dignidad que se le recuerda a Manuel Noriega: el d¨ªa en que, vestido con su uniforme militar, bajo el que gobern¨® de facto Panam¨¢ durante seis interminables a?os (1983-1989), se entreg¨® a las tropas de Estados Unidos, su otrora aliado, despu¨¦s de la invasi¨®n que caus¨® la muerte de miles de personas. Desde aquel d¨ªa, 3 de enero de 1990, el rastro que ha quedado de Noriega ha sido el de su periplo carcelario en Estados Unidos, Francia y Panam¨¢, tres d¨¦cadas en las que su imagen se ha ido deteriorando, no as¨ª el legado macabro que arrastr¨® en su pa¨ªs. "Muerte de Manuel A. Noriega cierra un cap¨ªtulo de nuestra historia; sus hijas y sus familiares merecen un sepelio en paz", ha tuiteado el actual presidente de Panam¨¢, Juan Carlos Varela, al conocerse la noticia.
Muerte de Manuel A. Noriega cierra un cap¨ªtulo de nuestra historia; sus hijas y sus familiares merecen un sepelio en paz.
— Juan Carlos Varela (@JC_Varela) May 30, 2017
F¨¦rreo militar amparado por la CIA desde los a?os cincuenta ¨Cel director de la agencia en el a?o de su detenci¨®n, Bill Casey, se refer¨ªa a ¨¦l como ¡®¡±He?s my boy¡± [¡°este es mi chico¡±]- Noriega devino en un aut¨®crata gracias a su habilidad por contentar tanto a Estados Unidos, especialmente a la agencia de inteligencia, como al mismo tiempo saber relacionarse con la Cuba castrista, la Nicaragua del Daniel Ortega sandinista o Pablo Escobar y su cartel de Medell¨ªn, cuyos miembros campaban a sus anchas por la vecina Panam¨¢. Los v¨ªnculos con el narcotr¨¢fico fueron su condena en Estados Unidos.
Noriega escal¨® dentro de las fuerzas militares paname?as hasta llegar a lo m¨¢s alto, desde donde apoy¨® al general Omar Torrijos, fallecido en un misterioso accidente de avi¨®n en 1981. A partir de entonces, Noriega, como jefe de los servicios de seguridad e inteligencia, se convirti¨® en el hombre fuerte de Panam¨¢, el sobrenombre con el que se le conoci¨®.
Por aquella ¨¦poca, Panam¨¢ se hab¨ªa convertido en una pieza clave para Estados Unidos en el tablero pol¨ªtico latinoamericano, con la consolidaci¨®n de la Revoluci¨®n Cubana y el surgimiento de guerrillas en Centroam¨¦rica y Sudam¨¦rica. Mientras suministraba todo tipo de apoyo a EE UU para la contrainsurgencia, Noriega sum¨ªa a Panam¨¢ en una crisis econ¨®mica, pol¨ªtica y social como no se hab¨ªa visto hasta entonces. Aquellos que trataron de alzar la voz contra ¨¦l fueron aniquilados, caso del opositor Hugo Spadafora, quien fue hallado decapitado en 1985.
La suerte del dictador paname?o se fue al traste cuando Estados Unidos comprob¨® que Noriega no solo era su aliado, sino tambi¨¦n del narco. Si la CIA a¨²n lo ve¨ªa con buenos ojos, la DEA, la agencia antidroga, se inclinaba por todo lo contrario. En 1988, el general paname?o fue acusado en un tribunal de Estados Unidos de tr¨¢fico de drogas. Un a?o despu¨¦s, en diciembre de 1989, tras unas fraudulentas elecciones y un intento fallido de golpe de Estado, el presidente George Bush dio la orden de comenzar el bombardeo contra Panam¨¢, la conocida como Operaci¨®n Causa Justa, para tratar de capturar a Noriega. Este se entreg¨® el 3 de enero de 1990.
En 1992, Noriega fue condenado en Estados Unidos a 40 a?os de prisi¨®n, pena que le fue reducida a 30 ¡ªmientras segu¨ªa recluido con privilegios que no ten¨ªan otros reos¡ª y despu¨¦s a¨²n m¨¢s por buena conducta. En abril de 2010 fue extraditado a Francia, donde fue condenado por blanquear dinero del narcotr¨¢fico. Un a?o despu¨¦s, Estados Unidos aprob¨® que fuese extraditado a Panam¨¢, donde hab¨ªa sido condenado previamente en ausencia a 20 a?os por su implicaci¨®n el asesinato de Spadafora.
El dictador paname?o permanec¨ªa desde marzo en cuidados intensivos en estado cr¨ªtico tras ser sometido a dos operaciones en menos de ocho horas y despu¨¦s de sufrir una hemorragia cerebral, seg¨²n explicaron entonces su abogado y sus hijas. Meses despu¨¦s de ser extraditado desde Francia en 2011, se desvel¨® que Noriega padec¨ªa un tumor cerebral. Los m¨¦dicos aseguraron que esa masa en el cerebro creci¨®. No obstante, hubo quien, como su anta?o aliado, el exgeneral de la guardia nacional Rub¨¦n Dar¨ªo, asegur¨® que la salud del aut¨®crata paname?o se hab¨ªa ido deteriorando pero que la ¡°realidad hab¨ªa sido inflada¡± para conseguir su excarcelaci¨®n. Noriega, como tantos otros dictadores latinoamericanos, quer¨ªa morir en libertad. No lo logr¨®.
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